Symbrock-WET DREAM- (ESP) (en limpieza)

pt.2

Al pensar en que Venom le "ayudaba", Eddie no pudo reprimir un gemido, la excitación le atravesó. Se preguntó vagamente si debería sentirse raro por esto. Pero entonces Venom tomó el control de sus brazos, y sintió su lengua contra su cuello, los zarcillos se deslizaron a lo largo de su torso bajando por su cuerpo y dejó escapar un gemido ahogado.

-No es raro-, dijo Venom. -Se siente bien, para ti y para mí también-. -A mí me gusta.- Con estas palabras Eddie sintió que su mano llegaba a sus boxers, Venom sabía lo que tenía que hacer, estaba dentro de su mente. Lo sabía.

Y Eddie sabía lo de Venom. Sabía que ambos habían disfrutado de ese beso; el beso del que Anne había formado parte. Pero ninguno de ellos lo disfrutó por ella. Estaban completamente concentrados el uno en el otro.

El otro brazo de Eddie apartó la manta, mientras la cabeza de Venom se acercaba lentamente al campo de visión de Eddie. -Podemos intentarlo de nuevo- -murmuró Venom y, de alguna manera, sonrió aún más de lo habitual.

-"Sí, por favor"-, gimió Eddie. Era extraño, era muy consciente de que no estaba besando a un ser humano, pero Venom era mucho mejor. Sabía cómo trabajar su lengua y realmente podía hacer varias cosas.

La mano de Eddie bombeaba su miembro, un ritmo lento, dolorosamente lento y Eddie necesitaba más, necesitaba más.

-Está impaciente.-

-"No me digas"-, presionó Eddie. Un segundo después, sintió esos zarcillos en su pecho, empezando a acariciar sus pezones. Uno, luego el otro, mientras algunos se unían a la mano de Eddie en sus regiones inferiores. Dejó escapar un sonido asqueroso y echó la cabeza hacia atrás en la almohada, apretando los ojos cerrados.

-Te gusta-. Venom sonó demasiado engreído para alguien que sabía exactamente lo que le gustaba a Eddie de todos modos.

-"Por supuesto que sí, parásito inútil".-

Incluso cuando las palabras salieron de su boca, Eddie se arrepintió de haberlas dicho. Su mano y los zarcillos de Venom abandonaron su miembro , Venom se materializó encima de él, presionándolo contra el colchón, manteniéndolo en su sitio sin poder ir a ningún sitio.

-No soy un parásito- Venom gruñó. Sí, ésa era la palabra correcta; sus palabras se dirigieron directamente a el miembro de Eddie, que estaba trágicamente desatendido.

-"Lo siento"-, jadeó Eddie.