୨ৎ 16 Razones︙MiChaeng⋆

『♡21: Fiebre』

3 días después...

ChaeYoung ajustó su tapabocas con una de sus manos mientras anotaba la última respuesta de su examen.

Se levantó y entregó la hoja a la profesora que le miró mal.

— Salga de mi clase, no lo quiero ver — dijo empezando a revisar la hoja. ChaeYoung se quedó ahí parada — ¿Qué hace todavía aquí? Váyase.

— Quiero mis resultados — la mujer bufó y se dispuso a revisar para entregarle a la pelirosa la hoja lo más rápido posible.

—Listo — una voz a las espaldas de ChaeYoung hizo que la profesora alzara la vista. Mina estaba tras el pelinegro extendiendo su hoja.

La mujer entregó la hoja a la pelirosa que sorbiendo su nariz, salió de ahí.

Minutos después salió la peliamarillo con su hoja en la mano. Volteó a ambos lados y miró a la pelirosa caminar hacia las escaleras, al parecer su lugar favorito para sentarse.

Mina siguió a la pelirosa, se acuclilló y posó sus manos frías en las mejillas de la otra.

— ¿Por qué lloras? — preguntó con preocupación, preocupación que aumentó cuando la pelirosa tembló por sus manos frías y las mismas captaron la temperatura alta de la menor.

— No estoy llorando, unnie... — dijo atrayendo sus piernas a su pecho.

— Tienes fiebre — dijo tocando la frente y cuello de la otra — No deberías estar aquí, ¿para qué viniste?.

— Hoy tenemos dos exámenes y un debate. No podía faltar — dijo temblando por el repentino frío que le invadió.

— No, mocosa. Debes estar en tú casa descansando — dijo peinando el cabello de la otra — Los profesores pueden entender que estabas enferma.

— No, unnie —negó bajando el tapabocas revelando su nariz rojiza — Hoy tambien tenemos nuestra cita...

Mina rió.

— Eso no importa, mocosa — dijo sentandose a su lado, con su espalda pegada en la pared — Podemos tenerla otro día, debes ir a tu casa y descansar — ChaeYoung volvió a negar con su cabeza y se acomodó entre las piernas de la peliamarillo que le miró en silencio.

— Tenemos tres horas libres antes de... Los demás exámenes y el debate — dijo recostando su cabeza en el hombro de la peliamarillo.

— Descansa...— dijo abrazando a la otra para darle calor mientras sufría el frío de la fiebre.

— ¡Yo no! — gritó DaHyun alzando sus manos.

— ¡Yo no! —gritaron JeongYeon y Sana haciendo la misma acción. Faltaba una hora para entrar a su siguiente clase, pero, a recomendación de DaHyun debían despertar a la pelirosa dormida encima de Mina.

— ¡Yo tampoco! — dijo con el ceño fruncido.

— Perdió, unnie. Usted la despierta — dijo DaHyun.

— Usted es su... Novia — dijo Jeong haciendo señas con sus manos.

— No soy su novia — contesto haciendo que las otras tres rodaran los ojos o rieran.

— Solo despiértelo, unnie pollito — dijo Sana.

Mina gruñó por el apodo del cual las otras tres reían.

Bajó la mirada y miró a la pelirosa dormida,  con parte de su cabello cubriendo sus ojos.

Alzó la mano que tenía libre y peinó el cabello.

—Mocosa... Despierta — dijo agitándola con suavidad — ChaeYoung... Hey...picó con su dedo las mejillas de la otra, exactamente en donde se hacían los hoyuelos — ¡Son ChaeYoung! — alzó un poco la voz y nada.

ChaeYoung tenía el sueño pesado.

— ChaeYoung... —llamó de nuevo, torció la boca y, subiendo la mirada escarbó en su chaqueta rezando porque hubiese un caramelo allí. Al encontrarlo lo destapó y, con ayuda de sus dedos, adentró el caramelo en la boca de la pelirosa — Despierta, mocosa.

— Umh... — la pelirosa se removió con el ceño fruncido y saboreó el dulce en sus labios.

—Al fin — Mina rodó los ojos y luego le dirigió una media sonrisa a la pelirosa que, más despierta, se acomodó para ver a las otras tres.

—Hace calor... — dijo quitando su chaqueta.

— La fiebre... — dijo Mina en un tono suave mientras peinaba su cabello con ternura.

—vLlamé a tú mamá — avisó DaHyun — Vendrá a hablar con los profesores para que te hagan las evaluaciones luego.

— Pero...— negó limpiando el sudor de su frente.

— Yo dije que la llamara — dijo Mina.

— ¡Pero...— volteó a verla con el ceño fruncido, el mayor dejó un tierno beso en la punta de su nariz y dijo:

—Cuando te mejores tendremos la cita, mocosa — y ChaeYoung no sabía si el sonrojo era por la mayor o por la fiebre.