F1 One Shots

Pierre 💙

Y/n esperaba algo nerviosa en un camerino de Alpha Taurin. Si alguien la veia allí harían preguntas y eso no era algo bueno.

Mientras miraba distraidamente su teléfono unos fuertes brazos la rodearon la cintura por detrás. Era Pierre. En cuanto sus miradas se cruzaron una sonrisa radiante apareció en los rostros de ambos.

Después de unos breves y tímidos saludos se fundieron en un tierno beso que él pronto profundizó apoyandola contra la pared.

- Para, Pierre, para. Nos van a pillar - dijo y/n entre risas.

- Me da igual - le respondió Pierre mientras besaba su cuello lentamente.

- Como me gustaría estar dentro de ti ahora mismo - le susurro en el oído y ella se estremeció. Pero un fuerte ruido desvío la atención de ambos e hizo que se detubieran.

- El entrenamiento va a empezar, tienes que estar concentrado y Toto seguro que me está buscando. Tengo que irme - comento y/n sin que la estúpida sonrisa se le borrará.

- Odio imaginarme a ese cerdo tocandote, eso es lo que me desconcentra. Pensar en ti me centra - respondió Pierre apoyando su frente en la de ella.

- Lo sé y odio esta situación pero sabes que no tenemos otra opción - esta vez Pierre la miró serio y le dijo:

- Siempre hay otra opción - ella no respondió, sabía que tenía algo de razón.

- Me tengo que ir, mi equipo me estará buscando y me tengo que subir al coche - afirmó Pierre recuperando la sonrisa y dándola un pico rápido

- Adiós, y suerte - le despidió ella.

Ante de salir del camerino, y/n espero un par de minutos tras la salida de Pierre. Debía de ser cuidadosa. En el camino devuelta a la zona de Mercedes, reflexiono sobre la situación en la que estaba metida. Todo esto era injusto, era injusto para ella, para Toto y sobre todo para Pierre.

Durante las vacaciones de navidades al Caribe, con unas amigas, conoció a Toto Wolff, el famoso director ejecutivo de Mercedes, que también estaba pasándolas allí.

Sólo bastó una conversación y un par de copas en la discoteca del hotel para que los dos tuvieran una noche movida. Y contra toda predicción y a pesar de la diferencia de edad empezaron algo así como una relación. Al principio solo era sexo, un sexo increíble hay que aclarar, pero poco a poco se fueron enamorando.

Él la introdujo en el mundo de la f1 que le encanto y pronto se convirtió en una persona habitual en la pista. Acompañaba a Toto en todas las carreras y por ello viajaba a nuevos lugares.

Ahí fue donde conoció a Gasly.
Quien le llamo la atención en Moza, en el Gran Premio de Italia, cuando ganó por primera vez.

Y/n se sorprendió de verle tan feliz, tan lleno de vida por lo que para ella era solo una simple victoria. Y esa noche, en la celebración fue la primera vez que intercambiaron palabra.

Para Pierre fue un flechazo inmediato. Era la chica más bella que había visto en su vida. Con grandes ojos de un verde oliva, labios carnosos y pecas esparcidas delicadamente por sus mejillas. Todo adornado con ese aire exótico y acento, dejó a Gasly hipnotizado. Y a lo largo de la noche, y/n lo sintió también, esa sutil atracción.

Cada vez que ella intercambiaba una mirada o algunas palabras con Pierre en la pista se iba desenamorando más de Wolff y se iba enamorado más de Gasly.

Hasta que un dia ocurrió lo inevitable y mientras estaban en Mónaco, cuando toda la gente estaba centrada en Lewis Hamilton, el ganador de la carrera, y Mercedes. Pierre y ella se quedaron solos contemplando una vista excepcional de la ciudad. Y entre frases sin importancia, cuando ambos se miraban profundamente a los ojos y apenas unos pocos centímetros les separaban, se besaron.

Fue un profundo beso que despertó algo dentro de los dos amantes. De inmediato supieron que a partir de allí no había vuelta atrás.

Pasaron las semanas y con ellas las carreras y los encuentros fugaces. Ambos estaban profundamente enamorados.

Pero aunque él la amara y ella le correspondira la situación era muy complicada. Y/n sabía que si Toto se enteraba no sólo la dejaría sino que también se ocuparía de hacerle la vida imposible a Pierre, tanto de manera personal como profesional. Y ella no podía permitir eso, no permitiría que por su culpa Pierre no pudiera dedicarse más al deporte que tanto amaba. Por otro lado, la única razón por la que veia a Pierre casi todos los días era porque acompañaba a Toto en todo lo relacionado con la f1. Si le dejaba, no podría verle más, al menos no con tanta frecuencia y ella sabía que no se le daban bien las relaciones a distancia, no funcionaría. Así que la opción más segura era seguir con eso, siendo amantes en secreto.