Estúpido nerd | Jaewoo & Dowoo

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—Déjame en paz—le gritó en la cara, Jaehyun pasó de una expresión de asombro por tal osadía, a una de burla.

—Aquí el que da las ordenes, soy yo. Te lo iba a pedir de buenas maneras, pero ya que amanecimos bravos, pues no lo repetiré, vas a hacer mi tarea.

—¿Por qué tendría que hacerte caso? Ya me tienes harto, ¿sabes qué? Búscate a otro.

Acomodó su maleta y con firmeza tomó hacia su derecha, lejos de Jaehyun, aun con los nervios de punta porque en realidad nunca se había enfrentado al basquetbolista, pero había resultado bien, o al menos eso pensó; llevaba unos cinco minutos y el castaño no lo había detenido, pero cantó victoria muy pronto. El castaño solo le había dado tiempo de alejarse al ver unos de los profesores cerca, pero apenas se vio libre de miradas le dio alcance al pelinegro y lo tomó fuertemente de la muñeca, metiéndolo a la fuerza a la biblioteca que casualmente quedaba en el camino por el que se habían ido.

—Pensaste que habías ganado? Eres tan inocente o debo decir... patético.

El delgado chico no paraba de sobarse la muñeca izquierda la cual había tomado Jaehyun, eso sin dejar de mirarle mal, realmente estaba hastiado de sus continuos maltratos, pero estaba en desventaja, y si, fue muy tonto de su parte creer que había salido victorioso de esta. Busco con la mirada a la encargada de la biblioteca, pero no había absolutamente nadie, se topó con el reloj de pared y al ver la hora maldijo su mala suerte, al ser ya la ultima hora de clases ya nadie entraba ahí.

—No tengo tiempo, debo ir a un lugar en especial, así que toma—le extendió 20 hojas en blanco—Harás un resumen de una obra literaria supongo que será pan comido para ti, después de todo eres un nerd y has de haber leído cientos de libros.

Jungwoo no daba crédito lo que, escuchada, ¡¿20 hojas?!

—Estás loco si crees que voy a hacerlo.

—Oh claro que lo harás, así te tenga que golpear.

La mirada dura que le lanzo le hizo saber que no estaba bromeando, lanzó un suspiro derrotado, por más que quisiera hacerse el duro sabía que era una causa perdida porque el mayor quizás no era más alto que Jungwoo, pero si más fornido y musculoso y ya no quería preocupar más a su mamá y a Doyoung, definitivamente necesitaba irse de ese colegio tal como se lo sugirió su amigo.

Agarró las hojas sin mayor delicadeza y buscó el primer asiento, mientras más pronto termináse el trabajo más rápido podría irse. Miró una última vez a Jaehyun, este ya estaba acomodándose al frente usando su mochila como almohada, seguramente tomaría una siesta mientras él tendría que hacer el trabajo duro.

La hora pasó en silencio, los cuales solo eran interrumpidos por los ronquidos del mayor. Jungwoo ya tenía avanzada una parte del trabajo, pero comenzó a cabecearse, estaba aburrido y al no haber más ruido que el de la pluma sobre el papel, creando una melodía adormecedora; y así poco a poco cayó en la mesa, durmiéndose en el acto.

—Despierta.

—Solo unos minutos más mamá.

—¡Que despiertes!

La patada en su silla provocó un brusco movimiento, levantándolo de su siesta de inmediato, pero las gafas salieron volando, Jungwoo de inmediato fue hacia el piso a buscarlas pues sin ellas no veía nada.

—Por tu culpa nos quedamos atrapados, ya no hay nadie en la escuela y nos dejaron encerrados en la biblioteca.

—¿¿¿qué??? ¿Atrapados? No puede ser, esto es imposible, no tiene sentido.

—¿por qué demonios te quedaste dormido?

— estaba cansado y tú no ayudas, así que no me jodas.