𝖘𝖙𝖆𝖑𝖐𝖊𝖗 ~ 詹利薩 ~

06. Secuestro

Dos días sin saber nada de Rosé, Lisa y Jisoo estaban preocupadas, nadie sabía nada de ella después de salir del hospital.

Ambas se dedicaron a buscarla, a mandarle mensajes, a llamarla pero nada daba resultados.
Después de el primer día, decidieron ir a la policía y reportarla como desaparecida.

Hoy Lisa tenía varios compromisos pero estaba muy preocupada por Rosé, no sabía que hacer, temía qué nunca la volvieran a encontrar.

En otro lado de la ciudad...

La chica rubia abría los ojos poco a poco, un terrible dolor de cabeza la golpeó y un frío le recorrió todo el cuerpo, haciéndola temblar.
Cuando su vista se hizo clara, miró a su alrededor y estaba en una especie de sótano.

El olor era a humedad y suciedad, estaba todo oscuro, solo entraba la luz tenue de un faro de la calle, alumbrando muy poco.

Ella estaba confundida, no sabía donde estaba ni como había llegado ahí. Intentó levantarse de la silla en la qué estaba, pero se dio cuenta de que estaba a atada de pies y manos a las patas de aquella silla de madera desgastada qué rechinaba cada que se movía.

Sus manos estaban atadas detrás de su espalda, sus piernas estaban atadas a las patas de la silla, impidiéndole moverse.
Su corazón se aceleró al darse cuenta de que estaba secuestrada, volteo a todas partes para ver alguna forma de escapar, pero lo único que encontró fue a una persona sentada en un pequeño sofá desgastado.

La persona estaba cabizbaja, tenía una hiera negra al igual que toda su ropa, Rosé se dio cuenta que era una chica debido a su cabello qué caía por su hombros.

- Hola Rosie - La mujer subió la cabeza, tenía una sonrisa psicótica la cual le hizo helar la sangre a Rosé.

La rubia quiso gritar, no se había equivocado, era esa chica la qué le había hecho daño, esa mujer era una psicópata.

- ¿Qué hago aquí?, ¿Porqué me encierras? - Preguntó con miedo.

- ¿Acaso no recuerdas porque estas aquí? - Rió.

Rosé negó lentamente.

- Bien, pues te lo recuerdo - Sé levantó del sofá y caminó hacia Rosé - Te metiste con algo que es mío, te advertí qué debías mantenerte alejada de ella y recibiste su ayuda y le advertiste sobre las personas con las que trataba - Jennie se paró justo enfrente de la rubia - Pagaras por eso.

- Ya te dije que Lisa y yo no tenemos nada, somos amigas desde pequeñas - Trató de hablar y no parecer nerviosa, aunque se moría de miedo.

- En esta vida he aprendido mucho Rosé, una de esas cosas es que no puedes confiar en nadie, EN NADIE - Enfatizó la palabra nadie.

- Dejame salir, te prometo que no le diré a nadie sobre ti, solo dejame salir de aquí, me iré lejos o lo que tu pidas - Dijo con esperanzas de que su plan funcionara.

- Lo siento cariño pero sabes demasiado, la única manera de que salgas de aquí es en una bolsa de basura, mejor dicho, lo que quede de ti - Soltó de manera burlona, causando un escalofrío en Rosé - No te preocupes, no morirás hasta hoy en la noche, mañana traeré a Lisa a casa, la amaré, cuidaré y al fin será mía -

Rosé no podía creer lo que oía, tenía que hacer algo, salir de ahí y advertirle a Lisa lo que Jennie iba a hacer, pero las ataduras de sus manos y piernas eran demasiado fuertes.

Salió de sus pensamientos cuando sintió un dolor en el estómago, Jennie la había apuñalado con una navaja pequeña.

- Para que no intentes escapar, estarás demasiado débil para la noche y eso me facilitará las cosas, debo guardar energía para Lisa, ella es muy enérgica - Sonrió sombría.

Después de eso, Jennie subió unas pequeñas escaleras y abrió la puerta para salir, dejando a Rosé débil y herida, pero ella no se daría por vencida tan fácil.

Capítulo demasiado corto, lo siento:(