[5]Gritos y golpes

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- lo que oíste nenasa, tu culo es mío, tu vida ahora me pertenece y vas a hacer todo lo que yo te diga

- a ¿sí?, ¿y por los huevos de quién? - pregunté indignada

- por los mios

- pues ¿qué crees?

- ¿qué?

- eso no se va a poder

- y ¿por qué no?

- yo no trabajo para nadie, nadie me da órdenes, ¿entiendes eso? - dije con un tono mas serio y demandante

- bien, entonces tendré que matarte

- adelante - dije completamente despreocupada

- así que no le temes a la muerte

- en lo absoluto

- ¿y eso?

- y a ti ¿qué te importa? - antes de que me contestara llego Volkov con una radio, se la dio a Conway y este a mi

- no quiero tu chingadera, te la puedes meter por el culo

- no le falte al respeto - me ordenó el ruso un tanto enojado

- ¿bueno y tú que eres? ¿su guarda espaldas, su niñera o su mama?

- enciende la puta radio - me ordenó Conway

Y aquí es donde empezó una interminable pelea porque encendiera la radio y conectara con la frecuencia de mis supuestos cómplices, discusión en la que tanto como el Conway como yo nos estábamos quedando sin paciencia cada vez mas rápido colapsando primero la de él, a lo que saco la porra, se dirigió hacia mi lado y justo antes de que me pudiera golpear logre tomar la porra con ambas manos de la parte de enfrente obviamente.

- ni se te puto ocurra

En eso el jalo la porra con una fuerza superior a la mía y como sabía que él iba a hacer eso no me solté y logré levantarme de la silla, corrí hacia la puerta pero oh sorpresa y es que ahí estaba el ruso admirando el espectáculo, mi gran inteligencia me dijo que le diera un puñetazo por lo cual eso fue lo que hice, justo en ese momento Conway me jalo del brazo y me recibió con un puñetazo mayor al que yo le había dado al ruso dejándome en el suelo, y eso no se iba a quedar así por lo que una vez en el suelo lo tumbe con los pies y no sé cómo lo hice que termino encima de mí, la posición era la siguiente: yo estaba boca arriba con las piernas abiertas y él estaba encima mío pero no cuerpo pegado con cuerpo si no que, sus rodillas estaban cerca de mis glúteos y para no caer en mi cara se estaba sosteniendo con las palmas de sus manos en el suelo justo a los lados de mi cara y la verdad es que esa posición me trajo malos recuerdos por lo que con mis manos me sostuve de sus brazos para poder hacer fuerza, posicione mi pie derecho en su abdomen para alejarlo de mi y con mi pie izquierdo le di una patada en toda la cara y seguido de eso Volkov me disparo con el taser y me esposo para después ir a ver como se encontraba Conway, mismo que se encontraba bastante mareado.

- ¿¡qué coño haces!? - pregunto bastante enojado a lo cual suspire

- tu empezaste

- para empezar a él le habla de usted, a él lo respeta y por todas las gilipolleces que acaba de hacer no se la va a acabar con la multa que le voy a poner y a eso súmele el tiempo en federal - dijo él ruso en su defensa

- escúchame Volkov, olvida la multa y pídele a un agente que la lleve a federal - el ruso solo asintió

- no te preocupes, te iré a visitar - dijo refiriéndose a mí y con la nariz sangrando por la patada que le había dado

- ¿Por qué mejor no visitas a un doctor?

Obviamente se enojó con este comentario y yo al ver que no le había hecho nada de gracia sino todo lo contrario sonreí. Volkov pidió mi traslado a federal por radio y les dijo mi condena, un agente bajó por mi y me llevo, me metieron a la federal y me pusieron una ropa que por cierto era un asco.

sinceramente cuando Conway dijo que me visitaría creí que solo estaba bromeando, pero mi sorpresa fue que no, en el momento en que uno de los guardias me dijo que tenía visitas, me dirigí hacia allá y ahí estaba él, sentado, esperándome. Una vez frente a frente el fue directo al grano.

- ¿a qué viniste aquí?

- y a ti que te importa

- quiero que me cuentes todo de ti - sinceramente esto me extraño bastante y ¿a quien no le extrañaría?

- no lo voy a hacer y aunque lo hiciera no sería aquí

- si te saco de aquí me lo dices - de verdad sonaba muy interesado y la verdad es que no sabia si sentirme asustada por lo rara que era la situación o en cierta forma afortunada, quiza él sería la clave para encontrar a mi familia.

- solo si me dices porque te interesa tanto saber algo de mi

- bien ¿tenemos un trato? - asentí con la cabeza en señal de afirmación

No sé porque, pero al decir eso en mi cara se dibujó una enorme sonrisa, y justamente en ese momento no me di cuenta pero  al ver mi sonrisa él también sonrió.

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si ya leíste la historia y te llego la notificación perdón, estoy editando la historia y me di cuenta que el capitulo anterior a este era demasiado largo así que puse este intermedio

¿Y tú quién eres? (SpainRp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora