𝑭𝒊𝒍𝒐𝒇𝒐𝒃𝒊𝒂 [𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂𝒗𝒆𝒓𝒔𝒆 - 🇺🇸 𝒙 🇵🇪]

Parte 1

Tengo un problema, bueno la verdad tengo muchos problemas, pero... que puedo hacer ¿Solucionarlos? JA si pudiera ya los habría esfumado de mi vida —Mañana vendré a las 7, descansa.

—¿Mamá? ¿A que hora vendrás el sábado?

—No lo sé, mi bebé, pero haré lo posible para estar en tu cumpleaños —besé la frente de mi niña, mi fuente de vida, mi única luz en la oscuridad. Aunque ella no haya sido planeada no me importó... la tuve a pesar que su padre nunca la quiso, fue lo mejor decisión, en este mundo cruel y despiadado solo somos yo... y mi dulce Suyay.

[...] 

—Llegas tarde.

—Lo siento, el trafico estuvo terrible, jefe.

—Que no se repita, toma, lleva esto a la mesa 2 y esto a la 3 —gracias a que no tenía una fuente de ingresos estable, trabajaba en distintos lugares, soy muy despistado y mis horarios se mezclan de vez en cuando, pero no me quejo... Solo son consecuencias a no saber elegir una buena pareja, sino, mi pequeña gozaría de lujos, cosa que se merece.

—Ten cuidado, Perú.

—Lo lamento —este estúpido traje no me deja caminar bien, lo detesto —Aquí tienen lo que ordenaron, disfruten ¿Necesitan algo m... CON PERMISO —mierda, justo hoy tenía que ser él.

—¡E-Espera! ¡Perú!

—Hey, hey ¿Qué tienes con mi empleado? —Dios bendito te lo agradezco, menos mal que mi jefe es buena gente... A quien engaño, seguro me va interrogar más tarde.

—Es mi omega.

—... Retírese, por favor.

—¡Es mi destinado! ¡Es mi omega! —vete al carajo, hijo de perra, ahora sí soy tu omega... —Solo quiero hablar con él, solo unos minutos.

—Perú —No, no, no —Habla con este tipo y vuelve al trabajo —dijo mi jefe para después irse, dándonos "privacidad".

—... Maldita sea, China ¿Qué quieres?

—Quiero hablar... por favor, solo eso —este idiota, es y siempre será una maldita mierda pegada a mi zapato. ¿Hablar conmigo, después de lo que me hizo? Es una broma.

—So-Solo vete-¡Mhn~! —sentí sus labios sobre los míos y sus manos rodear mi cintura mientras me apegaba a él, así que lo separé de un puñetazo y cómo disfruté de ese golpe, fue tan~ satisfactorio —¡Aléjate de mí! Maldito come perros.

—... —se tocó su mejilla perplejo ¿Qué? ¿Acaso no se esperaba ese golpe de mi parte? Vaya idiota con el que me metí, que puedo decir, era joven y tonto, se aprovechó de mí.

—¿Te puedes ir? —le dije señalando la entrada del bar, y solo se me quedó mirando aún sin quitar su cara de malnacido.

—No, no me iré... Te estuve buscando por mucho tiempo y al fin te encuentro, Perú vuelve conmigo, fue un estúpido al dejarte abandonado pero no vo-

—¿Volverá a pasar? Eso ibas a decir —lo interrumpí antes de que siga hablando —China, lo nuestro se acabó hace tiempo... abusaste de qué era joven y débil, tú eres mayor que yo por 20 años, piensa bien —estaba dispuesto a seguir con mis labores, y creo que era claro lo que daba a entender, pero a este tipo no entraba en su cabeza la palabra no. Agarró fuertemente mi muñeca impidiendo que avanzará —Suéltame, te pido que me sueltes China, tienes pa-pareja y no me lo niegues, eres una figura publica y no creo que quieres que la gente se entere de tu infidelidad, te lo pongo de otra manera, si descubren que estuviste con un omega de baja categoría te podrían arruinar.

—No me importa eso,... y-yo te amo.

—No me amas, te gusta dominarme, te gusta tener el dominio en un ser débil.

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