Dream or Nightmare

Inesperado

Jiang Cheng y su padre estaban a punto de partir a Yunmeng, solo debía esperar que terminara su reunión con el consejo Lan y ambos podrían regresar a casa. Sin embargo la espera lo estaba aburriendo, por lo que comenzó a deambular por los recesos de las nubes hasta que distraídamente tropezó con el primer jade. El impacto lo envió al piso y un muy preocupado Zewu-Jun lo ayudó a ponerse de pie.

-Discúlpame A-Cheng no debí quedarme parado en medio del camino- pronunció el Lan mientras sostenía la mano del joven- ¿Te lastimaste?

-No, no te preocupes, fue mi culpa venía distraído.- respondió retirándose lentamente del agarre de su amigo.

-Me alegro y también agradezco poder verte antes de que regreses a Yunmeng.- declaró luciendo una sonrisa más brillante.

-Sí, aunque regresaremos cuando te nombren líder del clan. Así que nos vemos en unas semanas y despídeme de tu hermano.

Jiang Cheng hizo una pequeña reverencia ignorando el inusual silencio de Xichen y antes de poder ir a buscar a su padre, la mano del Lan detuvo su avance.

-Necesito hablar contigo A-Cheng- murmuró algo inseguro- ¿Podemos ir a un lugar más privado?

Wanyin amablemente accedió y terminaron caminando a una zona alejada de miradas curiosas. No era un lugar que frecuentaran los discípulos y eso les dio la privacidad necesaria para que el primer jade hablara.

-¿Ocurre algo?- cuestionó Jiang Cheng viendo la mirada nerviosa del Lan.

-A-Cheng- murmuró con una cálida sonrisa mientras tomaba sus manos- Todos estos años he mirado en silencio la gran persona en la que te has convertido, el hombre fuerte y de personalidad amable, el gran cultivador disciplinado que eres y la hermosa persona en la que has florecido. Cada que veo tú sonrisa y calma, llena mi corazón. Tú eres a la única persona para mí, no hay nadie más. Te amo y deseo que me des la oportunidad de estar junto a ti.

Jiang Cheng escuchó su confesión en completo silencio, estaba sumamente sorprendido, no tenía idea de cómo había llegado a esto y tímidamente alejó sus manos de Xichen.

-Yo...eh..- no tenía idea de cómo explicarse, no quería ser cruel o dar falsas esperanzas al jade, por lo que apelando a la honestidad continuó.- Yo te aprecio Xichen, pero nunca te he visto como algo más. Eres un gran amigo y agradezco tus sentimientos, sin embargo no puedo corresponderlos. No como tú quieres.

La cara de Xichen todavía mostraba una sonrisa, pero ésta le parecía cada vez más distinta a Wanyin. Aunque realmente dejó de reparar en ella debido a las personas a lo lejos.

-Jiang Cheng....Jiang Cheng...-escuchó como lo llamaban sin elevar la voz, debían ser los discípulos que lo buscaban para partir, así que dirigiendo una ligera sonrisa al Lan se despidió.

Los días en su hogar continuaron en completa paz, A-Cheng trató de olvidar la declaración del Lan y se dijo a si mismo que lo trataría con normalidad la próxima vez que se vieran. Después de todo ambos eran amigos y algún día serian líderes de sus respectivas sectas.

Por lo que siguió sus deberes en Yunmeng hasta que un día el desmayo repentino de su madre lo hizo correr a sus habitaciones para verla. Su padre ya se encontraba ahí hablando con el sanador, al entrar los ojos de las tres personas se posaron en él y animadamente le dieron la noticia.

-Tendrás un nuevo hermano o hermana.

A-Cheng estuvo completamente sorprendido, un nuevo miembro de la familia Jiang era una gran noticia y pronto toda la secta, su hermana e incluso el mundo de cultivación supo sobre el hecho.