Nothing is simple

Capitulo 2:

Hoy tengo que ir a tomar mi tratamiento, mi rutina para estos días siempre es la misma, levantarse tarde, leer un poco, cambiarme y salir de mi cuarto con una sonrisa para aparentar que tengo esperanza en la vida.

Al bajar me encuentro con Liz, quien me entrega mi cubrebocas y nos dirigimos al auto donde nos espera el chofer.

¿No soy la única que se imagina muchas cosas mientras va en el auto cierto?, es decir en cuanto arrancamos me pongo a pensar en que pasaría si fuera parte de un libro, en donde soy la protagonista que perdona una y otra vez al imbécil que la hace sentir mal, que la denigra y es un misógino que se la pasa tratando de la verga a cuanta mujer se le ponga enfrente, o tal vez sea la protagonista que esta destinada a ser odiada solo por expresar sus emociones y sentimientos hacia el chico, o tal vez y creo que en definitiva seria la mejor amiga que se la pasa disfrutando su vida sexual como se le da la gana, no lo se ustedes ¿Qué personaje serian?.

Llegamos a nuestro destino, y bajamos con cuidado, yo camino a los sillones de la sala de quimioterapia mientras Liz me registra en la recepción, la enfermera me coloca el tratamiento me da una sonrisa y se retira, a lo lejos observó a Liz acercarse con un jugo y lo recibo gustosa, es de betabel y el de ella es de zanahoria.

-Me conto Clara que hay nuevos pacientes- dice y vuelve a tomar un sorbo.

-Que bien, tal vez exista uno que no me tenga asco-

-Calla que son lindos-

-Bueno, siempre puedo admirarlos, sin acercarme-

-Ponme atención, esta podría ser tu oportunidad para conseguir un lindo novio-dice con entusiasmo.

-Yo ya tengo un novio se llama Niall Horan-digo de manera sarcastica.

-Claro se me olvidaba que tu relación más larga es con una persona que ni siquiera te conoce, aparte es turbio que digas que te gusta de esa forma-

-Bueno estoy cansada de aparentar que no me gustaría un beso de el- me encojo de hombros.

- Medícate loca- dicen a mi espalda y volteo inmediatamente, el me da una sonrisa, - ¿Cómo te encuentras linda señorita? -. Frank está enfrente de mí, este chico es uno de los enfermeros dentro de este hospital, en lo personal mi favorito, es un tanto sarcástico, pero es bastante extrovertido, bastante responsable y autoritario.

- ¿Qué haces aquí, no sueles venir a esta hora?-pregunto.

-Nop, estoy aquí porque vengo a ver al doctor Morgan, creo que necesito un cambio en mi medicación-

-Oh por dios- casi grita Liz-oh por dios, oh por dios-ambos volteamos a verla y ella está muy sorprendida mirando el celular- Tu hermano acaba de invitarme a cenar- me señala varias veces con un dedo.

- ¿Cuándo? -pregunto.

-Esta noche, dice que tiene algo muy especial que decirme-contesta con una gran sonrisa.

-Creí que el te avía dejado claro que no queria nada contigo-le dice Frank.

-Y yo lo estaba asimilando, pero me acaba de decir que quiere que cene con el- dice tecleando el teléfono con una sonrisa, su rostro no tiene precio, de cierta manera no me agrada la idea de que salga con mi hermano él ya le ha dejado claro en varias ocasiones que no siente nada por ella, pero Liz como que no lo asimila y sigue en la idea de que el también la quiere.

-Solo ten cuidado, cuida tu corazón porque nadie más lo ara por ti- dice Frank, ella lo ignora; poco a poco su sonrisa se borra mientras se pone roja.

-Olvídenlo, dice que quiere hablar contigo también-me dice haciendo una mueca.

-Solo olvida a ese bastardo que solo te causa problemas- le dice mi amigo con una mueca de fastidio - él ha sido un idiota contigo, conmigo, incluso con ella- me apunta- debes dejar de ser su tapete, eres muy linda, inteligente, capaz y sobre todo independiente,  ponte un lindo vestido y sal a bailar, tomar, ser feliz, que ese hombre se quede con una que lo aguante con todo y su idiotez- lo miro con la ceja alzada- sin ofender-se disculpa.

-Tranquilo creo que tienes razón, Liz debes salir y ser feliz sin estancarte en ese agujero del que claramente te esta costando salir -digo mirándola a los ojos.

-Lo pensare- responde de manera cortante.

****

Liz sube en la parte trasera del auto y cuando abro la puerta del copiloto me encuentro con una pelinegra despampanante, de ojos lindos y sonrisa envidiable, ella solo me sonríe y mi hermano me mira con una cara de súplica.

-Ella es Carol, me gustaría que la dejaras en este lugar, puedes ir en la parte trasera, quiero llegar a casa para hablar-dice mirándome muy fijamente.

-Hola hermano me fue increíble en la quimioterapia de hoy y tu ¿Cómo estás? -digo de manera irónica.

Me dirigo a la parte trasera.

- ¿Cómo les fue? -pregunta Antoni tras un largo silencio.

-Bien-contesto-Frank hablo con nosotras un buen rato y aligero el ambiente-.

- ¿Frank? -pregunta mirando a Liz por el retrovisor.

-Si, el enfermero, el chico alto, de ojos grises, lentes cuadrados, y cabello rubio amielado -dice ella mirando por la ventana negándose a cualquier contacto visual.

-Lo recuerdo, es un chico agradable, solo que le tira la onda a todo hombre que se mueve-la chica a su lado ríe - es en serio una vez me pidió salir y cuando le dije que tenia pareja dijo que no le molestaría experimentar un poco con una chica linda-la chica ríe con mas fuerza y yo también lo hago.

**********

Entramos en la casa y vamos la sala para que mi hermano nos presente a su amiga, o novia, yo que se.

-Liz, Neftalí, les presento a Carol-dice viéndonos a nosotros-Carol ellas son mi hermana-me señala-y su enfermera, alguien muy querida en esta familia.

-Es un gusto conocerlas, Antoni me ha contado mucho de ustedes-dice sonriendo, se limpia la mano con el pantalón y me la ofrece.-Lamento si estoy sudada, es que cuando me pongo nerviosa no se que me pasa que me sudan las manos, de manera excesiva, también me pongo a divagar, no mido mis palabras, termino contándote casi toda mi vida- se ríe- tal vez sea un trauma, no me avergonzaría, la verdad, supongo que es porque todos tenemos traumas, por cierto, sabían que nuestros traumas son en un ochenta porciento a causa de nuestros padres, yo no tengo padres, ¿Entonces por que mis traumas?, en realidad... - Antoni le pone una mano en el hombro y le da una sonrisa tranquila, ella reacciona y nos mira muy apenada.- Lo lamento, no medí mis palabras de nuevo, en fin, lo que quería decir es que me han contado mucho de ustedes-.

-Lamento no poder decir lo mismo-contesta Liz-pero casi nunca paso tiempo con Antoni así que es difícil hablar de algo fuera de lo profesional-dice un poco incomoda, pero trata de que no se note.

-No hay problema tal vez podamos conocernos hoy en la cena-habla Carol.

-Lamento informarles que mi horario termina en media hora y tengo planeado salir con un amigo, así que no podre acompañarlos, pero tal vez en otra ocasión-pequeña mentirosa, pienso.

- ¿Vas a dejar los planes que ya tenías por unos planes de última hora? - pregunta Antoni con una ceja alzada.

-Bueno lo que querías era conociera a tu...-

-Amiga- contesta el, Carol lo mira con una sonrisa.

-A tu amiga -repite y puedo ver los celos en su mirada-ya lo hice y me agrado, espero y les valla muy bien, yo tengo que retirarme, con permiso-

-Adelante- dice la chica.

-En realidad fue un gusto conocerte, pero estoy muy cansada, la quimio de hoy fue muy pesada, pero podríamos hablar otro día-no miento, creo que no puedo ni caminar de manera correcta.

-De acuerdo- dice con un tono de desilusión.

-Tranquila ya habra otra oportunidad-dice mi hermano.

No digo nada y subo a mi habitación, no mentía cuando digo que estoy muy cansada.