𝗛𝗢 𝗛𝗢 𝗛𝗢𝗘

˚.＃；16

─ ¿Qué se supone que no debes hacer?

─ Escabullirme con Winwin.

─ ¿Y dónde se supone que debes estar todo el tiempo?

─ En la habitación, contigo y con Yuta y si tengo que ir al baño te lo tengo que decir.

─ ¿Y que pasa si no sigues esas simples reglas?

Taeyón rodó los ojos antes de responder.

─ Seré castigado. En serio Jaehyun, actúas como si fuera un niño.

─ Es que no quiero que se repita lo que pasó la última vez, Ángel ─dijo Jaehyun mientras daba un sorbo a la bebida que tenía en la mano. En estos momentos se encontraban de camino al club de Yuta una vez más y esta vez Jaehyun se aseguró de poner algunas reglas al rubio.

Como la última vez, Taeyong se vistió con otro traje revelador. Pero éste era, con diferencia, el más cómodo y menos revelador. Llevaba un vestido rojo ajustado que se detenía en la mitad superior del muslo. También llevaba unos tacones plateados que hacían juego con el vestido.

Taeyong observó a Jaehyun y se dio cuenta de que llevaba un traje completamente negro, como de costumbre, combinado con una corbata negra. Taeyong nunca entendió por qué llevaba ese color oscuro casi todos los días, pero no se quejaba. El negro simplemente le hacía parecer más dominante, poderoso, pero sobre todo sexy.

─ ¿Sabes cual color te quedaría bien? ─preguntó de repente haciendo que el otro lo mirara con una ceja alzada.

─ ¿Cuál?

─ Rojo o quizás incluso morado. Algo que no sea negro.

─ ¿No te gusta que lleve ropa negra?

─ No, no es eso, es que... ─se interrumpió─ Usas negro todo el tiempo y aunque te ves muy sexy en él, tal vez deberías probar un color diferente. Uno que te haga lucir menos......... aterrador.

─ ¿Crees que doy miedo?

─ No, no es eso ─negó rápidamente─ Es sólo que siempre pareces tan inaccesible y la mirada de muerte que le das a la gente no ayuda mucho. Tal vez deberías probar un color más brillante como el amarillo o... ¡O el rosa!

Jaehyun se burló.

─ No hay manera de que me ponga rosa.

─ Sólo era una sugerencia ─el rubio hizo un mohín y se cruzó de brazos─ ¿Y si se te acerca un niño? ¿No quieres parecer accesible?

─ No, no me gustan mucho los niños, creo que son demasiado exigentes. Además, me gustan más los perros.

─ Oh ─dijo Taeyong en voz baja. No pudo evitar pensar en Haechan y en lo que pasaría si él y Jaehyun se encontraran alguna vez. ¿No le gustaría a Jaehyun? ¿Dejaría de querer a Taeyong cuando supiera que tenía un hijo? Había tantos 'y si' corriendo por su mente que no se dio cuenta de que Jaehyun le miraba fijamente. Hasta que lo agarró de la cara haciendo que se miraran a los ojos.

─ ¿Qué pasa Ángel? Fue algo que yo di-

─ Siento interrumpir su pequeño momento, chicos, pero hemos llegado ─le interrumpió Lucas. Taeyong agradeció mentalmente a Lucas la interrupción.

Jaehyun suspiró antes de dejar pasar el tema. Salieron del coche y el ruido de la gente dentro y fuera del club llenó sus oídos. Era casi ensordecedor pero no era nada a lo que no estuvieran acostumbrados. Fueron a la misma sala que la última vez y, sorprendentemente, Yuta y Winwin ya estaban allí.

─ Wow, por una vez llegaste temprano.

─ ¡Hey, puedo llegar temprano cuando quiero! No es mi culpa que siempre esté ocupado ─se defendió Yuta─ ¡Tengo mierda que hacer, tú sabes!

Mientras los dos retomaban la reunión desde donde la habían dejado, Taeyong y Winwin volvieron a sentarse junto a la barra. Esta vez había un camarero de verdad para servirles.

─ ¿Hay algo que pueda traerles?

─ Oh, yo no bebo ─Taeyong rechazó rápidamente la oferta. No ha bebido ningún tipo de alcohol desde que nació Haechan.

─ ¡No bebes! ¿Por qué? ─preguntó Winwin.

─ Y-yo... supongo que nunca he tenido tiempo de hacerlo.

─ Tomaremos dos vinos tintos ─el camarero asintió y sacó las bebidas solicitadas antes de dárselas a los dos varones.

─ Winwin te dije que no bebo ─se quejó Taeyong. No había bebido en años y no pensaba empezar ahora.

─ Vamos. Es sólo un trago Taeyong. Vive un poco ─intentó Winwin.

─ Bien, pero sólo tomaré una, ¿De acuerdo? ─Winwin asintió feliz de poder conseguir que el rubio se tomara al menos una copa. Animaron sus bebidas antes de dar un sorbo. Taeyong estaba preparado para que le supiera a triple como la última vez que lo tomó hace un año. Pero, sorprendentemente, no estaba tan mal─ Es mucho mejor de lo que pensaba.

─ Ahí tienes el espíritu ─Winwin observó como el rubio terminaba el resto de su bebida antes de pedir más. No pensó nada hasta que Taeyong ya iba por su quinto vaso─ Umm Taeyong ¿no crees que has tenido suficiente?

─ Pushhhh no... S-sólo me estoy desestresando ─Taeyong arrastró las palabras. Era obvio que estaba borracho y su balanceo de un lado a otro no ayudaba. De repente agarró a Winwin por los hombros y tiró de él para que sus caras estuvieran a centímetros de distancia─ Sabes Winwin-ah eres muy bonito. Yuta tiene suerte de tener a alguien como tÚ.

─ Gracias Taeyong pero podrías por favor soltar mis hombros. Me estás haciendo daño ─después de decir eso el rubio le soltó los hombros y empezó a llorar. El moreno estaba más que confundido y ligeramente preocupado─ Eh, eh, Taeyong ¿qué pasa? ¿Por qué estás llorando?

─ ¡Yo-yo te hice daño Winwinine! N-No quise ha-hacerlo.

Winwin atrajo al rubio en un fuerte abrazo frotando su espalda.

─ Está bien, ya estoy bien ─Taeyong asintió con la cabeza y aún se aferró a Winwin con fuerza.

─ Hueles bien, como una sandía o algo que sea una fruta.

─ Umm, ¿Gracias?

─ ¿Podemos ir por un cachorro? ─Taeyong lo miró con ojos grandes.

─ No Taeyong, nosotros n-

─ ¡Vamos a por un cachorro! ¡Vamos! ─el rubio se levantó y arrastró al moreno con él hasta donde estaban sentados Yuta y Jaehyun─ ¡Queremos un cachorro!

─ ¿Quieren qué, Ángel? ─preguntó Jaehyun, confundido ante la repentina pregunta.

─ Queremos un cachorro y quiero llamarlo Coco. Ya sabes, como las cosas marrones en forma de círculo que caen de los árboles y siempre parecen tristes.

─ Sé lo que es un coco, Taeyong. Pero no vamos a tener un cachorro ─no esperaba que a Taeyong se le humedecieran los ojos y las lágrimas empezaran a correr por sus mejillas sonrojadas. Taeyong se lanzó repentinamente sobre Winwin casi derribándolo.

─ ¡Se está portando mal, Winwinine! Haz que el hombre malo se vaya!

Los otros dos observaban la escena con la confusión escrita en su rostro. Winwin se dio cuenta y les dijo "Está borracho" lo que tenía mucho más sentido.

─ Recuérdame que nunca deje beber a Taeyong ─murmuró Jaehyun.