My Life [Fratt] •Flufftober•

9- Beso En La Frente

Un último disparo resonó por el lugar, pero aún no se ha acabado, no deben rendirse tienen un trabajo que terminar.

Frank dio apenas media vuelta para apuntar y disparar directo a la cabeza del sujeto, con suerte rojo se enojaria por eso. Le dio otra golpiza al tipo a su espaldas antes de acercarse arrastrando uno de sus pies por el concreto, sentía su sangre helada resbalarle por la pantorrilla, Matt estaba apoyado contra el suelo recuperandose del aturdimiento que dejaron el par disparos que esquivo, aunque no todos…

La sangre ya baja por su brazo, escurre entre sus dedos y cae manchando el suelo polvoriento. 

-¿Estás bien rojo?- dijo cayendo a su lado el pelirrojo asintió

-Si, tan solo, dame un minuto.- cuando el zumbar de su oído dejó de retumbar en su sentidos pudo incorporarse. 

-No queda nadie… - Frank tomó su brazo revisando el orificio de bala, una herida limpia apoyo al abogado contra la columna mientras arrancada una de las mangas de su camisa para atarla sobre la herida, el diablo se sentía un poco mareado por el olor, no solo de su sangre si no la de Frank. 

Estaban heridos, golpes y hematomas invisibles, cortadas y aberturas sobre su piel, un disparo rozando la piel del hombro del castigador y otro atravesando el brazo de daredevil, o claro, también estaba la pierna partida de Frank.

Las manos del soldado apretaron fuerte la tela sobre su carne evitando que la sangre fluyera, escucho por el pequeño comunicador su llamado a Lieberman, quien dijo estar allí en unos seis minutos. 

Le quito el casco dejando ver sus mechones oscuros y su rostro manchado de sangre seca, un tenue color oscuro se estaba asomando sobre su nariz rota, la careta del diablo cayó en el suelo a su lado. Frank pasó su mano sucia sobre el cabello y apoyó sus labios allí varias veces. 

-Creí que te había dado… - soltó en un susurro que dejó escapar su aliento hasta la cornisa de su orejas, él también lo sabe, si hubiese tardado un segundo más en ubicar el sonido del proyectil probablemente estaría tieso e inerte sobre el suelo. 

-¿Cómo sigue tu pierna?- preguntó el pelirrojo inclinando su cabeza hacia arriba, sintiendo los labios del otro hombre cerca a su frente.

-Rota- ambos rieron dolorosamente. 

Cuándo David llegó para sacarlos de allí, el sol ya se había asomado por la ciudad y el frío del suelo perpetrado hacia arriba, habían hecho un ingenioso torniquete para su pierna y el sangrado de Matt estaba, dentro de lo posible, bajo control, 

Se sentían un tanto más calmados ya que el radar de Daredevil les decía de algún riesgo, aún así Frank mantuvo el dedo sobre el gatillo en todo momento. Cumplieron con su cometido hoy y la ciudad será un poco y solo un poco más segura pero aún así también acabaron lo suficientemente magullados para quedar casi inconsciente mientras Micro conducía hacia alguna guarida del Castigador.