Un Alfa Diferente

VI.- Peligro

La cena había terminado bastante bien y más cuando Mitch al fin pudo cerrarle la puerta en la cara a Peter. Cuando el alfa giró vio a su padre viéndolo con cariño.

- Cachorro, no deberías ser así con los alfas, no todos son como él. – acarició las mejillas del chico – Tú eres la prueba de que los alfas pueden ser muy buenos y respetar a todos, ser lo que debían ser desde el principio: unos protectores

Mitch suspiró y abrazó a su padre con cariño.

- Odié ser alfa por mucho tiempo y ahora que encontré a mi omega quiero ser el mejor para él. Tengo miedo de convertirme en un alfa como ese bastardo

- Jamás vas a ser como él, tu eres noble, amable, te preocupas por los demás. Gracias por cuidar de mi pero aquí entre nosotros me gustaría ver hasta donde llega Peter ya te había dicho que fue mi crush desde hace años solo que tenía muchas cosas que hacer en ese momento y simplemente lo deje ir

- Pero ahora pueden estar juntos pero justo por esa razón no se lo dejaré tan sencillo además es divertido verlo aunque sea un poco asustado – le dijo Mitch con una sonrisa a lo que Noah negó con la cabeza

- Ni voy a discutir contigo, eres demasiado testarudo cachorro

- Aprendí del mejor

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Mitch abrió los ojos, su cuerpo le dolía demasiado, se encontraba en una especie de sótano encadenado a la pared, podía saborear su propia sangre.

Lo último que recordaba era estar en camino a la mansión Hale para pedirle a Peter que cuidará de su padre.

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Mitch se encontraba con Derek caminando por los pasillos del instituto, ya habían pasado algunas semanas desde la cena así que desde entonces el alfa se había estado juntado con los chicos y obviamente con Derek, siempre estaba con su omega y así ya se conocían mucho mejor.

El celular del alfa sonó logrando que frunciera el ceño al ver el número de Melissa.

- Si... - su mirada se oscureció – Te veo ahí

- ¿Todo bien? – le preguntó Derek preocupado al ver como el rostro del alfa había cambiado

- Atacaron a mi padre, está en el hospital. Tengo que ir a confirmar algo – dijo Mitch comenzando a caminar hacia la salida

- Voy contigo – le dijo Derek decidido

Mitch asintió, ambos subieron a la motocicleta y fueron al hospital. Al llegar Melissa los llevó a la habitación de Noah, quien se encontraba todo golpeado, con vendas por todo su cuerpo.

- Lo hallaron cuando fue a comprar comida para Parrish, Laura y él; lo habían golpeado sin parar, buscamos signos de violación y al parecer no hubo ninguno. Aún no encontramos al culpable, sus huellas no estaban registradas en el sistema – le informó Melissa

Mitch respiró profundo, su respiración era algo acelerada.

- No van a encontrarlo – la beta y el omega lo vieron confundidos – Él no está en el sistema, sé quien es y viene por mi – comenzó a caminar hacía la salida pero fue detenido por Derek

- ¿A dónde vas?

- Necesito pedirle a tu tío un favor, no puedo dejar a mi padre solo y tampoco a ti, sé que puedes defenderte pero la persona que hizo esto es demasiado inteligente y salvaje, él no tiene piedad y menos con los omegas así que necesito que te quedes aquí y llames a los chicos, cualquier persona cercana a mi puede estar en peligro – le dijo Mitch suavizando su mirada

- ¿Estarás bien?

- Puedo cuidarme, me importa demasiado que tú estés bien – le dijo Mitch para después dejar un beso sobre su frente con cariño

Derek lo vio partir con un mal presentimiento.

El alfa conducía hasta la mansión Hale cuando otra motocicleta se estrelló contra él logrando lanzarlo lejos causándole carias heridas dejándolo apenas consciente.

Lo último que vio fue la figura de un hombre castaño de ojos whiskey.

- Hola bastardo

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- Hijo de puta – dijo Mitch entre dientes

- Esa no es la manera de hablar de tu abuela querido hijo – le dijo el hombre con una sonrisa asquerosa

- No eres mi padre Jonathan, solo eres un donador de semen, eres la peor escoria que hay en este mundo – le dijo Mitch recibiendo un golpe en su rostro logrando que escupiera sangre

- No me importa lo que opines, ya me vengué de ese estúpido omega pero ahora te toca a ti, pagarás por todo lo que me hiciste. Espero que te hayas despedido de tu dulce omega porque no volverás a verlo