BNHAtober 2021

22 y 23 de Octubre

Tema: Cringe y día lluvioso (2x1)

Sultry Rain.

—Deku, ¿conejito? ¿Estás listo?

—En un segundo salgo...

—Venga, que el CEO no puede llegar tarde.

—¡Listo! Taraaa ¿Qué tal estoy?

—Hermoso, como siempre.

La feliz parejita sale y está un coche esperándolos fuera para llevarlos a la fiesta anual de la empresa.

—¿Por qué no vamos en tu coche, Kacchan? Esto es muy... ostentoso, un Toyotx Century ¿En serio? ¿Qué somos, de la yakuza?

—Yo pienso beber hoy, y seguro que tú también, además conduces como una abuela de 90 años. Y este coche me gusta.

—No conduzco como una abuela, simplemente soy prudente.

—Sí claro, lo que tú digas.

—Kacchan, dejáme tú móvil.

—¿Para qué?

—Tú déjamelo, tengo que ponerte algo...

—No me instales tus juegos tontos... ¿el tuyo ya está lleno?

—Noooo, no es eso... bueno un poco sí, es un juego para ti.

—Yo no juego, ya lo sabes.

—Pero este juego te va a encantar, ya verás.

Izuku trastea unos minutos con el móvil de su marido, otra cosa no, pero los aparatos electrónicos se le dan de lujo. Le pasa de vuelta el móvil a Katsuki.

—Ya está.

Katsuki mira su smartphone, una nueva app en la pantalla de inicio.

—¿Lovense remote? ¿Qué es?

—Ábrelo.

Katsuki le da click a la app ¡Ohhh!

—Conejito pervertido.

Llegan al gran banquete en un elegante hotel. Todas las miradas se posan en la pareja: Katsuki elegante e imponente, Izuku hermoso y exuberante. Se oyen cuchicheos, pero a ninguno le afecta en lo más mínimo.

De repente aparece Kota.

—Buenas noches, Señor.

—¿Dónde estabas? Afuera esta lloviendo a cántaros, casi se le arruina el traje a Izuku.

—Lo siento señor, estaba atendiendo asuntos con sus semejantes.

—No te preocuoes, Kota —interviene rápidamente para calmar a su marido —Apenas me han caído cuatro gotas, Kacchan es un exagerado. Vamos a la mesa.

Kota lleva a su jefe hasta la mesa asignada, justo enfrente del escenario donde se entregarán las menciones y premios. En la mesa están otros importantes mandos de las otras sedes con sus respectivas esposas. Y en la mesa de al lado Kota con Katsuma, para estar pendientes de cualquier necesidad de su jefe. 

Durante la cena, Katsuma le dio algunos codazos a Kota señalando disimuladamente a Izuku, este de vez en cuando se mordía los labios y el rostro se le ponía rojo, otras veces se mordía lo dedos y hacia unas movimientos como si estuviera incómodo. Estaba como aguantando un dolor, ambos secretarios empezaban a preocuparse y lo peor era que su jefe parecía no darse cuenta del malestar se su pareja.

En el momento que Katsuki tuvo que subir al estrado para recibir su premio y dar un pequeño discurso, Kota aprovechó y se acercó a Izuku preocupado.