× Falling | KookTae ×

~15~

El ruido en aquella casa, a la par con el olor a sudor y alcohol -y claramente más sustancias poco legales-, lo tenían mareado. Había aceptado asistir a dicho lugar por la insistencia de su amigo y justo en ese momento se recordaba así mismo el porque no debía ir, además de claro, tener que cancelar la salida que Taehyung había preparado para ambos y Jimin junto a su nuevo novio.

– "Será una cita doble, Jungkookie"

Eso es lo que sus labios habían musitado acompañados de una gran sonrisa, ¿porqué fue tan estupido como para rechazar algo así?, su novio realmente se esforzó en cada detalle..

– Ya hombre, no pareces feliz hoy. –dijo Hoseok a su lado, con una actitud incluso más alegre de lo habitual.

Jungkook solo pudo suspirar– ¿Debería estarlo?.

– Deberías, hay muchas chicas y chicos lindos mirándo..–la risa fingida de Jungkook corto sus palabras.

– Dejé a mi novio por venir a esta mierda y lo único en lo que piensas es en que podría follarme a unos de esos idiotas que seguro se conformarían con que incluso tu los follaras?. –no iba a medirse, estaba molesto.

– Ya, –amenazo reaccionando también a la molestia de su amigo, aunque confundiendo por completo la casua de ello– te dije que no debías tomarlo tan enserio, es tu culpa que sigas con él, solo eran dos meses.

Jungkook que por fin decidió mirarlo, chasqueo la lengua y poniéndose de pie musitó –Asi como te dije que antes debo asegurarme que no sufra.

Y si, aquella seguía siendo su más estúpida excusa al no poder terminar con la única relación sincera que creía haber tenido, y no exageraba, incluso con sus "amigos" nunca se sintió tan cerca de lo que estaba con Taehyung. De verdad sentía que tenía los días contados a su lado y que en cualquier momento el pelirrojo simplemente decidiría no estar cerca de él.

– Solo se claro, –se atrevió a mencionar con burla su mejor amigo– dile: "Taehyung, tengo mi motocicleta y comida gratis, terminamos. Ah y por cierto, fuiste una apuesta." –termino aquello con una carcajada.

Se preguntaba cómo, de verdad cómo, había terminado con una persona como él. A veces admitía que Hoseok se comportaba como un verdadero amigo, pero otras -como esa- era la segunda persona más imbecil que conocía, el primero era él por permitir que lo que fuera a salir de la boca de los demás al haber caído  por su chico pelirrojo, le importara.

No era algo de inseguridad o algo parecido, si no que, era difícil mostrarle a los demás que ahora tenía una debilidad con nombre y apellido.

– Vete a la mierda, no voy a terminar con él así.

Poniéndose de pie para sostener su brazo e impedir que Jungkook se marchara como parecía querer hacer, hablo:

– Deberías estar feliz, te di lo que prometí e incluso te di más tiempo de comida gratis porque lograste llevarlo a la cama, –no se guardaría absolutamente ninguna palabra y con una sonrisa de mofa, agregó– no intentes hacerte el bueno porque disfrutas de ambas cosas todos los días y como un extra, también tienes a un chico lindo abriendote las piernas.

Con sus puños empuñados para no cometer un error como el que necesitaba cometer contra ese idiota, salió con pasos apresurados hacia la motocicleta que solo usaba para esas ocasiones donde los demás verían, porque incluso él mismo sentía asco de usar algo que le costaría la sonrisa de aquel hermoso chico que aunque le había cancelado una noche tan importante con sus amigos, seguro aún así lo recibiría con los brazos abiertos si llegaba a esas horas a su departamento.