LOS HIJOS DE LA LUZ Y OSCURIDAD

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A mitad del camino a su destino, myoga conto de principio a fin sobre la existencia de los fénix, igual que otras aventuras y peligros que sus padres tuvieron que enfrentar, mientras volaban y veían el hermoso paisaje del bosque

Myoga: después de que el príncipe akemi naciera, sus padres nunca más vieron a la señorita kikyo... aunque ella siempre se ha contactado pero ahora...

Towa: dejo de comunicarse

Myoga: si – tono triste – nadie sabe la razón, pero quiero suponer que mi señor akira tuvo que razonar con ella, de lo contrario podría arriesgar mas la aldea a un nuevo peligro

Moroha: no sabia que la hermana de kaede-sama fuera el primer amor de mi padre

Hisui: volvió a ver a la señorita kikyo?

Myoga: no, desde que akemi nació yo también deje de tener contacto y mas con mis señores fénix

Setsuna:... - silencio

Towa: el paisaje se ve hermoso – mirando la belleza de la naturaleza

Myoga: eso es lo bello de este bosque, solo las bestias sagradas pueden entrar y humanos de corazón puro, aunque claro el bosque ya no permite que los humanos entren

Setsuna: ¿Por qué?

Myoga: hubo un tiempo en que el emperador quiso destruirlo para obtener "tesoros" de los cuales jamás se encontró o jamás existieron, el bosque siempre ha sido victima de muchos ataques del hombre por esa razón corto lazos y no permite entrar a nadie

Towa: eso explica porque en algunos lugares el bosque sigue intacto

Setsuna: ¿es ahí? – señalo el lugar 

Myoga: ah que nostalgia volver a este lugar – luego mira a los chicos - ¡aterricemos!

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Myoga: ah que nostalgia volver a este lugar – luego mira a los chicos - ¡aterricemos!

Al aterrizar, todos caminaron con total naturalidad y ven a los aldeanos sonriendo, riendo de alegría, los niños jugando, entre otras cosas, una actividad de lo más normal pero solo uno de ellos se da cuenta de los nuevos visitantes y se acerca a ellos pero los chicos estaban asombrados por la estructura de la ciudad

Towa: ¿esto es ciudad de hierro? – sombrada

Moroha: increíble, porque jamás conocí esta ciudad desde un principio

Hisui: kirara parece contenta – viendo a la gatita casi correr por donde quiera – supongo que esta emocionada por conocer a la señorita kikyo nuevamente

Aldeano: disculpe – los chicos voltean – bienvenidos a ciudad de hierro ¿podemos ayudarlos con algo? – tono amable

Towa: etto... estamos buscando a una mujer llamada kikyo – hablo un poco nerviosa

Aldeano: ¿kikyo? Me temo que no conocemos a una mujer con ese nombre

Hisui: que mal – murmuro decepcionado

HANYO NO YASHAHIME Y LOS HIJOS DEL EQUINOCCIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora