ANDRÓMEDA

CAPÍTULO 2

- ¡Andrómeda!

Me giro para ver quien me ha llamado, es Raily, parece que se ha saltado su última clase, cuando se acerca a mí la pregunto

- ¿No deberías estar en clase?

- Si, debería

Sonrío negando con la cabeza, cuando ve que empiezo a bajar las escaleras, entrelaza su brazo con el mío

- Tengo noticias frescas –dice- te las cuento en tu casa

- ¿Y por qué no ahora?

Sabía lo que quería decirme, ya se había extendido la noticia de que un tal no sé quién iba a dar esta tarde una fiesta en no sé dónde.

Veo como me mira con ojos de bambi, siempre hace eso cuando quiere convencer a alguien que sabe que va a decir que no. Me pregunto cuando aprenderá que conmigo eso no funciona.

- Sé que no te gustan las fiestas, pero ¿En serio me vas a dejar ir sola? A demás, necesito que hagas eso raro que haces con el tiempo

Sí, Raily es la única que sabe que puedo parar el tiempo

- Ni hablar

- O vamos Andrómeda

- No

- Pues acompáñame, si me acompañas no te pediré nada

Era estúpido discutir con ella, siempre salía ganando

- Vale – sigo andando, pero ya no noto el brazo de Raily, ni a Raily, me giro para mirarla, está mirándome con los ojos como platos y la boca abierta - Tendría que haberte echo una foto

- ¿De verdad? ¿Me acompañaras a la fiesta?

- Si

- Llevo intentando convencerte durante dos meses de que vayamos a una fiesta ¿Y ahora de la nada me dices que sí?

- De la nada no, tú misma lo has dicho, llevas dos meses siendo muy pesada, ha sí que vale, vayamos a esa fiesta

Dos horas después estamos en casa de Raily, ella ya está vestida, mientras que yo no paro de fruncir el ceño mirando su armario. No me ha dejado ponerme mi pantalón vaquero azul favorito y mi camiseta negra básica, y ahora estoy en su habitación mientras Raily saca tops y faldas cada vez más pequeños

- Esto no va a funcionar

- ¡Claro que sí! – coge dos prendas diminutas y me las lanza a la cara mientras me mete en el baño a la fuerza- ¡Ni se te ocurra salir sin enseñármelo antes!

Suspiro mirando la ropa con detenimiento, es una camiseta vino burdeos que me queda por encima del ombligo y una mini falda ajustada de cuadros negros y blancos. He de decir que me veo bastante sexy. Raily es más delgada que yo, y el culo se me nota más de lo normal.

- Andrómeda, como lleguemos tarde… - ruedo los ojos y abro la puerta, en cuanto me ve empieza a aplaudir como una loca- ¡Estas súper sexy! ¡Y que culo!

Empezamos a reír con ganas, me miro un momento en un espejo…sí que estoy muy guapa, sí

- ¿Dónde es la fiesta?

- En el bosque, podemos ir andando

- ¿En un bosque? No quiero ser aguafiestas, pero en las películas nada va bien cuando la fiesta es en un bosque

Entrelaza su brazo con el mío

- ¿No te has traído chaqueta? – dice cambiando drásticamente de tema- más tarde tendrás frío

Miro la chaqueta diminuta que lleva en la mano

- Creo que no voy a ser la única que va a pasar frío –murmuro, llevándome un codazo por su parte

                              •••

Hay muchísima gente, el ambiente me está empezando a marear y solo llevamos aquí hora y media. Hace rato que he perdido de vista a Raily, estaba halando con un chico la última vez que la vi, ha sí que la cosa va para largo.

Mi casa está un poco más lejos que la suya, pero puedo ir perfectamente andando, lo malo es que habíamos quedado en que me quedaría en su casa a dormir – suspiro- veo una piedra que no está muy lejos de la fiesta –tampoco quiero alejarme tanto- me siento en ella apoyando la cabeza en el árbol que hay detrás y vuelvo a suspirar

- Cuando te pille te vas a enterar Raily –murmuro cerrando los ojos
Creo que no llevo ni cinco minutos a si cuando me parece oír pasos, no me molesto en abrir los ojos, estoy demasiado cansada como para que me importe –vuelvo a suspirar-Raily tenía razón, debería haberme traído una chaqueta –vuelvo a murmurar medio dormida

                         
Me despierto sobresaltada cuando una música sale disparada de algún lado, me doy cuenta de que es mi móvil –alguien me está llamando-  palpo con rapidez el bolsillo de la falda, pero me quedo paralizada cuando veo que tengo una chupa de cuero en el regazo a modo de manta. No puedo procesarlo mucho más porque mi móvil vuelve a sonar

- ¿Si?

- ¡¿Si?! - casi se me cae el móvil del susto- ¡¿Se puede saber dónde narices estas?!

No la hago ni caso, me levanto de la roca - que me ha dejado el trasero dolorido- y vuelvo a examinar la chaqueta con curiosidad. Huele bien, y no sé porque sonrío como una estúpida cuando me la pongo, las mangas me quedan enormes, pero me gusta

- ¿¡Me estas escuchando!?

- No

La oigo suspirar

- ¿Dónde estás Andrómeda?

Miro a mi alrededor, es horrible no tener sentido de la orientación ¡Todo me parece igual!

- ¿Dónde estás tú?

- Buscándote como una loca con Marlok – noto como su tono de voz se suaviza cuando dice ese nombre

- ¿Quién?

- El chico que he conocido en la fiesta, tengo que contarte tantas cosas

- ¿Es ella? – oigo una voz de chico que viene de lejos- ¿Está bien?

- O sí, es verdad ¿Me vas a decir dónde estás?

Ruedo los ojos y, casi se me para el corazón cuando veo que alguien pasa por mi lado andando hacia la fiesta despreocupadamente, esta tan oscuro que solo llego a ver su silueta, pero distingo su olor. Me estoy volviendo loca o… ¿Huele igual que la cazadora que llevo puesta?

- Raily, no te preocupes, estoy en casa, me estaba agobiando mucho y se me ha pasado llamarte para avisarte

- ¿Se te ha pasado llamarme? Voy a fingir que me lo creo, avísame si necesitas algo

- Claro

Cuelgo antes de que pueda decir nada más, tengo ganas de seguir al chico que hace rato he perdido de vista, pero cambio de opinión y me dirijo a mi casa