Nueva Perspectiva

Capitulo 5

Que "Agravaine" sonara tan parecido a "agravar" no podría ser mera coincidencia. Arturo se frotó el puente de la nariz, las sienes, exhaló con fuerza, golpeó el pie contra los adoquines con un ritmo marcado y finalmente tuvo que usar el estatus de rey para que su tío se callara.

- No, no sé quiénes eran estos hechiceros o qué querían. Pagaron con sus vidas por atacarme, pero sospecho que tenían cómplices. León puede liderar un pequeño grupo de búsqueda mañana a primera hora para investigar - No iba a decirle a ninguno de los nobles que Merlín había sido el verdadero objetivo. Lucharían contra una investigación hecha por amenazar a un sirviente. Sin mencionar que todavía estaba el asunto del traidor aún no identificado en la corte. Si Merlín era un factor clave en las anteriores victorias contra los ataques de Morgana como Arturo sospechaba, lo último que necesitaba era que ella se enterara de su situación actual.

- Debo insistir, Arturo, Debes mantener un guardia contigo en todo momento. Estos hechiceros han atentado contra tu vida. Debemos tomarnos en serio esa amenaza. -

- Como puedes ver, tío, estoy perfectamente bien. Merlín y yo escapamos sin heridas. Pero si eso te apacigua, puedo hacer que Gwaine, Percival y Elyan tomen turnos como guardias hasta que hayamos determinado el alcance de la amenaza. - Ellos, junto con Leon, eran sus caballeros de mayor confianza y los que sabía que se preocupaban por Merlín. Tenía la intención de hablarles sobre Merlín más tarde; además, si su presencia apaciguaba a su tío, mejor para él.

- ¿Dónde está ese sirviente tuyo de todos modos? - Dijo Agravaine, quien parecía desproporcionadamente interesado en la ausencia de Merlín.

Arturo se encogió de hombros, recurriendo a la filosofía de su padre. - No veo la importancia de la ausencia de un sirviente, pero si tiene medio cerebro, se ocupará de sus quehaceres y descansará un poco, como pretendo hacer tan pronto como terminemos aquí. ¿Hay algo más, tío? -

Agravaine presionó los labios en una línea y luego se inclinó levemente. - No, señor. -

- Entonces, eso es todo - Arturo espero a que su tío se fuera antes de convocar a un sirviente para que enviaran a Percival, Elyan, Leon y Gwaine a sus aposentos y él mismo se dirigiera hacia allí. Siendo rey y todo, Arturo se sintió un poco tonto excluyendo a su tío, pero realmente no confiaba en el hombre cuando se trataba de Merlín y esta situación. La postura de Agravaine contra la magia era tan fuerte como la de Uther, y si Arturo quería tratar de convencer al consejo de que debería cambiar las leyes sobre la magia, no quería que su tío provocara oposición mientras él estaba ocupado tratando de volver a la normalidad a su sirviente.

Él se congeló. ¿Realmente solo pensé en terminar con la prohibición de la magia?

Después del incidente con Elyan, había extendido una rama de olivo a los druidas, quienes eran usuarios de magia pacíficos. ¿Por qué no debería hacer lo mismo con todos los demás usuarios de la magia que solo buscaban la paz? Arturo gimió. Le dolía admitirlo, pero necesitaba a Guinevere, necesitaba su consejo tranquilo y sensato. El consejo de Merlín también era bienvenido, pero, incluso si no tuviera cuatro años, como usuario de la magia él mismo estaba automáticamente predispuesto a una elección. Guinevere por otro lado no.

Sin embargo, ahora no era el momento. Ahora tenía que averiguar cómo restaurar a Merlín. Luego, juntos podrían descubrir cómo restaurar Camelot.

Al llegar, vio sus alforjas sobre la mesa. Arturo tomó el pequeño frasco que había encontrado de uno de los atacantes de Merlín y lo sujetó entre sus dedos. Tal vez podría ayudar a Gaius a descubrir qué se había hecho. Alguien llamó a las puertas de su habitación.

- Adelante - dijo Arturo, enrollando sus dedos alrededor del frasco para esconderlo. Su agarre se relajó cuando sus cuatro caballeros entraron y cerraron la puerta.