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Narradora:

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Narradora:

Tn miraba ambos lados de un pasillo para ver si sukuna no estuviera, cuando iba a dar vuelta, se encontró con yuujī.

Tn se asusto, yuujī ya sabia por que ella se asustaba.

- estas bien tn-pregunto yuujī.

- si, solo estoy un poco asustada, ya sabes sukuna esta muy obsesionado conmigo- respondió tn con una sonrisa tímida.

- lo lamento- dijo un poco triste.

- n-no es tu culpa, perdón si te hice creer eso- dijo tn mientras quitaba su pequeña sonrisa y mostraba una faceta de preocupación.

- miren que tenemos aquí, dos pequeños tortolos- dijo el profesor gojo.

Ambos dieron vuelta y vieron al profesor gojo, gojo siempre mostraba una sonrisa.

- no pueden estar solo, porque no vamos con los demás, niños- dijo gojo mientras les daba palmaditas en la espalda.

✿*:・゚. . . .゚・:*✿

Nobara era la mejor amiga de tn, ella siempre se preocupaba por ella ,tn era muy tímida, desde que supo la existencia de las maldiciones.

Nobara se encontraba abrazando a tn, megumi solo ignoraba el gesto, yuujī solo pensaba.

- tienes planeado algo para hoy, ya sabes nuestro día libre- pregunto nobara.

- si, bueno he tenido mucho sueño últimamente- respondió tn.

- deseas dormir más, entiendo- dijo nobara.

- lo siento- dijo tn.

- no te preocupes- respondió nobara.

Tn se levanto y se despidió, para luego caminar a los dormitorios.

- y ustedes dos tontos, que van hacer hoy- dijo nobara sería.

- a veces das miedo- dijo yuujī.

Yuujī y Megumi fueron empujados por nobara.

- empiecen a caminar- dijo nobara.

Tn llegó a su habitación, tenía fotos de ellas , sus amigos, profesor gojo.

Su closet, dos uniforme de respaldo, uno de invierno, y la ropa normal.

Una pequeña alacena, cinco platos, cinco vasos, 15 cubiertos, tal vez tenía demasiado, solo necesitaba solo un par.

Se acostó y quedó profundamente dormida al caer en el colchón.

Tn despertó, pero al despertar vio sukuna, el la miraba serio.

La menor tembló, sukuna la tomo del mentón y la empezó a examinar.

- y dime ya empezaste a recordar- dijo sukuna.

Se tensó más la menor al sentir la rodilla de sukuna rosando la feminidad de tn, la menor intentaba alejar su rodilla, pero sukuna tomo sus manos llevándolas arriba de su cabeza.

La niña del ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora