No existe la casualidad

Un nuevo miembro a la familia(parte 3)

Horas después de que los cuatro adolescentes mutantes se hayan duchado y descansar, al despertar fueron al dojo a entrenar como todos los días con la única excepción de que tenían un nuevo acompañante que estaba observándolos fijamente sorprendidos, maravillado y confundido por todas sus acciones al entrenar preguntándose ¿porque lo hacían y que era?.

Entonces decidió tratar de hacer una voltereta como uno de ellos pero cómo la pierna le temblaban para pararse al final terminó dando vueltas rodando por el suelo como si fuera una pelota a lo que dejaron su combate de entrenamiento viendo rodar al bebé dando vueltas debajo de los cuatro

-awww ya quiere ser como nosotros-comentó con ternura Mikey

El menor fue detenido siendo sujetado por el mutante rata que lo levantó con su cola para que dejara de dar vueltas y evitar que mareara, aunque solo reía alegre de la vida sin importarle que el mundo dé vueltas o se sacuda para el.

-bien suficiente entrenamiento de combate, ahora su siguiente entrenamiento-entregó al bebé a Leo que lo sujetó con cuidado para que no cayera-será cuidarlo. Cada uno tendrá una hora con el, a excepción de Miguel Ángel

-¿y porque yo no?, a él le encanta estar conmigo

-lo trajiste sin mi permiso y lo perdiste-eso puso nervioso al pecoso mientras sus hermanos lo miraban molesto

-no lo había perdido....solo se me fue de la vista unos minutos-contestó nervioso, su padre levantó la ceja sabiendo que mentía-está bien tal vez fue un poco más

-ni un solo día y llegaste a perderlo-comentó Leo que acomodaba a Junior que estaba algo inquieto, entonces gruñó su estómago entendiendo porque estaba así-estará mejor conmigo primero-comentó llevándoselo a la cocina para darle de comer con las compras que hizo la japonesa

Narración de Leo

Bien esto no puede ser tan difícil, es decir alimentarlo será mucho más sencillo que cambiarle el pañal. Aunque espero no tener ese turno para cuando se trate de volver a pasar por su sorpresa.

De la bolsa de compras de Ryusei tome los frascos de papilla de zanahoria y una cuchara, lo senté en la mesa para alimentarlo. En cuanto le acerque la cuchara él se acercó olfateando unos segundos hasta apartarlo con sus manos negando con las cabezas

-no te gusta la zanahoria-negó-¿acaso la has probado?-volvió a negar-¿entonces como sabes que no te gustara si no la comes?-cruzo los brazos molestos; así que será de los que da pelea. Pero no pienso rendirme así de fácil-bien como tú quieras más para mi, con lo delicioso que es-se me quedo mirando mientras fingía comerme la papilla pasando la cuchara a un lado como si la estuviera comiendo-delicioso-el empezó a estirar sus brazos por querer comerlo-okey Junior puedes comértelo-le acerque la cuchara a la boca viendo cómo disfrutaba la comida-¿te gusto?-el trago lo que tenia sonriéndome

-ico-dijo contento aplaudiendo a lo que le sonreí limpiándole con una servilleta la mejilla, y continúe dándole de la papilla

Admito que cuando Mikey quería que Junior se quedara aquí al principio me pareció una mala idea, sobre todo porque los cuatro no teníamos idea de la crianza de un bebé ya que jamás hemos estado con alguno, pero al final cómo dijo que nos podía garantizar que tuviera una familia o no pasaría por las experiencias de Ryusei y Ángel, pude ver como ellas estaban asustadas de volver a recordar esos días. Además con Junior aquí, al menos el maestro Splinter no estará solo cuando nos vayamos y tendrá más tiempo para estar ocupado cuidando de este pequeñín.

En cuanto termine de darle de comer limpie los rastros de comida de sus mejillas para que no estuviera tan sucio y no manchada nada

-¿te dio lucha?-me voltee viendo a Rafa detrás de mi-solo vine por algo de beber