Capítulo 3: prólogo (2/3)

3 1 1
                                    

Al salir de la cocina vimos una puerta, que parecía dar al exterior, así que intentamos abrirla. Por mucha fuerza que pusiéramos no abría, era misión imposible

Después de aquello nos dirigimos al comedor, allí había dos estudiantes,al menos eso creo que son, un chico y una chica.

- Hola. ¿Vosotros también sois estudiantes?- Pregunté.- Yo soy Anna Brown y él es Eiji Fujui, somos la astróloga y el artista definitivos.

- Ah, hola. Yo soy Nori Yoshida. Soy el DJ definitivo. Ella es...

- Déjame presentarme a mi. Soy Fujuka Chiba, la bióloga definitiva. Supongo que lo vas a preguntar, así que ya te lo digo yo, soy géminis.

- Es como si me hubieras leído la mente, jajaja. Yo soy sagitario, ¿Y tú?

- ¿Yo?- Dijo Nori, parece que vive en las nubes.- Soy piscis.

- ¡Qué pesada eres! ¿Es que no sabes decir otra cosa?- Exclamó una voz familiar, me di la vuelta para comprobar quién lo había dicho, era Yuki, el pesado de antes.- "¿Qué signo eres? ¿Qué signo eres?" Pareces un disco rallado, qué pesada.

Justo cuando le iba a llamar la atención ya no estaba, había desaparecido o algo por el estilo.

- ¿Vosotros también lo habéis oído, verdad?- Pregunté desconcertada.

- ¿El qué?- Preguntó Nori, que parecía aún más desconcertado que yo.- No ha pasado nada ni nadie.

- ¿Q- Qué? Si lo he visto con mis propios ojos.

- ¡Da igual! ¡Nos acaban de encerrar junto a otros estudiantes que no conocemos de nada, como para no alucinar!- Exclamó Fujuka, tiene demasiada energía.

- Sí, tienes razón. Bueno, hasta otra; lo mejor será que busquemos a los demás estudiantes, si hay, claro.- Dije mientras me acercaba a la puerta.

- Por aquel pasillo hay unas clase, en una de ellas está la lista de nuestra clase, dónde están nuestros nombres.- Me aclaró Nori.- Hay 16 alumnos en total.

- Oh, muchas gracias, he conocido a siete ya.- Dijo Eiji con una sonrisa.- Me quedan otros ocho. ¡Adiós!

Seguimos por el pasillo que Nori nos había indicado. Había seis clases, aunque el acceso a cuatro de ellas era imposible, así que decidimos ir a las otras dos. Empezamos por la que estaba a mano derecha. Al entrar vimos a otra estudiante sentada, escribiendo.

- Ah, hola.- Dijo la chica mientras se giraba.- ¿Vosotros también sois estudiantes de Hope's Peak Academy?

- Así es, yo soy Anna Brown. Soy la astróloga definitiva.

- Y yo soy Eiji Fujui, el artista definitivo.

- Yo soy Aiko Suzuki, la poetisa definitiva. Nosotros tres aparecemos en aquella lista, junto a otros trece.

Nos dirigimos a ver la lista, tenían fotos nuestras de cuando debíamos tener aún teníamos doce años

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nos dirigimos a ver la lista, tenían fotos nuestras de cuando debíamos tener aún teníamos doce años.

- ¿Cómo tienen estas fotos?- Dijo Eiji.- En ningún momento las dimos ni dimos permiso, al menos yo.

- Lo darían nuestros padres.- Supuso Aiko.- Es lo más lógico.

- ¿Vosotros los recordáis?- Pregunté extrañada.- Yo sólo tengo recuerdos borrosos de mi infancia, no recuerdo caras tampoco.

- Sí, recuerdo todo, excepto cómo llegamos aquí; eso no me lo explico.- Explicó Aiko.

- Sí, yo también.- Añadió Eiji.- Creo que te vendría bien un descanso; tuviste alucinaciones, no recuerdas nada...

- Qué va, estoy perfectamente.- Aclaré.- Ahora vamos a buscar a los demás, así igual podremos salir.

- Si te mueres no es mi culpa, yo te avisé.- Dijo Eiji entre risas.

- No me mates tan rápido... Vamos a buscar a los otros. ¿Vienes, Aiko?

- No, me quedaré escribiendo este poema, aunque gracias por invitarme.

- Bueno, adiós.- Le dije a Aiko mientras salía por la puerta.- Nos vemos en el gimnasio. Espera; ¿Qué signo eres?

- Soy capricornio, de enero, por si te lo preguntabas también.

- Yo soy sagitario; ¡adiós!.- Ahora sí que sí me fui a buscar a los demás

Al salir de la clase fuimos a la que estaba justo enfrente. Al entrar por la puerta vimos a dos estudiantes. Estaban discutiendo sobre cómo era mejor ver las series, traducidas o VO. La chica tenía pinta de seria, pero al parecer no lo era.

- ¡PERO ES MUCHO MEJOR CON LA VOZ ORIGINAL!- Exclamó el chico.

- ¡ES DEMASIADO TRABAJO ESTAR LEYENDO TODO EL RATO! ¡PARA ESO TE COGES UN LIBRO!

Siguieron discutiendo durante media hora; ni se habían dado cuenta de nuestra presencia, y eso que habíamos hecho comentarios entre Eiji y yo. Cuando ya me harté decidí interrumpir la discusión.

- ¡Ejem! Hola, yo soy Anna Brown, la astróloga definitiva, ¿vosotros sois?

- Yo soy Aneko Fujiwara, la detective definitiva; a pesar de que no lo parezca.

- Y yo soy Kenzo Tsuji. Soy el skater definitivo. ¿Y tú quién eres?

- Me llamo Eiji Fujui. Soy el artista definitivo. 

- Y ya que estamos; ¿Qué signo sois?- Les pregunté.

- Yo soy acuario y ascendente libra.- Me respondió Aneko.

- Yo soy escorpio, y ascendente no tengo ni idea, tampoco es que me interese.

- Yo soy sagitario ascendente aries. Lo mejor será que vayamos a conocer a los otros cinco. ¡Adiós!

- ¡Adiós! Creo que están abajo, donde está la caldera.- Explicó Kenzo.

- Oh, ¡Muchas gracias!- Dijo Eiji mientras salía por la puerta.

Cuando salimos de aquella clase estuvimos buscando las escaleras que daban abajo. Cuando por fin las encontramos e íbamos a bajar; un anuncio nos lo impidió:

- Muuuuuy buenas a todos los estudiantes de la Academia Kibouagamine. Olvidad lo de conocer al resto de estudiantes, os quiero en el gimnasio en diez minutos.

Era la misma voz que el primer anuncio, sólo que esta vez venía acompañado de un vídeo, en directo supongo.

- ¡¿Q- Qué coño era eso?!- Exclamó Eiji aterrorizado.- ¡¿U- Un oso mitad blanco y mitad negro que habla?! ¡Anna, creo que no eres la única que alucina!

Antes de que le pudiera contestar escuchamos un grito, que provenía de abajo.

- Creo que no somos los únicos que lo hemos visto. Bajemos a ver.

Al llegar abajo vimos a los cinco estudiantes. Una de ellos estaba tirada en el suelo, aterrorizado, supongo que ella había sido quién gritó. 

- ¡Pero vamos a ver, tranquilízate de una vez!- Exclamó uno de ellos, que llevaba un traje de judo; al menos de eso creo que es.- ¡Ni que hubieras visto al diablo en persona!

- ¡Esa cosa era comparable con el diablo!- Dijo la chica que estaba en el suelo.

- Solo era un oso, seguramente de juguete.- Intentó calmarla la otra chica.

- ¿Perdón?- Decidí interrumpir lo que quiera que fuese aquello.- En menos de diez minutos tenemos que estar en el gimnasio, así que lo mejor será que vayamos.

Danganronpa: Wonder lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora