𝕸𝖊𝖉𝖎𝖆𝖓𝖔𝖈𝖍𝖊

𝕷𝖑𝖚𝖛𝖎𝖆 𝖓𝖔𝖈𝖙𝖚𝖗𝖓𝖆

══════ ≪ •❈• ≫ ═══════

Aún faltaban horas para la medianoche, Reki corría a través del frondoso bosque mientras una densa lluvia caía con vigor.

La tierra del bosque se había vuelto lodo debido a la lluvia, provocando la poca estabilidad del pelirrojo y cómo era de esperarse, cayó por una resbala de sus zapatos.

- ¡Por favor déjame! Yo no te he hecho nada - suplicaba Reki.

- Lo siento, tengo que hacerlo...

※✥※∴※∴※✥※∴※∴※✥※∴※

- ¿Tadashi eres tú? - le preguntó Reki mientras colocaba su mano en el hocico del lobo.

El lobo retrocedió unos pasos.

- ¡Reki! - Langa llegó corriendo y golpeó al lobo negro, para luego tomó a Reki en brazos.

- ¿Qué pasó con el otro hombre lobo?

- Le pegué en el estómago y lo dejé inconscientemente - respondió Langa mientras miraba furioso al hombre lobo de pelaje negro.

- Creo que le rasguñaste su ojo, tiene unas uñas marcadas - comentó Reki al ver al lobo que intentaba abrir su ojo derecho con dificultad.

- Puede ser... No medí la intensidad del golpe, Reki es muy peligroso seguir aquí, así que mejor te iré a dejar a tu hogar.

Llegaron cerca de la iglesia y Langa soltó a Reki de sus brazos.

- Gracias por traerme - agradeció Reki sonrojado.

- Jamás dejaría que alguien te hiciera algo, solo yo puedo tocar ese bello cuerpo.

- Pero que cosas dices hombre - Reki cubría su rostro, aún no estaba acostumbrado a las palabras cursis usadas por el vampiro.

- Buenas noches mi bello humano - Langa tomó la mano de Reki y la besó con delicadeza.

- Buenas noches Langa... - Reki quedó pegado en la figura del vampiro que se iba alejando cada vez más entremedio de los árboles hasta que se perdió por completo.

- ¡REKI! ¿Qué demonios haces acá afuera? - Cherry venía de su ronda de vigilancia.

- Yo... Yo quería tomar un poco de aire y salí a dar una pequeña vuelta alrededor de la iglesia - mintió Reki.

- Pero para la próxima pídele a Miya que te acompañe, no puedes salir solo ¿Y si te atacan de nuevo?

- Ok... - respondió Reki aliviado, Cherry no sospechaba nada.

Estaban todos sentados en la mesa tomando desayuno, Reki fue el último en bajar.

- Buenos días, disculpen la demo... - Reki quedó congelado al ver el ojo derecho de Tadashi herido, en el mismo lugar dónde Langa había golpeado al hombre lobo anoche.