Pov Mew
-Gulf, como entraste?
-No recuerdas? Tengo las llaves de tu departamento y tu del mío -Dijo el de orbes miel neutralmente mientras miraba directamente al pequeño ser- Y el... ¿Bebé?
Me quede totalmente callado pensando en una respuesta. No le iba a mentir porque Gulf tenía un don en descubrir cuando yo mentía. Por lo que opte una manera más sutil de decir las cosas.
-Recuerdas... Cuando mi madre me decía si lo amas lo dejas ir -Dije nostálgico mientras cerraba los ojos tratando de sonar seguro.
-...Si... -Gulf decidió sentarse en frente mío para mirarme mejor mientras el bebé me pedía que lo alce.
-Ya sabes lo que pasará, ¿no? -Alcé al bebé para ponerlo en mis piernas y esconder mi cara en su pequeña cabecita mientras el pequeño miraba curioso a Gulf.
-Es... No... -Gulf dudaba en agarrarle la mano al pequeño, pero opto en no hacerlo.
-Te amo, pero debo dejarte ir... -Alcé mi vista para mirar a los ojos de mi amado que solo estaba sorprendido, pero luego relajo su faceta.
-No estoy encerrado para que me dejes ir, Mew -Gulf clavo sus ojos sobre los míos seriamente.
-Pero estas encadenado a mi... Y no quiero que también estes encadenado a mi hijo...-Sonreí débilmente intentando no llorar.
-Tu hijo?! -Gulf miro al bebé y a mí como tres veces para luego pequeñas gotas aparecieran en sus ojos- M-Me engañaste?
-Nono, nunca lo haría... Solo que debemos distanciarnos... Tú por tus sueños y yo por el pequeño... -Le di la vuelta al bebé para mirar dulcemente a sus ojitos que el ultimo empezó a jugar con mi nariz.
-Pero Mew... Puedo tener otros sueños... -Gulf apretaba sus puños fuertemente aguantándose las ganas de llorar mientras que me miraba suplicante.
Pequeñas lagrimas ya recorrían en mis mejillas haciendo que el bebé toque mis lágrimas y luego quede mirándome unos segundos para echarse a llorar débilmente a lo que yo lo abrace haciendo que el pequeño esconda su pequeña cabecita en mi hombro.
-No Gulf... Tienes tus sueños y no cambiaran... -Me levante para dejar al bebé en su cuna y mirar Gulf.
Lo mire un momento admirándolo como era. Todo de él ame y seguiré amando hasta que muera. Me acerqué a él y le di un último beso lleno de dulzura y cariño haciendo que Gulf rompa en llanto para luego abrazarme.
-Pero puedo cumplir mis sueños junto a ustedes! -Grito en un mar de lágrimas mi azabache.
-NO Gulf -Soné seco apropósito, llevar una vida de tres, que uno aún no tenga su título y el otro apenas empiece a trabajar sería difícil y lo sabía, no quería arrastrar a Gulf hacia fracaso. Solo por esa razón, quería que mi Gulf tenga su vida aparte mientras que yo cuidaría a Win.
-...Cuando... Sea profesor... Volveré por ti.
-No hace falta mi Gulf... No te preocupes por mí, Win lo hará -Bese la cabeza de Gulf para que luego me mire.
-Espero que Win te cuide como yo lo hice y haría por ti -Gulf se secó las lágrimas para luego sonreírme tristemente.
-Lo hará... Adiós Kanawut.
-Hasta luego... Suppasit.
Y desde ahí nuestros caminos tomaron rumbos diferentes.
Él con destino a ser un gran profesor.
Y yo a punto de tener ese gran trabajo y con un hijo en brazos.
Con suerte... El destino nos cruzara de vuelta y pueda mirarlo un tiempo más.
Con tristeza, guarde en un estante el collar que me había regalado Gulf, para mentalizar que, al sacarme ese collar, deje a Gulf.
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Mi hijo
FanfictionADAPTACIÓN Tenía un problema. Una pequeña vida dependía él. ¿Cómo haría el para proteger al pequeño? O, mejor dicho. ¿Querría el protegerlo?