Cloistral, Concern And Pity. (Karma X Male!Reader X Nagisa) [Yaoi]

#3 (3/?)

No sé como sentirme, muchas veces siento que no estoy viviendo en el momento, me siento desconectado de la realidad. Y es un sentimiento ahogado, como si no pudiera respirar. Pero por eso mismo es que nunca lo pienso demasiado, ya que si lo pensara con cuidado, probablemente terminaría con mis pulmones llenos de agua.

Los días pasan tranquilos, sigo intentando enfocarme en mis clases pero hay veces que me daría por vencido. Pero entonces recuerdo que Nagisa esta a mi lado, en las clases admiro su pacífico rostro pensante, me quedo perdido viéndolo. Él se esfuerza, parece que de verdad lo hace, y entonces recuerdo que yo también debería estar dando lo mejor de mí en esto, por Liz, por mi mismo, y por Nagisa también.

- ¿Qué piensas de Karma? - Le oigo preguntar durante nuestro almuerzo.

- Es misterioso. - Respondo con simpleza, mientras le doy otra mordida a mi sándwich. - ¿Por qué lo preguntas?

Él mira al cielo un momento, es un día claro y fresco.

- Siento que le atraes.

Dejé de comer en ese momento. Fue un silencio un poco largo, no sabia que decir. Miré a Nagisa y no podía descifrar lo que su rostro decía. No se veía enojado, pero tampoco se veía feliz al respecto. Sólo seguía comiendo su ensalada normalmente, sin apartar la mirada de las lechugas y los tomates.

- ¿Qué te hace pensar eso? - Preguntó con gentileza. - Honestamente no creo tener nada atractivo.

- Emm... - Él duda un momento. - No sabría decirte si él te mira en ese sentido, pero estoy seguro de que tiene interés en ti.

Me quedo viendo una mariposa que paso justo frente a nosotros. La mariposa vuela libre, batiendo sus alas en busca de una nueva flor.

Le veo a los ojos y le pregunto. - ¿Por qué estás tan seguro?

- Estuve con él el año pasado, sé distinguir cuando le interesa algo y cuando no. Además...

Él me mira sin parpadear, pone una mano en mi mejilla, y se acerca a mi rostro con una gentileza tan suave que me hace quedar mudó. No puedo apartar la mirada y él tampoco puede. Me permito verlo, ver cada parte de su fino rostro, su blanquecina nariz, sus bonitas pestañas, los profundos ojos y los rosados labios. Cuando me pierdo en la última parte de su linda cara, finalmente él habla en un murmullo.

- Porque eres muy lindo. Eres bonito en una manera misteriosa, y a quien no le parecería atractivo eso. - Lo dice sin apartar la mirada, en un murmullo tan delicado. Siento cálidos mis pómulos. Y no tengo palabras.

Estamos a unos escasos centímetros separados, un suave movimiento, un ligero acercamiento es todo lo que se necesita para que mis labios estén con los suyos. Sus ojos son profundos, apagados pero con un destello en ellos.

No quiero acercarme, pero tampoco quiero alejarme. Si hago algo ahora mismo, me arrepentiré en el futuro. Si no hago nada, en unos días podría arrepentirme de lo que no hice. No sé qué hacer, nunca lo sé.

El viento sopla ligeramente sobre nosotros, su largo cabello baila lentamente con el aire. Sin apartar la mirada, despacio, él se aleja. Sigo sin moverme, me limitó a ver como sigue comiendo de su ensalada con la mirada al frente.

Actúa como si lo que acabará de pasar no fuera algo tan sorprendente. Entonces me pregunto cuál sería su reacción si le dijera que estaba a punto de besarle.

Estaba a punto de besar a mi mejor y único amigo. Un segundo más y lo hubiese hecho.

Veo sin ganas los trozos de panes en mis manos, de repente no tengo tanta hambre. Sin embargo, me los meto a la boca y me fuerzo a tragarlos para no desperdiciar.