𝒀𝒐𝒖 𝒂𝒓𝒆 𝒔𝒐 𝒑𝒂𝒕𝒉𝒆𝒕𝒊𝒄, 𝒅𝒐𝒏'𝒕 𝒚𝒐𝒖?

together

"Eres todo un dolor de cabeza." La voz del doctor, profunda como siempre, se dirigía frívolamente a su amante, el cual se encontraba jugueteando con un cráneo humano.

"Me alagas," Comento coqueto. "Deberías insultarme mas seguido." 

Un leve gruñido pudo escaparse de su boca ante su enojo. Había días donde verdaderamente deseaba golpearse la cabeza contra la pared de tantas tonterias que decía. Pero esas facciones eternas, concretas en un infinito, lo tenían a su merced.

Se acerco a la mascara, la cual reía a lo bajo, tomando en sus manos los bordes de porcelana para luego quitarla de su portador. El cadaver ya putrefacto, corroído por su liquido, cayo al suelo de manera ruidosa.

El de negro quito su propia mascara de la peste, revelando su pálido y hueco rostro. Acaricio sus labios, ya secos por la edad, al igual que sus marcados pómulos. Miro la mascara de comedia por unos momentos, para luego besarla dulcemente en sus labios. 

"Me dañas, pero yo contrarresto ese daño."

Sin esperar otro segundo, se puso a su amante en el rostro, dejando que tomara control sobre su cuerpo. Los negros y viscosos tentáculos acariciaban su piel cada paso que daban sobre si mismo, frio al tacto, sus extremidades ahora cubierta abrazaban a la perfección su anatomía.

"Tan dramático como siempre." Ahora sus voces sonaban al unísono, combinando sus mentes.

 "Es hora de divertirnos un poco."