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Narradora:

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Narradora:

La menor despertó otra vez por los rayos de sol, bostezó y miro a su derecho, sukuna seguía dormido, la menor se levanto rápido y ordeno su futón sin hacer ruido.

Al acabar, salió de la habitación y fue hasta uraume quien estaba afuera barriendo.

- buenos días pequeña señorita- dijo uraume.

- buenas para ti también- dijo la menor.

- señorita no se si el maestro le allá dicho que saldremos hoy- dijo uraume dejando la escoba para meterse.

- si me lo dijo- respondió.

- bien, vayamos a que desayune y luego a partir, para después tomar un baño- dijo.

✿*:・゚. . . .゚・:*✿

Uraume y tn fueron a otro pequeño pueblo, la pequeña veía a los niños correr felices, uraume llevaba una canasta en donde traía las provisiones necesarias.

La menor seguía viendo hasta quedarse un poco atrás, uraume se dio cuenta.

- señorita, por favor no se quede atrás- dijo uraume.

- lo siento- dijo la menor.

Al terminar las compras volvieron, pero no se dieron cuenta que un hechicero los había seguido y se volvió a ir para alertar.

Al entrar la menor fue hasta sukuna, y como siempre se la pasaba tomando sake o fumando, la menor se postro ante el.

- ya veo  que sabes arrodillarte sin que te pida o te llame- dijo sukuna.

- el almuerzo estará listo- dijo uraume.

- no te preocupes, voy a salir- dijo mientras se levantaba

- como usted diga- respondió uraume.

✿*:・゚. . . .゚・:*✿

En un lugar cerca de un pueblo, varios hechiceros estaban organizando un plan para atacar  al rey de las maldiciones.

- los vi, uno era un joven de tes blanca y el otro era una niña, y de ahí venia el aura del ese maldito demonio- dijo un hechicero.

- últimamente se la pasa matando cada pueblo cerca a su santuario- dijo otro hechicero.

- tenemos que atacar su guarida- dijo el primer hechicero.

✿*:・゚. . . .゚・:*✿

- saldré un momento al bosque a recoger unos frutos, por favor no salga señorita- dijo uraume.

- esta bien- dijo la menor

Uraume se fue pasaron 10 minutos, y sukuna todavía no regresaba, la menor se dispuso a regresar a la habitación en donde ella y sukuna dormían.

La menor paro hasta que escucho muchos pasos, la menor se asusto y se escondió en su habitación.

Se escuchaban muchos gritos, la menor tapo su boca para no hacer ningún tipo de ruido, hasta que abrieron la puerta, entraron dos hechiceros, vieron a la menor, se acercaron pero al momento de querer escapar la tomaron del cabello.

- a si que era verdad- dijo mirando a la menor llorando.

La sacaron de la habitación, llevándola afuera, en donde se encontraban los demás hechiceros, la menor los miro con horror.

- donde esta- dijo un hechicero.

- q-quien- dijo la menor.

Al no obtener respuesta, el hechicero que le hablo primero le soltó un golpe en el rostro a la menor.

- no lo volveré a decir, en donde esta sukuna ryomen- volvió a decir.

La menor temblaba a tan grado de que la volviera a golpear, la menor sangraba del rostro, intentaba  gatear, pero recibió una gran patada en el estomago por otro hechicero.

Los hechiceros presentes no le importaron que fuera una niña, eran 10 hechiceros y esos mismos golpearon a la menor quien no quería dar respuesta acerca de sukuna.

La menor por fin se desmayo, los hechiceros pararon.

- creo que ya murió- dijo un hechicero.

Cuando este iba a dar vuelta, una mano tomo sus rostro y la destrozó, haciendo que sukuna los matara uno por uno.

Se acerco a la menor, tomando su pulso, y su pulso seguía estable, uraume llego y vio la escena, sukuna tenia en brazos a la menor, quien intentaba respirar.

- uraume encárgate de este tiradero- dijo sukuna llevando a la menor en brazos.

Dejando a uraume solo, sukuna acomodo un futón para la menor, la acomodo para después quitar la ropa y limpiar su cuerpo.

Sukuna veía cada hematoma y moretón en ese pequeño cuerpo, cuando acabo de limpiarlo uraume la vistió, para después dejarla otra vez con sukuna.

Sukuna la curo, pero esas horribles marcas se quedaran, veía su rostro tan pacifico, dejo dormir a la menor. 

Salió de la habitación para dejar sola a le menor, cerro y camino hasta el jardín, en donde se sentó y aprecio la noche tomando sake.

CONTINUARA.....

La niña del ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora