Little Mouse - Tomarry ~ Traducción

Capítulo 18

Tragando con fuerza, nuestro joven héroe se dirigió, pie a pie, a la pequeña ventana de cristal de la puerta de la cocina. Aunque el pánico se apoderó de sus poros, dificultando la respiración, se sorprendió al ver lo que ocurría en la sala de la pastelería y se permitió aliviar parte de la tensión de su cuerpo.

(Si les pasa algo me va a dar algo en el cora :'v)

Sólo la parte de cristal de la puerta estaba rota y nadie había entrado en la tienda. Sólo había sido un acto de vandalismo llevado a cabo por jóvenes alborotadores, muy comunes en esa zona, Tom incluso podía escuchar sus gritos mientras corrían por la calle alejándose del lugar.

No tardó mucho más que unos minutos en que se le pasara el susto y empezó a maldecir a la quinta generación de aquellos infractores, cuya imbecilidad superaba los límites imaginables, antes de ponerse a limpiar todos los cristales esparcidos por la tienda.

- ¿Sr. P..Potter? - Tom se sobresaltó un poco antes de reconocer aquella frágil vocecita que le llamaba - ¿Está usted bien?

- No has respondido a mi pregunta, Luna- regañó a la joven rubia que siempre le ayudaba a llevar la compra del supermercado a cambio de algo de dinero para la familia - ¿Qué haces en la calle a estas horas, pequeña?

(Lunita, mi niñaaa 💜💜)

- Le ruego que me disculpe, señor Potter, no era mi intención asustarle -respondió ella, encogiéndose en el frío invierno londinense-. La niña llevaba una ropa tan fina que sería un milagro que la protegiera de la más mínima brisa primaveral.

- ¿No has respondido a mi pregunta, Luna? - insistió Tom, dejando la escoba a un lado-. ¿No te gustaría entrar? Puedo hacerte una taza de chocolate mientras hablamos...

Pero ella negó vehementemente con la cabeza, aunque su mirada se embelesaba al pensar en algo tan sabroso y cálido.

Tom conocía bien esa mirada, así que siguió invitándola.

- Lo siento, señor -respondió finalmente la chica, mirando al suelo-, pero no tengo dinero para pagarlo...

(Me parte el corazón 🥺💔)

- Oh no, Luna, te invito, no tienes que preocuparte -dijo el mayor con un apretón en el corazón-, la casa invita, pasa...

- Muy bien... - respondió tímidamente, aceptando la mano de Tom, que la guió hasta la cocina, donde empezó a preparar dos tazas de chocolate calientes. 

- Entonces... ¿por qué no estás en casa esta vez, ángel? - preguntó Tom de nuevo mientras ponía la taza en sus delicadas manitas.

- Muy bien... - respondió tímidamente, aceptando la mano de Tom, que la guió hasta la cocina, donde empezó a preparar dos tazas de chocolate calientes.

- Entonces... ¿por qué no estás en casa esta vez, ángel? - preguntó Tom de nuevo mientras ponía la taza en sus delicadas manitas.

- Ya no tengo casa- confesó la niña, con un pequeño brillo de vergüenza en los ojos.- confesó la niña, con un pequeño brillo de vergüenza en los ojos. - Mamá se fue cuando el banco se la llevó la semana pasada...

- ¿Has estado vagando por estas calles heladas todo este tiempo?- preguntó seriamente y jadeó cuando recibió la confirmación de la niña más pequeña - Virgen Santísima, Luna, ¿cuántos años tienes, once?

(Donde dice "Virgen Santísima", lo puse para cambiar el "Santa Cobrinha", y no sabia como ponerlo xd así que se me ocurrió, poner algo que se dice mucho en mi país)

- ¿Tengo doce años, Sr. Potter? - suspiró - Y no es que tenga elección...

- Lo siento, pequeña... Sé cómo te sientes...

- ¿Sabe?

- Por desgracia... - habló con tristeza, contando su triste historia a aquella hermosa niña, que le escuchaba con atención.

- Entonces, ¿Harry te perdonó de todos modos? - preguntó, asombrado por la narración.

- Y te perdonaría un millón de veces -una tercera voz entró en la cocina, sobresaltando a Tom y a Luna.

- ¡Cariño! ¡Deberías estar en la cama! - reprochó Tom, levantándose inmediatamente para guiar a su amado, envuelto en una manta, a un taburete alrededor de la mesa.

- Estabas tardando mucho, así que bajé a ver que hacías, estabas tan ocupado hablando que ni siquiera me oíste entrar... - explicó Harry, con la voz un poco más ronca de lo normal a causa del resfriado.

- Oh, siento haberlos molestado... - Luna se expresó sintiéndose culpable - Creo que es hora de ir...

- No tienes que ir si no quieres -intervino Tom, haciendo que Luna detuviera sus movimientos-. No es un problema, ¿verdad, querido?

- Si no la invitaras a quedarse, lo haría yo mismo - respondió Harry sonriendo a la niña - Tendrás que dormir en el sofá cama esta noche...

- Podríamos llamar a Ron y pedirle que traiga mañana la antigua cama de Blaise -planteó Tom con una mirada soñadora-, ahora que vive con Draco, no la necesitará...

(Siiiiiiii, ahora si todo se me cumplió, espero que Tom y Harry adopten a Luna y de paso que me adopten a mi también)

- Si, luego convertiremos el almacén en un verdadero dormitorio -convino Harry entusiasmado por las posibilidades.

- Ron puede indicarnos un buen abogado para que lo arregle ....

- ¡Esperen! - Luna interrumpió la conversación de los señores Potter en cuanto salió de su trance -¿Quieren que me quede?

- Si estás de acuerdo, por supuesto. - dijo Tom sintiéndose repentinamente inseguro, apretando con fuerza la mano de su marido.

Pasaron segundos antes de que la respuesta fuera finalmente dada por Luna con voz llorosa:

- Acepto...

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N/Ad: ¿Les gusto? Eso espero, he llorado, he llorado leyendo el fic, ahora lloro haciendo la adaptación del fic, maravilloso fic mds. Perdón por los errores, ya casi termina, ¡besos y hasta el próximo capítulo!

M/N: Bueno solo falta el Epilogó :'3