Treceavo Capítulo. ♡

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Sukuna acarició tu cuerpo delineando tus curvas, te separaste del beso y lo miraste.

____;; No Sukuna, no podemos hacer est-

Sukuna te tapó la boca con una sonrisa, te extrañaste un poco al ver esa sonrisa, sentiste que algo aparecía en la mano de Sukuna, recordaste que la maldición podía generar bocas en el cuerpo de Itadori, sujetaste la mano de Ryomen e intentaste quitarla pero ya era muy tarde, esa boca te dio tremendo chape.

Mientras aquella boca se encargaba de mantenerte callada, Sukuna comenzó a desabrochar tu pantalón con una sola mano.

Sukuna;; Voy a disfrutar de esto como no tienes idea

Dijo mientras quitaba tu pantalón, se puso recto y desabrochó su pantalón para luego bajarlo, cerraste tus piernas y le diste un ligero empujón a Sukuna el cual quitó tu mano con esta acción ya que lo tomaste desprevenido.

____;; ¡Te dije que esperes!... no me gustaría hacerlo con una maldición pero... aún así quiero que ambos lo disfrutemos...

Desviaste la mirada ligeramente sonrojada, Sukuna sonrió y se acercó tu rostro.

Sukuna;; Solo porque eres tu, aceptaré

Dejó un beso en tu mejilla y bajó a besar tu cuello, donde dejaba ligeras mordidas y sus manos se dirigían a la camisa que traías en ese momento, la cual comenzó a desabotonar.

Por tu parte, tus manos estaban en el cabello del contrario, dejando suaves caricias en este, de la nada la maldición se puso firme e hizo aparecer un condón <la maldición es responsable>.

Abriste ligeramente tus piernas, el sacó su miembro de su pantalón y se puso el condón, miró tu entrepierna y pasó su mano por tu intimidad, sentiste un escalofrío en tu cuerpo y tragaste en seco.

Ryomen hizo a un lado tu panti y colocó el glande de su miembro en tu entrada.

Lo miraste, el tenía una sonrisa ladina y tú frunciste ligeramente el ceño, de un momento a otro, Sukuna entró en ti de una sola embestida haciendo que soltaras un chillido, el contrario soltó un suspiro al sentir lo apretada que estabas.

Se acercó a ti, puso sus manos en tu cintura y comenzó a embestirte de manera lenta pero profunda, lo prendía aún más los gemidos que soltabas conforme se movía. Pusiste tus manos arriba de tu cabeza.

____;; Demonios Sukuna~

Sukuna juntó tus muñecas aprovechando que tenías tus manos arriba de tu cabeza y sujetó estas con una sola mano.

Te embestia con fuerza, sentías como si te quisiera partir en dos, debías de aceptar que te dolía un poco pero el placer era aún más. Sentiste un escalofrío pasar por toda tu espalda y al cabo de unos segundos comenzaste a correrte, Sukuna te embistió con más fuerza y rapidez los últimos segundos para después quedarse quieto indicando que se estaba corriendo.

Tu pecho subía y bajaba con velocidad, la maldición soltó tus manos, salió de ti, se quitó el condón y lo quemó, se subió el pantalón y volvió a acercarse a ti con tu pantalón en manos.

Abotonaste de nuevo tu camisa y quitaste tu panti la cual estaba muy húmeda, cuando viste a Sukuna acercarse con tu pantalón, lo tomaste y te lo pusiste, Sukuna tomó tu panti húmeda.

____;; Deja eso, Ryomen

Lo miraste mal, el te miró y sonrió malicioso, olio la prenda y pasó su lengua por esta, hiciste una cara de desagrado y le quitaste la braga.

____;; Es mejor que te pongas a limpiar o Satoru se dará cuenta de que te cogiste a una mujer

Cerraste tu mano y quemaste tu braga con tu energía maldita, le guiñaste el ojo al chico y comenzaste a caminar hacia la puerta, en ese momento Itadori tomó control de su cuerpo de nuevo.

Itadori;; ¡Espera ____! Ayudame a limpiar

Lo ignoraste y seguiste caminando hasta que saliste por la puerta, cuando cruzaste la puerta, tus piernas comenzaron a temblar, maldejiste en silencio y te dirigiste a un puesto de comida para desayunar algo.

Mientras caminabas pretendías que no se notara tanto tu tembladera, no contabas que cuando llegaste el puesto, estuviera ahí el amigo de Satoru.

𝑬𝒍 𝒇𝒓𝒖𝒕𝒐 𝒑𝒓𝒐𝒉𝒊𝒃𝒊𝒅𝒐 [𝑺𝒖𝒌𝒖𝒏𝒂 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora