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Cloud Recesses, Gusu.

Dos años atrás.

Una larga cinta roja revolotea sobre el viento. Su mano la alcanza y una melodiosa risa viaja junto a las hojas secas que trae consigo el otoño.

Lan WangJi no corre hacia él, se acerca con calma y una vez que el chico revoltoso se ha calmado, amarra la cinta sobre su cabello de nuevo. Una blanca sonrisa se asoma sobre su rostro y no logra evitar que la comisura de sus labios se curven hacia arriba al verlo.

Wei WuXian sostenía dos conejos sobre sus brazos, ambos empeñados en zafarse de su agarre.

"¿Estás listo?"

Wei WuXian levantó la vista y sacudió el pasto y la tierra de sus túnicas sin soltar a las dos suaves bolas de algodón.

"Lan Zhan, ¿Aún no me dirás a quién visitaremos hoy? Has estado guardando el secreto desde tu última carta. ¡No deberías dejarme con la intriga! ¡si es una bella chica, mi pobre corazón no podría soportarlo!"

Ahí iba otra vez con MianMian...

MianMian esto, MianMian aquello.

"Lan Zhan, no me digas... ¡te gusta MianMian!"

¿Por qué habría él de invitar a la Joven QingYan a Cloud Recesses para conocer a Wei Ying? Solo se la habían topado una vez en LanLing hace unos meses en una conferencia y Wei WuXian no paraba de hablar de ellos como una bella pareja desde entonces. Si Lan WangJi tuviera tanto tiempo como para coquetear con una mujer, preferiría pasarlo con Wei WuXian volando por los cielos o yendo a cacerías nocturnas juntos.

"Es alguien importante... para mi" confesó él.

◇◇◇◇◇◇

Hay viejas historias de tierras lejanas, alejadas del mundo de la cultivacion y las cinco grandes sectas, en alguna otra parte en el vasto mundo en el que viven.

Un cuento relata sobre una bella princesa encerrada en una torre; espera años y años a que llegue el momento en que su príncipe llegue y la salve, combatiendo todo tipo de criaturas y pasando por grandes tempestades. Finalmente el príncipe llega y la rescata de la torre y la historia tiene su final feliz. Como toda buena historia debe ser. Como la luz que necesitamos al cesar la tormenta.

En Cloud Recesses existía una historia como esa, no muy vieja ni muy conocida. Sólo la conocían los miembros del consejo de ancianos, su padre, su tío, su hermano y él. Como toda buena historia, su hermano y él no la conocían y nadie habló de ella con ellos jamás. Ellos la descubrieron en su temprana adolescencia.

Había una bella mujer encerrada en una cabaña en lo más recóndito de Cloud Recesses. Le decían la cabaña de las gencianas. La mujer fue castigada por un crimen que cometió en defensa propia y cuando el clan Lan estuvo a punto de juzgarla por sus actos atroces, no contaron con que alguien saltaría al fuego dispuesto a salvarla.

El futuro y joven líder del clan se enamoró de ella.

Por su miedo a perderla pidió desposarla para que nadie pudiera hacerle daño. Su decisión fue aceptada con una condición.

Ella no podía volver a salir de Cloud Recesses ni de su cabaña. Debía brindarle herederos y solo tendría derecho a verlos una sola vez al mes. Doce veces al año.

Y el Líder de Secta Lan entró en seclusión y hasta el día de hoy no ha salido para retomar sus deberes como líder y como padre. 

Domador de Dragones |WangXian|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora