Es difícil acostumbrarse a otra persona, y se siente mal, odia engañarse a sí mismo mientras lo besa, no puede con la culpa detrás de los besos.
No sabe cómo reaccionar.
No quiere saber cómo reaccionar, al saber que en cada beso que se dan piensa que son los labios de la otra persona, que en cada momento piensa que es otra persona, no importa que tan íntimo sea, ahora está viendo cómo lo descubren.
—¡¿Acaso me has estado comparando con él?!—grito apuntando hacia la foto de su ex.
—No te he comparado con él … Él no tiene comparación.
Lo sabía, la cara que tenía su pareja era admirable, digna de un premio.
Estará soltero otra vez.
—Dime lo que piensas de él, ahora.
Eso marcaría un antes y un después en su relación, cerrarán el ciclo sin fin.
—Su sonrisa es espectacular, tan intimidante que me pone los pelos de punta, sus ojos sangrientos muestran las incontables muertes que ha hecho, sus manos anotan los infinitos asesinatos que ha realizado, y su trono lo sigue esperando, es mi líder.
Geten baja las manos, aprieta los puños y se da la vuelta sin decir nada.
—Eres un completo imbécil, Dabi—gruñó antes de irse.
Pero él no se arrepiente, ahora ya no se seguirá engañando a sí mismo. Toma su chaqueta y se la coloca ocultando su rostro.
Ahora tocaba salir hacia el lugar donde habían tumbado el cadáver se Shigaraki Tomura.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
