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-Smut-
Para hacerlo simple, hay smut en este capítulo, leelo bajo tu propio riesgo.
-Smut-

———

— Ángel no tienes que darme nada.

— ¿Quieres el regalo o no?

Jaehyun suspiró, pero asintió.

— Bien, cierras tus ojos —tomando la decición de no pelear con el rubio hizo lo que este le dijo— Ya regreso.

Taeyong corrió al baño donde le esperaban todas sus cosas. Quería ir con todo para esto. Cuando volvió, Jaehyun seguía sentado con los ojos cerrados.

— Bien, ya puedes abrir los ojos.

Jaehyun sintió que su respiración se agitaba cuando vio la impresionante vista que tenía ante sí. Taeyong estaba de pie con una de sus grandes camisas blancas abotonadas, una falda negra, medias negras, un collar que decía "Niño de Papi" y, por último, pero no menos importante, un par de mullidas orejas de gato en la parte superior de su cabeza.

— ¿Para qué es todo esto, Ángel?

— No sabía qué regalarte por Navidad, así que pregunté a los otros pasivos qué debía regalarte. Ten me sugirieron que me entregara a ti, así que aquí estoy.

— ¿Puedo desenvolver mi regalo ahora? —Taeyong se acercó a él y se sentó entre sus piernas en el suelo.

— Esto es mejor que un Hamster o un coche, ¿Verdad?

— Sí, Ángel, esto es mucho mejor que un hámster o un coche —se rió Jaehyun ante su ternura. Se preguntaba cómo alguien podía ser tan guapo y tan sexy al mismo tiempo. Pasó su pulgar por la mejilla de Taeyong suavemente antes de hacer lo mismo en sus labios— Ahora veamos qué puede hacer esa bonita boca tuya.

Taeyong asintió y bajó los pantalones y la ropa interior de Jaehyun de una sola vez. Hacía tiempo que no le hacía una mamada. De hecho, hacía tiempo que no tenían sexo. Si consideras que cuatro días es mucho tiempo.

Taeyong lamió la punta un par de veces antes de tomar a Jaehyun entero. Inmediatamente gimió extrañando la sensación de tener la boca llena. La vibración de su gemido provocó escalofríos en todo el cuerpo de Jaehyun.

— Joder, Ángel, eres tan bueno en esto —agarró el pelo de Taeyong haciendo que le mirara. Mantuvo el contacto visual mientras movía la cabeza hacia arriba y hacia abajo. Fue tan rápido como pudo para darle mucho placer a Jaehyun— Mierda, me voy a correr y será mejor que te lo tragues.

Sabe perfectamente que Taeyong siempre traga aunque no se lo pida. Probablemente sea una de sus manías.

Cuando el líquido caliente llenó aún más la boca de Taeyong, no dudó en tragárselo. Se aseguró de ordeñarlo hasta dejarlo seco. Cuando se retiró, abrió la boca de par en par para que Jaehyun lo viera.

— Buen trabajo Ángel. La pequeña zorra de papi, ¿No es así?

— Hace tiempo que no te llamabas papi —dijo Taeyong.

— ¿Te está apagando?

— En realidad, todo lo contrario.

— Entonces lo mantendremos —Jaehyun entonces lo levantó y lo colocó en la cama. Le quitó la camisa blanca que llevaba Taeyong antes de decir: "Ahora vuelvo". Con eso, dejó a Taeyong tirado en la cama y volvió unos minutos después.

— ¿A qué viene todo eso?

— Tendrás que esperar y averiguarlo —le guiñó Jaehyun. Colocó los objetos sobre la cama antes de quitarse la ropa.

Taeyong vio mejor lo que había colocado en la cama y enarcó una ceja. ¿Era nata montada y fresas?

— ¿Ahora puedo saber para qué son?

— Bueno, ya que eres tan impaciente —Jaehyun se puso encima de Taeyong y le dio un profundo beso. Mientras lo hacía, abrió la tapa de la crema batida llamando la atención del rubio.

— ¿Qué estás- ? —fue cortado por la fresa que le introdujo en la boca.

— Hablas demasiado, Ángel —sonrió Jaehyun mientras sacudía la botella antes de rociar un poco de la esponjosa crema blanca sobre su pecho expuesto. Taeyong se estremeció cuando la crema fría se colocó sobre él, especialmente en la región de los pezones.

Se estremeció aún más mientras Jaehyun sorbía lentamente el sabroso manjar. Sabía que prestaba una atención extra a sus pezones a propósito, ya que era uno de sus puntos sensibles.

Cuando Jaehyun terminó, puso un poco de la crema batida en el cuello de Taeyong lamiendo y chupando también esa parte de su cuerpo. Cuando Jaehyun terminó por fin, casi utilizó todo el bote de nata montada.

— ¿Puedes follarme ahora, papi?

— Será un placer, Ángel —Jaehyun retiró todo de la cama antes de volver a mirar a Taeyong— Como te has portado bien te dejaré elegir la posición hoy.

— ¿Podemos quedarnos así? Quiero mirarte.

— Cualquier cosa por ti, mi amor.

Ambos se detuvieron después de que Jaehyun dijera cinco letras. Taeyong sintió que su corazón se llenaba de una felicidad que no podía contener.

— ¿Puedes decir eso de nuevo?

— ¿Qué mi amor?

— ¡Lo acabas de decir! ¡Me llamaste tu amor! —Taeyong lo atrajo en un fuerte abrazo sin querer dejarlo ir— Yo también te amo Jung Jaehyun —susurró.

— ¿Puedes repetirlo? —Jaehyun medio se burló pero realmente quería escuchar al rubio decirlo de nuevo.

— Te-a-mo —dijo por separado.

— También te amo Lee Taeyong —Jaehyun lo besó dulcemente con una sonrisa en el rostro. Mientras se besaban trató de meter su polla dentro de él con la mayor discreción posible.

— Si vas a meterla, hazlo ya —se rió Taeyong, pero pronto se convirtió en un gemido ahogado cuando Jaehyun aceptó su oferta.

— Dios, te he echado mucho de menos, Ángel.

Taeyong no podía responder por como estaba siendo follado bruscamente en ese momento. Sólo dejó que su boca colgara abierta y salieran suaves gemidos. Empezó a arañar la espalda de Jaehyun dejando pequeñas pero prominentes marcas rojas.

Mordisqueó el cuello de Jaehyun y empezó a dejar marcas de propiedad aquí y allá. Los gemidos bajos de Jaehyun le hicieron seguir. Cuando cierto punto suyo fue golpeado con demasiada brusquedad, mordió con dureza la piel del cuello del otro.

— Ay, Ángel, ¿Estás tratando de chuparme la sangre o algo así? —Jaehyun gimió, el mordisco dolía más de lo que se pensaba. Pero como venía de Taeyong no le importó.

— Y-Yo... estoy tan- —Taeyong se cortó con un fuerte gemido.

Jaehyun puso una de las piernas del rubio sobre su hombro para poder ir aún más rápido y más profundo. No pudo evitar sonreír al ver el estado de Taeyong. Le hizo sonreír aún más sabiendo que él lo había causado.

— ¿Pu-Puedo correrme?

— ¿Puedes aguantar un minuto más? Ya casi estoy.

— O-Okay —Taeyong hizo su mejor esfuerzo para aguantar. Pero con Jaehyun golpeando sin piedad en él era un verdadero desafío.

— 1, 2, 3 —ambos se corrieron con fuertes gemidos y quejidos. Taeyong echó la cabeza hacia atrás cuando el otro empezó a besar su cuello.

— Tengo una pregunta para ti Ángel.

— ¿Q-Qué es?

— ¿Quieres ser mi novio?

— Pensé que nunca lo preguntarías —Taeyong lo jaló en otro profundo beso. Jaehyun no perdió tiempo para devolverle el beso.

— Entonces, ¿Eso es un sí?

— Sí.

— Bien, ahora......... ¿Segunda ronda?

— Pensé que nunca lo preguntarías.

𝗛𝗢 𝗛𝗢 𝗛𝗢𝗘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora