Capítulo 14: Impredecible

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Harry supuso que la conexión a tierra no era un castigo inmensamente terrible mientras dejaba que su magia pasara por encima del bloque de hielo perfectamente congelado frente a él.

Tenía comida, mucho espacio para deambular por su casa y muchas cosas que hacer que lo mantenían ocupado para no morir de aburrimiento.  Y también tenía la sensación de que Sirius estaba simplemente feliz ante la perspectiva de que los dos tuvieran horas extra para pasar juntos durante tres días, lo cual era reconfortante saberlo.

Pero con toda honestidad, no nadar era un poco agonizante.

A Harry le había sorprendido lo mucho que se había acostumbrado y dependiente del océano después de verse obligado a mantenerse alejado de él.  Y el hecho lo inquietó un poco si quería ser honesto.

Tuvo que evitar pasar unas horas en su baño, que los goblins habían convertido amablemente en una piscina, solo para que la conexión a tierra de Sirius no se volviera inútil.  El hombre estaba realmente intentándolo y Harry no quería arruinar sus posibilidades de ser una familia real simplemente porque no pudo nadar durante tres días.  Además, era solo el primer día y Harry perdería su racha de bromas contra Sirius antes de admitir que no estar cerca del océano lo estaba afectando terriblemente.

Sobreviviría a través de esta prohibición oceánica de tres días si fuera lo último que hiciera.

Su magia inspeccionó el cubo congelado con curiosidad mientras se infundía poco a poco en el estado congelado del agua.  El proceso fue lento, pero Harry se alegró de que al menos algo estuviera sucediendo en lugar de nada.  Poco a poco, pudo sentir la débil conexión que tenía con el cubito de hielo fortaleciéndose.  Engatusó su magia suavemente, animándola a continuar su lenta fusión con el hielo.

Fue realmente satisfactorio ver cierto éxito después de tanto tiempo de fracaso.  Supuso que debería haber pensado en este método primero en lugar de intentar congelar el agua a su antojo.  Si logró conectarse a la forma sólida del agua, debería tener más facilidad para manipular el agua para convertirla en hielo a su voluntad.

Sintió a Sirius moverse a su lado en el sofá, pero no se volvió para mirar.  Sabía que el hombre lo estaba mirando o continuaba leyendo sus libros sobre transfiguraciones: nivel de maestría.  Harry le había preguntado a Sirius exactamente qué planeaba hacer después de obtener la libertad, y Sirius obtendría la libertad, Harry se aseguraría de ello, y el hombre se había dado cuenta de que había pasado tanto tiempo empeñado en pensar en atrapar a la rata y recuperarse por el bien de Harry.  no había pensado en su propio futuro.  Por ahora, planeaba reanudar la Maestría que había considerado tomar algún tiempo antes de que la guerra destrozara su vida.  Sirius no estaba seguro de que todavía lo quisiera, pero era un buen lugar para comenzar que en cualquier otro lugar.  Afortunadamente, el hombre no había tenido problemas para revisar su material anterior y retomar lo que había dejado antes de su estadía en Azkaban con la ayuda de los curanderos y tutores goblin.

Harry lo sintió cuando su magia dio un zumbido contencioso cuando se conectó completamente con el hielo, girando, convirtiéndose en una parte perfecta del modesto bloque de hielo.  Una agradable frialdad se apoderó de él ante el éxito.  Harry suspiró, encorvado en el sofá, un poco cansado pero feliz de todos modos por su primer éxito con el hielo.  Para ser un cubo tan pequeño, ciertamente agotó su magia para sincronizarse con él.  Tendría que hacerlo unas cuantas veces más antes de poder realizar el proceso tan bien como lo hace con el agua en estado líquido.

"¿Tienes lo que esperabas hacer?"  Preguntó Sirius.  Harry se volvió para ver al hombre pasar una página de su libro, luciendo un poco distraído mientras su cerebro trataba de leer y conversar al mismo tiempo.

Moon BlessedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora