Cuando Merlín despertó frotándose los ojos, el cielo estaba empezando a ponerse rosado. Bostezó y estiro sus brazos, pateando la manta que envolvía a él ya su madre. El aire era fresco, pero no podía ver su respiración y no estaba temblando. El terror de su pesadilla fue casi olvidado, y no pudo evitar estar un poco emocionado por comenzar el día.
Su nuevo amigo Arturo, que estaba cuidando su caballo al otro lado del campamento, se volvió para sonreírle cuando notó que Merlín estaba despierto. Merlín se puso de pie y corrió hacia él.
-Buenos días, Merlín. ¿Cómo amaneciste? -
Merlín se puso de puntillas, agarrándose a la pernera del pantalón de Arturo mientras se inclinaba hacia delante para acariciar el suave vientre del semental. - ¡Bien! Esta es la primera vez que duermo afuera. Nunca antes había estado tan lejos de casa. Will y yo fuimos a visitar a sus primos una vez, pero no pudimos dormir afuera.
Arturo arrancó a Merlín de su pierna, lo subió a su cadera y le mostró cómo acariciar el cuello del caballo. Merlín lo imitó, aunque sus movimientos de niño de cuatro años no eran tan suaves o gentiles. Si bien el caballo era suave y agradable, prefería tocar la piel escamosa del dragón. El dragón le habló y su abundante magia calmó a Merlín. Sin mencionar que el dragón podía volar .
- ¡Merlín, no molestes a Arturo! - Regañó a su madre.
Se volvió y la vio reprimir un bostezo con el dorso de la mano. Ahora se veía tan cansada, como uno de sus viejos vestidos de jardinería, ya él no le gustaban las extrañas líneas plateadas grabadas en la oscuridad de su cabello. Quería que se viera feliz de la forma en que debería verso, todo suave, de ojos brillantes y de cabello oscuro.
- Ven y ayúdame a doblar estas mantas - Agregó.
Retorciéndose hasta que Arturo lo liberó, Merlín corrió por el claro tan pronto como sus pies tocaron el suelo. Ayudar a su madre con las tareas del hogar no siempre era divertido, pero lo enorgullecía. A diferencia de la mayoría de las otras mujeres de la aldea, ella no tenía a nadie que la ayudara con las tareas más difíciles. Y Merlín ya tenía cuatro años ahora. Era lo suficientemente grande para ayudar.
Su mamá dobló la manta por la mitad y le dijo que la enrollara, mientras ella hacía lo mismo con la otra. Merlín se concentró en esta tarea, era una tarea difícil de realizar. Varias veces se inclinaba más hacia la izquierda o hacia la derecha y debía de empezar de nuevo. Pronto, una piña de forma extraña y una bellota llamaron su atención y comenzó a jugar una emocionante aventura en la que la bellota era una princesa y la piña un dragón que debía rescatarla de ser enterrada viva debajo de una montaña ondulante (un papel perfecto que la manta desempeñaba a la perfección). Una vez que el dragón rescató a la princesa, los llevó a ambos volando alrededor de su campamento, volando de arriba a abajo.
Sin previo aviso, su madre lo levantó y lo llevó detrás de un bosquecillo de pinos frondosos. Sorprendido, Merlín dejó caer sus juguetes y echó los brazos alrededor del cuello de su madre. Ella anticipó sus preguntas y coloco un dedo sobre sus labios, luego lo puso de pie y se agachó frente a él, acariciando sus hombros y espalda para tranquilizarlo. Merlín se movió sobre sus pies, disfrutando del crujido de las agujas de pino. Este era un juego familiar, uno que jugaban a veces cuando su magia se escapaba. Como aquella vez que estaban recolectando hierbas en el bosque detrás de la casa del molinero. Merlín había estado hambriento y estaba mirando las brillantes manzanas de su árbol, cuando su magia reaccionó y de repente todas las manzanas cayeron. La esposa del molinero llegó corriendo a investigar la causa del ruido y la madre de Merlín lo había arrastrado al bosque. Tuvieron que tomar el camino más largo a casa para que nadie los viera, eso le había explicado su madre. Una vez dentro de la seguridad de su hogar, lo regañaron severamente por usar su magia con alguien más cerca.

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Nueva Perspectiva
Fanfiction- Por favor, no luches Emrys. Proto todo terminará - ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- - Eso fue fácil, demasiado fácil - Arturo miró a su oponente con...