NEFTALI
-Entonces me tomo la barbilla y me miro para decirme "un lo siento no en suficiente" ... - intento continuar, pero Liz me interrumpe.
-Espera- ella deja de lado su té y se acomoda en el asiento – En primera te pusiste roja, en segunda quisiste huir, algo raro en ti y en tercera decidiste que debías pedirle disculpas por algo que claramente tu no puedes controlar, esta en definitiva no eres tú -.
-Bueno no podías esperar que fuera arrogante, cuando fui yo quien lo agredió-.
-Bueno no pienso discutir esto, ¿Qué se supone que le vas a dar en recompensa? -sube y baja las cejas.
-No lo se ¿Unas flores crees que le gusten? – ella suelta una carcajada.
- No eres una niña puberta, busca una playera o algo así, algo que le llame la atención a un hombre de verdad –
- ¿Cuál es tu definición de hombre de verdad, si no puedes mantener a uno a tu lado? – Frank entra en la habitación mientras me entrega un libro que le pedí; él y Liz siempre se tratan de esta manera, sé que en algún momento Liz no va a soportar y entonces no sé qué sucederá de ambos.
- Algún día te veré callar estas palabras – dice Liz con el ceño fruncido.
- Ya veremos, mientras seguiré riendo – me mira a mi – Cualquier hombre que se sienta seguro de su masculinidad recibirá con gusto cualquier detalle, incluso aquellos que la sociedad a destinado a las mujeres-.
- Entonces necesito un favor, ve a la tienda, y compra un ramo de flores– lo miro con una sonrisa, el ríe mientras niega con la cabeza y se levanta, me estira la mano y yo le entrego un poco de dinero – si falta lo pones tú y cuando llegues yo te lo pago, si sobra puedes quedártelo –
El asiente mientras se marcha dejándome sola con Liz, quien solo mira el suelo.
- ¿Por qué crees que no puedo conseguir pareja? – pregunta.
- No creo que seas fea en lo absoluto, pero en definitiva te falta trabajar en ti y en como tratas a los demás – paso saliva - ¿Te dolió lo que dijo Frank? –
- Claro que me dolió, pero no me puedo quejar si yo también me burlo de el – no veo fallas en su lógica.
- Bueno tal vez es una señal para que ya se dejen de agredir – le sonrió de forma inocente.
- Ni en tus sueños, es una forma de amor apache- rie, yo niego con la cabeza,
Un mensaje llega a mi teléfono y sonrió ante la imagen de un lindo ramo de flores, contesto con un "Son perfectas" y dejo de lado mi teléfono para continuar hablando con Liz.
/*/**/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*
- Solo entrega las malditas flores – Frank me anima, pero no me puedo mover.
- Esta con su madre, no quiero interrumpir- me doy la vuelta, pero él me toma de la cintura y me gira de nuevo.
- Nop, su madre ya se va, solo te acercas y le dices quien eres, le entregas el ramo y le pides disculpas -.
- Y si las rechaza, y si se siente ofendido, tal vez debí escoger algo mas interesante, no lo se un perfume o una sudadera... -
- No dejes que estas inseguridades te dominen y entrégale esto, si no las acepta entonces, estaré yo para recibirlas por él, y si te humilla o intenta hacerlo entonces estaré para partirle la cara -.
Lo miro con una sonrisa y el me da un apretón en el hombro, me ayuda a caminar hacia él. Este chico me mira, entonces siento mis mejillas calentarse, me detengo, pero ya tengo su atención y no me quita la vista de encima, Frank me pone una mano en mi cintura animándome a seguir caminando.
- Am...- me quedo en blanco.
- Soy Frank, y ella es Neftalí, pero supongo que ya la conoces- dice mi amigo.
- Si te soy sincero no la conozco – okey eso me hace reaccionar.
-Soy la chica que bueno...- hago una pausa – la chica que te vomito encima-.
- O cierto – sonríe – Supongo que me darás mi recompensa por manchar mi playera- me mira y mira mis manos mientras sonríe, ahora me siento ridícula, tal vez se está burlando.
- Bueno esto es para ti – extiendo las flores hacia él y las toma.
- Creo que es el regalo más extraño que me han dado – me mira de forma divertida – me gustan,pero prefiero las margaritas y los tulipanes – ríe, y entonces mi vergüenza crece tanto que creo que voy a explotar -Estoy seguro de que a Laila le gustara este regalo- ahora me siento avergonzada y me siento un poco humillada,tomando en cuenta que su madre no está muy lejos y nos mira de forma extraña
- Bueno vámonos princesa – dice Frank, se acerca a mi oído – antes de que este imbécil me haga enojar y quiera golpearlo – asiento un poco decepcionada de que el chico misterio no diga nada, así que solo lo miro, es claro que lo que veo en sus ojos, burla.
Me doy la vuelta un tanto decepcionada.
/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*
Estoy en mi habitación esperando a que Antoni llegue para ver que pasara con mi tratamiento, mientras tanto Liz me cuestiona lo que sucedió hace un momento.
- Creo que le diste pena – dice con cautela.
- Se que le di pena, ¿En qué momento me pareció buena idea darle flores?, soy muy ridícula -me cubro la cara con las manos.
- Bueno al menos tu conciencia esta limpia con el echo de que diste todo para arreglarlo, además Antoni le pago la playera-.
- Y ¿Por qué no me dijiste? – pregunto alterada.
- Cálmate me lo dijo hasta hace ¿Qué media hora? –
- De haber sabido no le volvía a hablar en la vida-
- Lo que paso ya paso, cálmate y supéralo- me mira.
Mi querido hermano entra en la habitación, me mira y sonríe, se acerca y me abraza con cuidado.
- El doctor me acaba de dar tu tratamiento, ya sabemos que va a pasar y como saldremos de aquí-
ESTÁS LEYENDO
Nothing is simple
Teen Fiction-Estoy muy jodida, no quiero que estés aquí porque cuando yo me valla no estarás preparado para dejarme ir- -Cariño estamos igual de jodidos- tomó mis manos y miro mis ojos-y me encantaría hacerte feliz durante todo este tiempo-