ABRAHAM MATEO: SUEÑOS CUMPLIDOS. PARTE 1

Capítulo 8

Estaba entre la espada y la pared.
Álex era y es un gran amigo mío. Era alto y delgado. De ojos marrones y pelo corto por los lados y un poco de cresta por arriba, Álex era sin duda el chico perfecto, aunque perfecto no hay nadie.
Álex es conocido en casi toda (por no decir toda) Jávea por su simpatía y su forma de ser, esa forma con la que saca sonrisas a todos aquellos que lo necesiten, hace olvidar todos aquellos problemas que tiene la gente... Él me enamoró desde que me miró por primera vez, nunca llegué a pensar que cada vez que le tuviera cerca, tuviera esa sensación, la cual sentía que el corazón me jba a estallar.
Le he amado, le amo y le amaré

Pero tanta palabra se queda corta para describirle

Era o Álex o Abraham, Abraham o Álex..

El día siguiente quedé con Belén y Ana a comer por la playa. Mientras comíamos decidí contarle lo que me estaba ocurriendo con Abraham y Álex, ya que poca ayuda es mucha.

-Nosotras no te podemos ayudar, eso es un tema que apunta a lo sentimental- Dejó caer Ana.

-La verdad que deberías dejarte llevar por lo que tu corazón diga- Apuntó Belén.

-Eso me ha dicho mi hermana, mis amigas de Jávea, ¡incluso mis padres!. Pero el problema es que mi cabeza me dice Abraham y mis sentimientos gritan como locos Álex. Pero por un lado Álex ni siquiera se si quiere algo conmgio o si ha quedado conmigo como cualquier día de esos en que vamos juntos a la biblioteca.
Pero cuando pienso en Álex enseguida se me viene a la mente la cara de Abraham, de esos labios que me dieron aquel beso a pie de la playa, un beso que se fue nadando junto a las olas, un beso que quedó en el recuerdo.

Terminamos de comer cuando recibí una llamada:

-¡Hola Aroa! Que te parece si vienes a mi casa ? Ahora mismo, necesito enseñarte una cosa. Ahora nos vemos! Por cierto, soy Abraham.

Colgó, no me dejó contestar, ¿Que queria decir todo aquel paripé?

Ahora mismo si que estaba más que nunca en una difícil situación.

Decidí dejar la mente en blanco y me tomé un baño relajante antes de salir hacia casa de Abraham.

De repenté abrí los ojos, cogí mi móbil y vi que eran las 21:00.

-¡ME HE DORMIDO!- empezé a gritar como una loca y mi hermana entró corriendo a ver que sucedía.

-¡¿Aroa pasa algo?! ¿Que son esos gritos?

-¡Había quedado con Abraham y me he dormido en la bañera! Dios mio que cabeza la mía..

Dejé pasar la situación y me puse mi pijama corto y me hice una coleta y me puse a leer.

En cuanto empezé a coger sueño sonó la puerta "¿Quién será?" pensé.
Mis padres no podían ser ya que seguían perdidos por algún lugar de Andalucía de cita en cita romántica.

Abrí la puerta y el tiempo pareció aturarse.

"Esto no puede estar pasando" pensé.

-¡Sorpresa!- Dijo él con un ramo de rosas en la mano