Un Corazón para Dos || Anthony Bridgerton | Benedict Bridgerton

Capítulo 15. El Secreto de los Grandville

Lo primero que escucho cuando despierto es el portazo de la puerta de mi habitación y abro los ojos espantada para ver a un par de mujeres riendo con copas de champagne en las manos lo que hace que apriete las sabanas sobre mi cuerpo sintiendome expuesta por aquella invasión a mi privacidad.

- ¿Pero que?- ahogo un grito cuando la puerta se cierra y la rubia toma a la pelirroja por las mejillas para empezar a besarla en los labios sin siquiera percatarse de mi presencia

Luego de leer la carta de Anthony y de renfufuñar un rato, tome las rosas azules de Benedict contra mi pecho antes de recostarme sobre la cama y cerrar los ojos para tomar una pequeña siesta antes de la cena. Sin embargo; al parecer dormi mas de lo necesario o este es un espantoso sueño donde dos mujeres con poca ropa invaden la habitación que el Seor Grandville me otorgo por el tiempo de mi estadia aqui.

- Disculpen...-digo tratando de interrumpir su beso para ofrecerles salir de aquí pero solo se ríen por lo bajo para seguir besandose- Señoritas, yo...- pero entonces la rubia se separa de su acompañante para mirarme de pies a cabeza

- Asi que...¿Alina Stuart?- pregunta sonriendo y logro reconocerla de alguno de los bailes más su nombre no sale de mis labios- La debutante estrella

- No, el diamante es Daphne Bridgerton...querida- dice la mujer pelirroja arreglandose el corse mientras la falda se le cae al suelo y miro a otro lado- No sabía que se alojaba aquí, Señorita Stuart

- La revista de Whistledown menciono algo del virus de la gracia roja y que sus padres la mandaron aquí- le responde su ¿amiga, amante?- Tus hermanos menores la contrajeron ¿verdad?- y asiento incredula por la situación

La situación es tan extraña ya que se supone que las mujeres solo se relacionan asi con hombres y viceversa, Bailey dijo que en Eton habia oido historias de mujeres que estaban juntas de esa manera y que mantenían aquello en secreto para no ser expulsadas de la sociedad; por supuesto que no le creí a mi hermano menor hasta este momento y estoy segura que si se me permitiera apostar con él, hubiera perdido

- Pobrecita- dice la mujer rubia sentandose en mi cama y noto que no tiene guantes ni el cabello sujeto- Henry te esta tratando bien ¿verdad?- pero se ríe al igual que su compañera como si fuera lo más gracioso del mundo

- No seas tonta, Henry trata bien a las damas pero más a los caballeros- dice la pelirroja y vuelven a reirse mientras se abrazan- Soy Lady Fersen- me extiende la mano y me doy cuenta que probablemente esta casada por el anillo

- Y yo la Señora Harvey; pero puedes decirnos Amy y Lu- dice la otra mujer y asiento mientras acepto estrechar sus manos- Lamentamos la intromision; pero me temo que no habia ningun cuarto libre y no queriamos usar la escalera como la cuarta parte de los presentes

- ¿La cuarta parte?- pregunto sorprendida-  ¿Acaso hay más gente?- me pongo rapidamente la bata y busco mis zapatos

- No oyes todo ese ruido- dice Amy y entonces abro la puerta para escuchar voces y musica provenientes del piso de abajo- ¿Que Henry no te aviso?

- El Señor y su señora me advirtieron de quedarme aqui toda la noche- digo y veo que la Lady Fersen esta cogiendo las rosas que Benedict me mando- No, esas no- atravieso la cama y cojo las rosas para ponerlas sobre el escritorio junto a las de Anthony- Sabia que habia un baile del que no estaba enterada- mascullo

- ¿Un baile?- pregunta la Señora Harvey y levanta su vestido para recostarse en la cama- Esto es todo lo contrario a un baile, es muchisimo mejor y no tengo que bailar con mi marido- y ambas mujeres sonríen- ¿Serías tan amable de traernos champagne, linda?

- ¿Acaso pretenden que salga de...?- no logro terminar la frase porque vuelven a besarse y me tapo los ojos para girar sobre mis pies para salir de la habitación antes de soltar un grito