El asesinato de la cuarta flor

7. El principio del todo.

Joel

¿A qué lugar se va cuando nadie te quiere?

Por su puesto, a Colmar. En mi caso es exactamente lo que pasó. En mi antiguo pueblo, pasaron unas cuantas cosas de las que no tenía control alguno, pero... ¿A quién tacharon de demente, de irracional y...? De algo más según el periódico del pueblucho donde vivíamos, pues a mí. Como si fuera mi culpa de lo de aquellas muertes y desapariciones.

Cuando eres un "raro" según un pueblo cerrado de mente y odiando todo lo nuevo que hay en este mundo, todo, pero absolutamente todo es culpa tuya, aunque el verdadero culpable simplemente sea la propia naturaleza.

-¿Joel?

Levanto mi mirada del techo de mi habitación de casa de mi abuelo en este pueblo, donde sí están más abiertos de mente solo que... Parece que la muerte se ha obsesionado conmigo, por qué allá donde vaya hay sucesos extraños relacionados con ella.

La gente piensa que llegamos a este pueblo un día después de que por desgracia una niña pequeña de unos ¿cinco o seis años? Muriera a causas naturales, pero no. Nosotros, los Klir, llegamos antes, exactamente dos días antes, pero la casa de mi abuelo está a las afueras de ese pueblo, así que hasta el segundo o tercer día desde que llegamos aquí no hemos salido ninguno al pueblo, ni para hacer turismo, ni a socializar, ni a hacer la compra. Solo una persona ha salido de la casa, Eric Klir, mi padre.

Básicamente, nos trajo a Bea, David y a mi hasta casa de nuestro abuelo y luego se fue.

-¿Qué? —digo incorporándome de la cama.

-Solo prométemelo, ¿vale?.

-¿El qué? —le digo un poco harto de que mi hermana mayor, mi propia hermana no se fía de mí.

-Oh, vamos Joel. —dice mientras entra a mi cuarto, sin darle yo permiso, y se sienta en la silla giratoria que hay en mi cuarto quedándose enfrente de mí. — Lo de nuestro antiguo pueblo, que no se vuelva a repetir, me gusta este sitio, la gente es amable, no sé...  Podría funcionar esta vez, siempre y cuando no la cagues.

Y esta, señoras y señores es mi queridísima hermana mayor. Sus ojos oscuros como el infierno y su pelo largo y rizado del mismo color, con ese gen que nos caracteriza a los Klir, me espera expectante para saber mi reacción, ya que sabe cómo soy en realidad. Ella lo sabe todo sobre mí, ella se encarga de mantenernos a todos a salvo de... mi.

-Bea, te quieres tranquilizar, no pasará nada porque yo no hice nada, esa anciana se murió sola. ¿Sabías que tenía cáncer terminal? No fui ni yo, ni nada relacionado conmigo. ¿Estamos? —le digo levantándome de la cama y andando en círculos por la minúscula habitación.

-¿Y en el anterior pueblo a ese? —Bea que de tonta tiene poco, va tensando poco a poco la cuerda.

-Vale, pero... ¿No te acuerdas lo que dijo mamá? Pasado en el pasado nunca se deberá ser recordado, por el bien de todos. —le citó textualmente a nuestra madre.

-No es pasado es una realidad Joel, y las realidades se afrontan, no se huye como lo hacemos nosotros.

-Ella no acabó muerta. ¡No fue mi jodida culpa!

-Joel, cálmate. —Bea se intenta acercar hasta mí, pero no puede, ya es tarde.

-¿Qué está pasando aquí?

Y el que faltaba, David Klir, el del medio, por un año mayor que yo y a la vez un año más pequeño que Bea. Con los mismos ojos, pero con el pelo liso como el de nuestra madre, pero simplemente parecemos unos clones de los otros. La magia de la genética supongo.

-Llévatela, ahora. —le digo entre dientes y cerrando la única persiana de mi habitación para a continuación tumbarme en la cama.

David me hace caso al instante, y al ser más fuerte y alto que Bea, se la lleva enseguida y cierran la habitación. Pero los oigo discutir. Bea le dice algo tipo "no puede pasar lo mismo, hay que protegerlo" a lo que David mientras se va alejando por el pasillo con mi hermana le contesta "Él tiene ya 18 años, ya es un adulto, y él Bea, no es el monstruo que todos creen que es, él no es así". Ambas voces desaparecen y en la oscuridad de mi cuarto, mientras me repito una y otra vez que yo no hice eso de lo que todo el mundo está cien por cien seguro, que no soy un monstruo, pero otra voz aparece de la nada. Una voz que jamás olvidaré.

"¿Seguro que no eres un monstruo?"

Me dice.

¿Soy un monstruo?

Pienso.

————

Nota de la autora: Y hasta aquí el segundo capítulo de hoy. ¿Qué os ha parecido?

Por fin hemos conocido a Joel, y hemos podido saber un poco más de él y de su familia, pero sobre todo, del oscuro secreto que tiene.

¿Qué os parece Joel por el momento?

¿Cuál es vuestro personaje favorito de EADLCF?

Además, quiero deciros que tenéis en mi Instagram (Andrius.mart) el booktrailer de EADLCF, yo estoy super encantada y emocionada porque ya tenemos booktrailer. Quería agradecer a mi amiga Malena, por habérmelo hecho. ¡Me encanta! Si os ha entrado curiosidad de saber cómo es os invito a ir a mi perfil de Instagram, o a Tik tok para verlo.

Bueno, hasta aquí los capítulos de hoy, Nos leemos en el próximo camino. Se despide vuestra caótica Andrius Mart. Un beso.

🤍:🖤