Sunoo despertó con una horrible resaca, no recordaba haber bebido tanto como para sentirse así, también no recordaba muchas cosas de la noche pasada, recordaba haber bailado y también la tienda 24 horas, también recuerda haber conocido a alguien ahí, un alfa realmente atractivo que olía demasiado bien, pero del cual no podía recordar el nombre.
Convencido de que el dolor de cabeza no desaparecería por sí sólo decidió levantarse e ir a tomar algo de agua y comer un poco pues su estómago reclamaba ser llenado.
Al llegar a la cocina se encontró con su padre a quien saludo son un simple buenos días y procedió a beber una baso completo de agua, para después servirse una taza de café juntó con algo de huevo para desayunar, apenas se sentó pudo notar perfectamente la mirada de su padre sobre el.
—¿Qué?—pregunto con la boca llena.
—Como que ¿qué? Sunoo—espeto el hombre molesto— ayer llegaste ebrio a casa—reclamo.
—Bueno sí, pero en mi defensa debo decir que es la primera vez que bebo alcohol y por eso me puse así— trato de calmar el pelinegro.
—Estas a pocos días de tu celo y bebes alcohol, no lo puedo creer.
—Aún faltan unos días para que entré en celo así que eso no tiene nada que ver—protesto.
—No se que voy a hacer contigo—negó con la cabeza— nos vemos en la tarde— se despidió besando la cima de la cabeza de su hijo y salió de la casa.
Sunoo acabo su desayuno y decidió volver a la cama, al fin era sábado y no tenía nada que hacer y con su celo cerca se sentía perezoso.
...
Heeseung no podía sacar la imagen del hermoso omega de su cabeza, dudaba que algún día pudiera, y es que no era cualquier omega, era su omega, suyo y de nadie más.
Claro que había dos grandes problemas, el primero era que el chico es menor de edad y el segundo que es hijo del shérif del lugar, por lo que Don le había contado la esposa del shérif, Seohyun, había muerto hacia algunos años a causa de una enfermedad, y también por lo que sabía su hijo era muy conocido en el lugar, y como no, sí tenía la fama de ser uno de los omegas más lindos del lugar, claro que nadie intentaba nada por ser hijo del shérif, eso y el historial problemático del joven, quien tendía a meterse en varios líos y también por comportarse de forma " tan poco omega".
Por lo que había escuchado Sunoo no era un omega precisamente sumiso y tímido, él era extrovertido y muy alegre además que no solía hacer lo que se le pedía, ni siquiera sí era su propio padre el que se lo pedía, pero lejos de que esto le desagradara a Heeseung sólo consiguió que el omega le resultará más atractivo, y es que ya estaba cansado de los omegas dependientes que se ponían a la espalda de su alfa esperando que este hiciera todo por ellos, eso no iba con Heeseung, si bien el hombre se desviviría en complacer a su omega esto no era razón para que dicho omega fuera un caprichoso y malcriado, como muchos que conocía.
También había cambiado a Beomgyu de puesto, ahora el rubio desempeñaba uno de los trabajos más importantes en opinión dé Heeseung, y es que el rubio estaba asignado a cuidar a Sunoo, sí por que Heeseung no permitiría que le pasará nada a su omega, y no le importaba parecer un acosador haciendo esto, además sí quería conquistar al omega primero debía conocerlo y que mejor que tener a alguien que sea su amigo de su lado, claro que también tenía a Sunghoon y a su omega, Jaeyun.
Heeseung en verdad había quedado encantado con el omega, y es que después de tantos años de búsqueda se dio cuenta que bien valió la pena pues Sunoo no sólo era hermoso sino también tenía una gran actitud.
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𝗯𝘂𝘀𝗰𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗲𝗹 𝗮𝗺𝗼𝗿 ▪︎ 𝙝𝙚𝙚𝙨𝙪𝙣
FanfictionHeeseung sabía que le hacia falta algo; su otra mitad, pero nunca imaginó que su pareja sería un chico como Kim Sunoo. Sunoo por otro lado siempre pensó que jamás encontraría a su pareja y que si lo hacía este lo rechazaría como el resto de los Alfa...