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El día siguiente, viernes. Sehun tenía todos los músculos entumecidos, sus ojeras más notorias y la piel más pálida de lo normal.

No había podido dormir en casi toda la noche, solo una hora y media ya que su padre llegó ebrio y comenzó a gritarle a él, a su madre y claro, también comenzó a romper cosas.

Así que, básicamente hasta que no terminó de golpearlo no durmió. Por lo que ese día él no deseaba ir a clases, se sentía bastante mal y avergonzado a pesar de que el maquillaje podría cubrir un poco aquello.

Así que ahí se encontraba, frente a la puerta con su mochila en hombro pensando dos veces en sí entrar o darse vuelta atrás e irse de ahí con un justificante.

—Buenos días— Jongin le toca el hombro haciendo que el mayor diese un salto de la impresión—. Sehun, ¿sucede algo?— la mirada preocupada de su mejor amigo le hace volver a la realidad.

Se había asustado con aquel gesto, pensando en que llegaría otro golpe, él ya estaba cansado de todo eso.

—Para nada Innie— le sonríe Sehun, sus pómulos le duelen—, vamos, entremos.

—Pero Hun...— Jongin no pudo decirle algo más pues el mayor ya se encontraba adentro reteniendo la respiración.

Su corazón comenzó a latir demasiado rápido al notar la mirada del profesor sobre él. La sorpresa en sus ojos le hacían sentir pequeño, al parecer el maquillaje no cubría todo como él pensaba.

Con pasos largos llegó a su asiento intentando mantener ocupado su mente y evitar todas aquellas miradas.

Jongin no le habló ya que entendía el comportamiento de su mejor amigo por lo cual decidió darle su espacio.

—Hoy haremos algo diferente— el profesor Park se paseaba por toda el aula dando indicaciones y puntos de vista al grupo—, quiero que se entregue un informe la siguiente clase.

Chanyeol le había puesto a leer un poema a Sehun para que comprenda la lectura y escribiese una redacción sobre el cual le llame la atención.

El profesor dirigía su vista a su estudiante Oh Sehun, no podía apartar sus ojos de ese chico y eso lo tenía confuso pues jamás había sentido una atracción tan fuerte por alguien así.

Y eso podría ser un problema muy grande para él. Pero su sistema le pedía romper todas las reglas, el uso de razón no aplicaba cuando su mente solo mantenía la imagen de ese chico sonriente.

—Aquí está profesor— pero aquel chico frente a él no era el de hace unos días, no había visto su sonrisa en todo el día.

Ese día gris. Ese día estresante. Chanyeol tenía la necesidad de calmar su estrés y ansiedad con aquella sonrisa de corazón con lindos hoyuelos. Pero al parecer ese día sería diferente.

—Toma asiento. Te llamaré cuando termine de revisar— el chico asiente para seguir las indicaciones de Sehun.

En otras circunstancias él estaría complacido de ver aquella actitud sumisa y de obediencia, sin embargo el chico frente a él no es mismo de hace unos días.

Toma un suspiro para calificar aquel trabajo con una pequeña sonrisa. Al parecer, aún estando de esa manera puede entender perfectamente aquel problema.

Sehun estaba cumpliendo con enseñarle otras materias, pero enfocándose más en la Literatura.

—Oh— le llama Chanyeol extendiendo aquella libreta mirando las hojas en su escritorio acomodando sus anteojos.

Cuando llegó por su libreta una sonrisa de satisfacción llenó su rostro, Chanyeol apreció aquello en silencio intentando no ser tan obvio frente a los demás estudiantes que se mantenían ocupados.

—Gracias profesor Park— Sehun apretó su libreta en su pecho.

—Es tu esfuerzo el que debes agradecer— expresó seriamente poniendo sus manos sobre su mentón aburrido—. Por cierto, esta tarde vendrás a mi casa por los extras, ¿no?— Sehun abrió los ojos sorprendido.

Sin embargo asintió rápidamente.

No podría soportar estar en su casa un día más, no cuando su padre se encontraba... Bastante sensible esos días, por lo cual prefiere evitarlo.

—Claro— afirmó mordiendo sus labios, sin saber lo que causaba en su profesor.

—De acuerdo, nos veremos en la salida— Sehun asintió para ir a su lugar esperando nuevas órdenes.

Unas horas después se habían acabado los cursos. Todos los estudiantes se fueron rápidamente a sus hogares pues ya es bastante tarde. Jongin se despidió de Sehun quien le sonrió en respuesta.

Sehun tomó su mochila para salir del salón y esperar a que su profesor saliera de ésta. Unos minutos después Park Chanyeol salió con su portafolio en manos haciéndole una señal al menor para le siguiera.

—¿Estás seguro que quieres tomar los cursos extras?— preguntó dudoso Chanyeol con las llaves en mano, frente al auto.

—Estoy seguro— aquella respuesta fue suficiente para Chanyeol abriendo la puerta del asiento del copiloto para que Sehun entrase.

Sería un interesante fin de semana.





 『𝐂𝐋𝐀𝐒𝐄𝐒 𝐂𝐎𝐍 𝐄𝐋 𝐏𝐑𝐎𝐅𝐄𝐒𝐎𝐑 𝐏𝐀𝐑𝐊』𝐂𝐇𝐀𝐍𝐇𝐔𝐍 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora