Días después de haber confesado y de haber hecho jurar a Harry sobre su dedo que no diría ni una palabra de aquella historia al señor Wesley, Tom, se sintió mucho mejor con respecto a su estado, lo que indicaba que se acercaba el momento de abandonar aquel maravilloso lugar. Sin embargo, el chico temía haberse acostumbrado a las comodidades que vivía durante su estancia en casa de Harry, y no podía dejar de pensar en el día en que tendría que volver a la calle. No quería volver a esa vida, pero lo último que quería Tom era dar aún más problemas al amable pastelero que lo había acogido.
Cuanto más tiempo se quedara, más difícil sería irse. Sobre todo ahora que el vínculo de amistad con Teddy, que lo visitaba todos los días, y con Harry, que siempre estaba a su lado para suplir cualquier mínima necesidad, había crecido exponencialmente.
Por eso, el pequeño, ya capaz de moverse sin sentir tanto dolor, se levantó de la cama en plena noche, puso en orden sus pocas pertenencias y con el corazón en la mano, escribió una última nota a sus amigos, despidiéndose de ellos.
La dolorosa verdad era que Tom no sabía cómo enfrentarse a ellos diciéndoles que se iba. Sin embargo, en cuanto terminó de bajar las escaleras evitando hacer el menor ruido posible, se encontró con una visión un tanto inesperada. Allí estaba Harry, con un uniforme negro de chef, trabajando meticulosamente en un magnífico pastel redondo de dos pisos. Era impresionante el ingenio con el que moldeaba la masa en bellas formas para decorar esa obra maestra, concentrando todos los sentidos en ese encantador trabajo. Y esa fue la suerte de Tom, ya que, al no haber sido notado, pudo volver a su habitación como si nada hubiera pasado.
Eso si no fuera un poco torpe y no hubiera tropezado con un escalón, haciendo un fuerte ruido al caerse sus cosas.
"¿Hay alguien ahí?" preguntó una voz ronca desde la cocina, acercándose a donde estaba el niño fugitivo "¡Oh, Tom, eres tú, qué susto! ¿No deberías estar en la cama?" preguntó Harry, y pronto su mirada se dirigió a la mochila con el puesto a los pies del chico congelado con una expresión de asombro en el rostro. ¿"Es que..? ¿te vas?"
"Y... yo..." empezó Tom, pero en cuanto se dio cuenta de que no sabía qué decir, se tapó la cara con ambas manos intentando ocultar los sollozos de arrepentimiento tras ver la cara de decepción del pastelero.
"Oye, no llores Tommy" ordenó utilizando el recién aprendido apodo del menor haciendo que se derrumbara de culpa "Vamos, tomemos una taza de chocolate mientras hablamos de ello..."
Con delicadeza, Harry le acompañó a un taburete mientras el pastelero se dedicaba a preparar una bebida caliente para el chico.
"No me merezco nada de lo que estás haciendo por mí" pronunció Tom, más calmado ahora, observando a su amigo a través de un líquido espeso y humeante en una taza frente a él "Sólo estoy estorbando en sus vidas y cuanto antes me vaya mejor..."
"No vuelvas a decir nada de eso" regañó, vertiendo una generosa cantidad de nata montada sobre el chocolate, "ayudarte no es ninguna molestia, te lo aseguro..." Mientras Tom seguía frunciendo el ceño, Harry continuó. "Cuando cuidabas a Teddy todos los días después de la escuela, ¿era una carga?"
"Así es como me siento cuando te cuido" susurró, dando un sorbo al líquido de su taza, haciendo que Tom sonriera al ver el bigote de nata montada en la comisura superior de sus labios.
"Gracias por todo, Harry - me agradeció - Si no fuera por ustedes, seguramente estaría muerto, pero no puedo quedarme.
"No, realmente no tienes que ir" insistió "Por favor..."
"Aquí no hay lugar para alguien como yo, señor Potter".
"¿Alguien como tú?"
"¡Sí! ¡Alguien como yo, un miserable ladronzuelo que vive en una pequeña tienda de campaña en algún parque!" Tom suelta un nudo en la garganta, mientras que Harry no se encuentra en una situación diferente.
"¿Conoces la historia de Ron? ¿Blaise? ¿O incluso la de Teddy?" pregunta Harry con su habitual tono de calma en la voz, recibiendo una señal negativa por parte del otro "no eres diferente a ninguno de nosotros... Se lo aseguro."
"¿Perdón?" habló por fin, estirando sus manitas para coger su taza de chocolate, cerrando los ojos para disfrutar de todas las sensaciones que le aportaba el dulce sabor de la bebida. "¿Puede decírmelo?"
"Bueno... antes de ser adoptado por Ron, Blaise fue criado por sus tíos, que le obligaban a entrar en las casas las noches de Navidad para robar regalos... ¿te suena? " Tom esbozó una pequeña sonrisa amarilla y asintió para que Harry continuara "un día se metió en la casa de cierto pelirrojo que lo pilló in fraganti, en ese momento Ron aún estaba haciendo la universidad conmigo y vivía en un cubículo en el que apenas cabía, pero aun así pidió un préstamo a sus padres y presentó una demanda pidiendo la tutela de Blaise" Harry hizo una pausa soltando una pequeña risa nostálgica "imagínate, un chico extranjero de 19 años siendo responsable de otro de 14."
"Ron es una persona maravillosa..."
"Es cierto que tiene un corazón enorme, 2 años después presentó una petición de adopción para Teddy, que tenía 5 años y acababa de perder a sus padres.... Los asesinaron delante del niño porque eran extranjeros", los ojos de Tom se abrieron de par en par, ¿cómo es que nadie se lo había dicho antes? "Mi pequeño sólo se escapó porque estaba escondido en un armario..." Harry suspiró con los ojos enrojecidos mirando el pastel que estaba decorando antes "Necesitaba ver lo roto que estaba cuando Ron lo trajo, sólo parecía un muñequito sin vida..."
"Pobre Teddy... un niño tan precioso no merecía sufrir tanto" concluye Tom, a lo que Harry se limita a asentir "¿y tu historia?"
"¿La mío? no es gran cosa..." Tom se acomoda en el taburete con una sonrisa que decía "tengo toda la noche, estoy esperando" "ok... huum, mis padres como que nunca aprobaron mi orientación sexual, así que cuando elegí asistir a una universidad culinaria, parece que se encendió una chispa que explota todo.... En resumen, tuve que valerme por mí mismo en Londres y hasta hace poco vivía en una caravana apretada trabajando en una papelería para pagar mis estudios... Ron era mi compañero en la universidad, así que decidimos montar una sociedad, yo vendí mi "casa" y él completó el dinero para que empezáramos nuestro negocio..."
"Vaya... Increíble..." fue lo único que logró pronunciar Tom.
"Puedes ser parte de esto... ¿Sabes qué? Estamos buscando nuevo personal", propuso Harry, "la paga no es tan buena, pero..."
¿Esto estaba ocurriendo realmente? ¿Alguien le estaba dando una oportunidad? Tom ya no escuchaba nada de lo que decía el anciano.
"¿Cuándo empiezo?"
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N/AD: Lo siento, realmente me tomé mi tiempo, problemas personales.
Espero que os guste <3¡Hasta el próximo capítulo y besos! (Espero no tardar mucho)
M/N: Ahora les voy trayendo los 3 primeros capítulos de la maratón, mas tarde completo los otros 3
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Little Mouse - Tomarry ~ Traducción
FanfictionTom entra en la pastelería de Harry por la noche para robar trozos de pastel y deja notas pidiendo perdón.... Autor original: @AziPerhart Adaptadora: @babykarol__ Cuento con el permiso de la autora original y de la adaptadora para traducir y subir...