Sentirte en ruinas como Roma

Amistad

Conocí a mucha gente pero pocos fueron mis amigos, pues digamos que prefiero quedarme sola a tener amistades como ellos. Amigos que solo te querían en fiestas, cuando el alcohol corría, cuando nos sentiamos en la cima, cuando nos reiamos de la nada, y nuestras preocupaciones se desbanecian por segundos pero en esos momento de fiesta es cuando yo tenía que volver a esa realidad, a tus competiciones de mierda de ver quien bebia mas, que me daban asco. Lleno de infidelidades, de familias que vivían en una mentira. Tus amigos que fueron acosadores, y aun asi los defendias, con un 'a saber como ibas vestidas' o con un 'seguro que le has provocado'. Lleno de hipocresía barata, cansada de escuchar tus problemas, los problemas tambien de tus amigos... pero que ni tú ni ellos, nunca tuvieran tiempo de escuchar los mios. Me río ahora mientras antes lloraba y pateaba como una niña pequeña indefensa. Cansada de aquellas amigas que decian serlo y se largaron cuando mas las necesitaba. ¿Donde estabais cuando mi mundo se rompía, cuando Roma se destrozaba en pedazos? Puedo deciros con toda la tranquilidad que gracias, me hicieron el favor de irse de mi vida, pues me dí cuenta que amigos como vosotros era mejor tenerlos lejos...

Este capitulo va por el cual me tuve que alejar de Kaos.  Tú te sabes esta historia mejor que ninguno pero necesito ser libre, necesito quitarme estas cadenas que pesan tanto:

Era una noche hermosa. Entonces te dije 'vamonos de fiesta' sin nada que celebrar, solo quería bailar y cantar. A lo cual aceptaste, la verdad es que nunca me sorprendi pues a ti tambien te encantaba. Fui a tu trabajo y te dire algo que siempre te he dicho; 'y es que has sido un trabajador buenisimo, siempre has estado dispuesto a trabajar'. Y es que tenías esa facilidad de hacer cualquier cosa que se te daría genial, ese don de gentes de convencer a los demas que tenías un gran poder pero en realidad... Estabas vació, no había poder solo el poder que te daba yo, el poder de destruirme cuando te diera la gana.

Yo te apoyaba en cada aventura pues aquí me tienes, esperando a que salgas con mi vestido rojo por debajo de la rodilla, mis tacones negros dispuesta a bailar hasta el amanecer. Entre y alli estabas y para mi sorpresa me presentaste aquellos amigos tuyos. Una pareja de hermanos que no conocía, tus dos amigos, tu prima, la amiga de tu prima y tu madre. Ya iba con miedo sabiendo que iba a pasar. Pero aun asi me sentía segura contigo.

-Vamonos.

Empezamos a ir por el bosque, tu amigo sabía donde teniamos que ir, pero nos perdimos una y otra vez. Tú me dijiste que me callara para no distraerle aun que fuera él quien empezaba a sacarme el tema de conversacion. Llegamos, la musica sonaba y alli estabamos todos, bailando. Riendonos, pensabamos que eramos felices. Pero nos equivocamos.

Te mire y te pregunte '¿Puedo bailar con tus amigos? Estan todo el rato solos'. Tu me respondiste que claro que sí. Asi que empece a bailar pues tu solo bebias para saber quien aguantaba más. Para mi siempre ese juego era como jugar ahorcarse y ver quien de los dos dejaba de respirar antes. Por mas que ganaras, tu igual ibas a morir. Pero te gustaba jugar a ese juego y decirme 'Que todo fue por mi culpa'. Odio en la forma en la que me mataste pero tengo que seguir escribiendo, escribiendo en sangre porque mi piel sangra por mis errores.

Empece a bailar y tu amigo que tenía familia se empezo a besar con otras, y tú eso lo veías normal. Me aleje de aquel lugar no podía verlo porque sentía el dolor, sentía como me quemaba. Pero para ti que yo me alejara era 'porque queria estar a solas con tu amigo'. Mientras me acercaba y te decía quiero irme, no me encuentro bien. No fue de mi sorpresa ver, como uno de tus amigos no podía caminar por la influencia del alcohol pero si me sorprendi al ver como os daba igual que el chico se cayera al suelo, os daba igual que se golpeara y yo no puedo ser así. Le ayudé, a lo cual tu lo viste fatal pero, no viste fatal que en el camino él intentara tocarme y mientras que yo quería gritar. Tú hablabas con el chico que antes nos perdía porque decías que yo era la distracción, preferiste dejarme con su hermano que estaba borracho.

Mientras yo estaba muerta de miedo intentando evitar que él me pusiera las manos encima, evitar que él me intentara besar. Llegamos a tu casa y al entrar me puse a llorar, te conté todo lo ocurrido. Jamás olvidaré tu repuesta : 'Normal te preocupaste por él y seguro que le has tentado'.

Nunca me creiste, pero en ese momento mi corazon por fin se partió y digo por fin, porque sabía que hasta que no se rompiera no te dejaría de amar, pero no me creías, y jamas te importo protegerme.

Me fui a dormir donde tu madre, y si te digo la verdad lo unico que en ese momento pensé, es que necesitaba a Gladiador, necesitabla hablar con él, necesitaba sentirme entre sus brazos y pensar que esta pesadilla terminó.

Y asi fué, así me hiciste partir. Me hiciste conocer a Roma, a una Roma que no conocía, a una Roma indefensa, a una Roma debastada por una guerra que todavia le quedaba mucho por terminar. Roma nunca pudo ser la misma.