Búsqueda

IV.- El Bajo Mundo

Stiles se encontraba sentado en el borde de su ventana, el cielo oscuro era su consuelo mientras que entre sus dedos reposaba un cigarro, el humo se pedía fuera de la habitación. Sus ojos estaban vacíos al igual que su pecho, solo tenía un objetivo y es lo que lo hacía levantarse a diario; por su cabeza solían pasar las imágenes de su padre, su manada y Derek, los extrañaba pero no podía arrastrarlos a la mierda de vida que tenía.

La puerta de la habitación fue abierta dejando ver a Marcos, quien esbozó una ligera sonrisa mientras se acercaba a su jefe.

- Deberías de ir a dormir, estoy seguro de que ya llevas más de tres cigarros. Tienes que descansar – le dijo Marcos mientras lograba que el rubio se alejara de la ventana y apagara el cigarro, una vez apartado cerró la ventana

- Pareces mi madre en vez de mi subordinado – se burlo el rubio quitándose su playera dejando ver su torso trabajado con el tatuaje de un lobo aullando en su costado izquierdo mientras que en su cadera del derecho había un triskel, también había algunas pequeñas cicatrices pero había una que sobresalía demasiado ya que comenzaba de la mitad de su espalda y llegaba hasta un poco arriba de su cadera del lado izquierdo.

- Sé que no debería de preguntar pero me intriga demasiado esa cicatriz – comentó Marcos sin apartar la mirada de la cicatriz y torso de su jefe

- Es una experiencia que no me gustaría volver a pasar. Fue una batalla en mi primera misión en equipo cuando me infiltre en el FBI, teníamos que encontrar a ciertas personas pero no salió muy bien y yo fui el único que salió con vida. – su mirada se volvió fría – Ahí es cuando aprendí que podía alejarme de un pueblo de mala suerte pero el mundo sigue siendo la misma mierda con la que crecí

- Perder a tus compañeros siempre es duro pero somos mafiosos o por lo menos yo siempre lo he sido y estoy acostumbrado a no sentir nada – dijo Marcos con una ligera sonrisa cargada de ironía, vio como Stiles caía dormido – pero no puedo evitar sentir algo siempre que estoy a tu lado compañero

Marcos salió de la habitación del rubio caminando hasta el sótano donde había más habitaciones entrando a una de ellas.

- Tendrás que soportarlo más, Lukyan te sacará de aquí o más bien debo decir Stiles o Mieczyslaw

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Stiles se encontraba vestido con un traje negro, anillos en sus dedos y un porte demasiado elegante, a su lado estaba Marco vestido de la misma manera. Ambos estaban en un restaurante en una parte privada donde parecían esperar a alguien.

- ¿Qué cargamento tendremos? – le preguntó Marcos

- El cargamento fue entregado pero necesitaban pagarnos así que nos darán el dinero y nosotros le daremos a ese idiota a su hijo – le dijo Stiles encendiendo un cigarro y aspirando el humo llenando sus pulmones

- ¿El adolescente que trajimos?

- Si, es un buen chico que no merecía estar en este mundo pero la escoria de su padre lo metió

Marcos sonrió. Su jefe podía ser un desgraciado hijo de puta pero nunca se metía con los inocentes si podía evitarlo, trataba diferente a los niños y adolescentes pero las cosas solían cambiar cuando eran órdenes del líder ahí no se negaba y lo había visto asesinar de una manera bastante fría y es por eso que muchos le temían pero solo él puede ver su profunda amabilidad y cariño.

Un hombre de cabello azabache de ojos café se acercó a la maesa con un maletín en su mano, algo que hizo sonreír a Stiles.

- Рад видеть, что вы согласны нас видеть, мистер Волков. Надеюсь, вы принесли то, о чем мы договорились (Me alegra ver que acepto vernos seño Volkov. Espero que haya traído lo que acordamos) – le dio una calada más al cigarro – Меня зовут Лукьян, отныне он будет со мной. Теперь вы стали собакой Черных драконов (Me llamo Lukyan, será conmigo con quien trate de ahora en adelante. Usted se volvió ahora un perro de los Dragones negros) – le dijo de manera seria logrando que el hombre frente a él temblara algo que de manera interna lo hizo sonreír porque bien sabía con quien trataba y no se desharía de él tan pronto.

- Да сэр. Я буду твоей собакой, вот деньги (Si, señor. Seré su perro, aquí está el dinero) – abrió el maletín mostrando muchos billetes a lo que Stiles asintió y Marcos cerró el maletín y se lo llevo – Могу я узнать, где мой сын? (¿Puedo saber dónde está mi hijo?)

- Господин Волков, я человек слова, вы должны помнить об этом (Señor Volkov yo soy soy un hombre de palabra, es algo que debe de recoerdar) – miró a Marcos – Приведи мальчика (Trae al muchacho) – miró al hombre de nuevo – Хорошо. Вы собираетесь забрать своего сына очень далеко отсюда, вы собираетесь изменить его личность, это больше не будет иметь ничего общего с вами или той ситуацией, в которую вы попали, и если я узнаю, что вы пошли к нему, я убью ты и твоя жена. Вы же этого не хотите, не так ли? (Bien. Vas a llevar a tu hijo muy lejos de aquí, vas a cambiarle su identidad, ya no tendrá nada que ver contigo ni esta situación en la que te metiste y si me llego a enterar de que fuiste a verlo te mataré y a tu esposa. No quieres eso, ¿verdad?)

El hombre asintió con miedo pero se levantó al ver como un chico de cabello azabache entraba al lugar.

- Luka – exclamó el hombre mientras abrazaba a su hijo

- Они могут уйти. Увидимся г-н Волков (Pueden irse. Nos estaremos viendo señor Volkov)

Cuando salieron Marcos se acercó a su jefe con una sonrisa.

- ¿Necesitas algo?

- Quiero que lo vigilen y si no cumple con lo acordado me dices de inmediato

- Что вы заказываете (Lo que ordenes)

- Świat jest do bani, ale przetrwają tylko najmądrzejsi (El mundo es una mierda pero solo los más inteligentes sobreviven)

Marcos no sabía que había dicho Stiles pero solo pudo sonreír porque él era la única persona en su mafia que hablaba polaco, él le había dicho que su difunta madre se había enseñado.