『𝐂𝐋𝐀𝐒𝐄𝐒 𝐂𝐎𝐍 𝐄𝐋 𝐏𝐑𝐎𝐅𝐄𝐒𝐎𝐑 𝐏𝐀𝐑𝐊』𝐂𝐇𝐀𝐍𝐇𝐔𝐍

₉

Sehun bajó del auto y miró por última vez a su profesor para despedirse.

—¿P-puedo ir mañana a clases?— preguntó mientras miraba sus dedos.

—Puedes ir a mi casa a tomar las clases privadas— le respondió mientras se muerde sus labios—. Hasta mañana,  Sehun.

—Hasta mañana, Chanyeol— un rubor recorre sus mejillas.

Chanyeol se despidió con la mano y aceleró el automóvil. Sehun se quedó por unos minutos observando aquello sin poder creer en lo que pueda estaba pasando.

Sehun finalmente se dio la vuelta y caminó hasta la puerta de su casa, apenas iba a abrir la puerta cuando escucha cosas romperse.

Cuando abre se encuentra con la jarra rota y a su padre furioso, su madre también estaba molesta. Al parecer nadie se daba cuenta de su presencia, ni siquiera cuando cerró la puerta.

—Ya es suficiente. Me iré de este maldito lugar— habló furiosa su madre mientras camina escaleras arriba.

Su padre lo observa sin sentimiento alguna hasta que desaparece, escucha un suspiro de parte de él y es cuando voltea para darse cuando de Sehun.

— ¿Cuánto tiempo llevas ahí?— Sehun abrió su mochila y sacó la hoja con nudo en la garganta.

—Puedes quedarte con eso, yo me voy— lágrimas comenzaron a salir y subió corriendo.

Sabía que su familia no es la familia perfecta que todos piensan, solo por mostrar sonrisas falsas, comportamientos adecuados no significa nada.

Sehun cerró la puerta y sacó su mochila, metió ropa y productos higiénicos, zapatos y todos sus ahorros. Miró la ventana, sabía que tirarse de ahí sería suicidio y cobardía.

Mordió sus labios mientras mete su celular en su pantalón y abre la puerta tomando su mochila con sus aparatos electrónicos. Baja las escaleras ante la atenta mirada de su padre quien seguía discutiendo con su madre.

—¿A dónde crees que vas?— su padre lo toma del brazo con fuerza—. Tú estás a nuestro cuidado— Sehun negó.

—No. Yo ya soy mayor de edad; solo estaba esperando esto. Su última estupidez para irme de aquí— sintió una mano en su mejilla y como caía al suelo.

—Respeta, no seas un altanero— su padre rugió.

—Él tiene razón, puede hacer lo que quiera— su madre se inclinó para ayudarlo a levantarse—. Vente a vivir conmigo, hay un lindo departamento que...

—No madre, quiero ser independiente. No quiero estar en más problemas con ustedes— suelta un suspiro—. Solo me quedé más tiempo con ustedes, por que pensé que nos necesitábamos— sonrió irónico—, pero al parecer solo necesitábamos estar lejos.

—Sehun— su padre le mira—. Sólo estudia bien— miró a otro lado y asintió.

—Está bien— se inclinó un poco y abrió la puerta.

—El auto es tuyo, puedes llevártelo— Sehun negó—. Cuando te compres uno, puedes regresarlo o venderlo. Es tu regalo de cumpleaños— su madre le dio las llaves.

Sehun suspiró y las tomó. Los miró una última vez y se fue de ahí.

La primera persona que lo ayudaría a buscar un lugar donde quedarse es Jongin.

—Lo siento Hun, me voy a de vacaciones a la playa— contestó al otro lado del teléfono—. Pero puedes quedarte en casa, a mamá no le molestará.

—No te preocupes, estaré en un hotel mientras busco un departamento— lo tranquilizó mientras se estaciona en una gasolinera.

—Bueno, sí cambias de opinión, mi casa es tu casa— Sehun agradeció y colgó.

Pagó por la gasolina. Se recargo en el auto mientras pensaba en dónde ir, seguro que los hoteles deben estar caros por ser vacaciones de verano.

Mordió sus labios mientras cierra sus ojos. Pensando, pensando...

—¿Sehun?— un escalofrío le recorre y abre los ojos sorprendidos.

—¿Profesor Park?— ambos se miraron curiosos.

—Te dejé en tu casa. ¿Qué haces aquí?— Chanyeol se cruzó de brazos.

—Ah... Ya no vivo con mis padres...

Ambos se quedaron en silencio.

Chanyeol suspiró.

—A mi casa. Ahora.