Markus no pudo matar a tu padre, ¿no? Él siempre fue amable con ustedes, sobre todo con él. Te salvo varias veces de Leo cuando le daba su rabieta y empezaba a atacarte sin razón alguna.
- Detective, cálmese un poco, ya casi llegamos - Estabas con Connor, Hank dijo que iba a dar el reporte por ustedes y dijo que vayan al hogar de tu padre para comprobar si era de verdad.
- Lo.. Lo siento - Dijiste alejando tu mano de ti ya que te estabas mordiendo las uñas.
Cuando apenas llegaron te bajaste rápidamente y entraste corriendo, estabas guardada en el sistema de seguridad así que podías entrar con tranquilidad.
- Bienvenida Elizabeth - Dijo la voz del sistema de seguridad.
Subiste las escaleras rápidamente y fuiste corriendo a la habitación de tu padre, con la esperanza de verlo ahí acostado y que solo la noticia sea algo falso.
Pero no estaba por ningún lado, bajaste las escaleras viendo a Connor parado en la puerta, se estaba asegurando si estabas bien. Pasaste de él y entraste al salón para después ir al estudio de tu padre, pero antes de entrar te detuviste rápidamente ya que tenías un mal presentimiento.
Respiraste profundo y te acercaste dejando que las puertas se abrieran, ahí estaba lo que temías, Leo estaba registrando el arte de tu difunto padre para venderlo y comprar droga.
- ¡Le.. Leo! ¿¡que estás haciendo aquí!? - El nombrado dio un brinco del susto y se dio la vuelta viéndote en silencio, para después sonreír.
- Elizabeth, en la mañana me ignoraste maldita zorra - Este empezó a avanzar lentamente hacia ti. Cuando él se acercaba tu retrocedías.
- ¡N.. No tienes derecho de estar aquí! Todas estas cosas me perteneces ahora, lo sabes perfectamente - Hace años tu padre saco a Leo de la herencia familiar porque él sabía que solo gastaría el dinero en drogas y cosas ilegales, la única manera de que el vuelva a tener la herencia era dejando todo eso de lado, pero no sucedió y termino siendo expulsado por siempre.
- ¿Y eso que me importa?, soy mayor que tú y todo eso me pertenece ahora - Viste como lentamente metía su mano en el bolsillo, ahora sabias a que se refería a que le pertenece. Rápidamente actuaste y sacaste tu arma apuntándole.
- Leo Manfred, estas bajo arresto - Dijiste teniéndolo en todo momento en la mira.
- Como si fueses capaz de acercarte a mi - Este empezó a acelerar el paso hasta que escuchaste la puerta trasera abrirse, no querías darte la vuelta, no querías perderlo de vista.
- Detective - Tu cuerpo dejo de estar tan tenso al oír la voz de Connor. Pusiste tu mano atrás de tu espalda entregándole unas esposas, el rápidamente entendió que debía hacer.
- No te muevas o disparo, hay cámaras en la casa así que eso puede usarse a mi favor como defensa personal - Sonreías victoriosa, tu "miedo" hacia el tan solo era una actuación para hacerlo sentir confiado en sí mismo.
- ¡Eres una...! - No lo dejaste terminar de hablar ya que diste un disparo a su costado lastimando su mejilla, tenías una buena puntería que habías practicado por años para este momento.
- Suelta el arma, manos arriba y de rodillas - Dijiste haciendo que el haga lo pedido. Connor empezó a acercarse hacia el con las esposas en mano, pero ocurrió algo que no esperabas Leo rodo hacia una mesa y la volcó evitando todos los disparos que había dado en un intento de detenerlo.
- Connor, llama refuerzos - Viste como el led de él empezaba a parpadear. (titilar)
Te deslizaste por el suelo y le diste una patada a la mesa oyendo un quejido de dolor. Rápidamente te levantaste e intentaste apuntarle con el arma, pero este se había ido. Buscaste por la cercanía solo con la mirada ya que sería peligroso acercarte demasiado si él tenía un arma blanca. Viste como Connor empezaba a pasearse por el lugar en busca de él, te asustaste un poco pensando que él lo podía atacar, hasta que lo viste ahí a su lado acercándose lentamente.
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Emociones encontradas 》Connor x Tu《
FanfictionElizabeth Manfred, hija del famoso pintor Carl Manfred. Decidiste estudiar para ser una oficial y detective con un único objetivo en mente, encarcelar a tu hermano mayor, Leo, y detener el crimen en la ciudad de Detroit. Desde que tenías memoria, tu...