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—¿Por qué tanto miedo, hyung? —le preguntó Jeongin, pero Seungmin seguía negando con la cabeza—. No es la primera vez que lo hacen.

—Porque antes no había nada entre nosotros, ahora hay un... sentimiento. —Sí que le costaba aceptarlo en voz alta.

—¿Y eso no lo hace aún más especial?

—Sí, pero Jeongin, no lo entiendes.

—Será emocionante porque ahora son novios y se quieren —dijo y por poco no le salían brillos de los ojos.

—Se nota que no sabes nada.

Las cejas del menor demostraron su enfado. Está bien que el no haya tenido experiencias sexuales como todos sus amigos, pero tampoco podían desacreditar su opinión.

—Seungmin, no lo molestes —Minho lo defendió—. Jeongin te está dando un consejo y no se equivoca, te estás preocupando por nada.

Kim se levantó de la cama y encaró a sus dos amigos en el sillón frente a él.

—¿Entonces qué?

Minho pidió la palabra antes de que Jeongin se adelante—: Si te incomoda una situación íntima con Changbin, es mejor que se lo digas y vean. Bin no es un imbécil, te escuchará y sabrá que lo mejor es no hacerlo.

—Es que —sacudió su cabello—, ayer estuvimos a punto de iniciar algo más, pero sentí que no era lo correcto, como si volviéramos a lo mismo cuando no me interesaba tener algo formal con él.

—¿Te trae recuerdos?

—Sí —se levantó para sentarse entre los dos—. No quiero volver a eso —dijo mientras se escondía en el pecho de Jeongin.

Minho asintió y palmeó su cabeza, como si fuera un cachorro y él su amo que quiere darle cariño.

—Changbin hyung no sacaría ventaja de ello, veo que te quiere de verdad —lo animó el menor—. A decir verdad, no creí escucharte tener este problema Min.

—Ni yo.

Ante el ánimo pesado de sus dongsaengs, Minho rodó los ojos y los abrazó—: Ustedes, par de niños, deberían dejar de llenarse la cabeza con problemas.

—¡Pero yo no me estoy quejando! —Reclamó Jeongin y luego Seungmin rio, sintiéndose mejor.

—Por ahora, querrás decir.

—No suelo quejarme, hyung, qué mentiroso.

Minho se separó y les extendió ambas manos.

—Párense, los llevo a comer.

—¿Puedo avisarle a Hyunjin hyung?

Ahí iban de nuevo, Jeongin y Hyunjin no dejaban de salir o verse desde hace tres semanas, tanto así que Seungmin tuvo que pedirle con anticipación a Jeongin para que haga espacio en su agenda y vaya a su casa. Según Minho, Hyunjin era un ladrón de Innies.

—Sería la primera vez que salimos junto a él —aceptó Minho.

—¿Qué? Pero quedamos en que solo los tres.

—Solo por esta vez, Min. —Rodeó su cintura para convencerlo.

—Se supone que le cancelé a Changbin hyung por estar con ustedes, sino estaría en un campamento comiendo malvaviscos.

—Creí que querías huir de hyung.

—Sí, pero también quería verlos, no intentes maquillar mis intenciones. Hyung y yo sabemos que existe un momento para los amigos y otro para los dos.

──just a tweet𓆇⊹ hyuninꜜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora