Capítulo 17

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Capítulo 17 ||

"Míralo allí". Theo, que estaba cortando los huevos con tanto vigor, amenazaba con cortar su plato.

Harry no necesitaba que su amigo le diera un nombre para saber a quién se refería. Los cuatro amigos de Slytherin estaban sentados al final de la mesa de su casa para desayunar.

"¿Malfoy?" Adivinó Tracey, sentándose frente a Theodore.

"Sí", respondió, levantando la vista de su plato de huevos y tocino.

"No, gracias", dijo Daphne, cortando algunas salchichas para el desayuno, "trato de no hacerlo cuando como".

Harry sonrió, "¿no quieres perder el apetito?"

Ella levantó la vista de su plato y le devolvió la sonrisa, "Así es".

"Pensé que no podía ser más insoportable", Theodore frunció el ceño.

Harry tuvo que estar de acuerdo con su amigo. Habían pasado dos semanas desde que Draco había sido nombrado buscador de casa. Un puesto que ganó no por talento ni por mérito, fue su padre, quien hizo una generosa donación al equipo de la casa de Quidditch en forma de nuevas escobas, Nimbus 2001s. Son las mejores escobas del mercado, o lo serán, cuando se lancen para las vacaciones de Navidad.

"Estoy en el punto en que no creo que pueda apoyar a nuestro propio equipo", dijo Tracey con tristeza, antes de tomar un sorbo de su taza.

Daphne se animó con esto. "¿Eso significa que no tenemos que ir a los juegos este año?"

Harry y Theodore intercambiaron sonrisas ante esto, que se convirtió en risas ante la expresión abatida de Tracey ante la idea de no poder ver Quidditch este trimestre.

"No es justo", hizo un puchero Tracey, "Él nunca debería haber sido un buscador".

"Parece que estás en minoría en eso, Trace."

Harry miró hacia la mesa para ver que Daphne tenía razón. Draco estaba rodeado no solo por el equipo de Quidditch, sino por la mayoría de los Slytherins superiores en lo que Harry solo podía decir que eran los de quinto y sexto año. Todos parecían estar pendientes de cada una de sus palabras. Draco parecía disfrutar cada momento.

Fue patético. Fue suficiente para enfermar a Harry. Tenía que admitir amargamente que Malfoy había recorrido un largo camino en un corto período de tiempo. Dado que, en los días previos a que lo nombraran Buscador de Casas, todavía se lo llamaba el Slytherin Sucio en toda su casa y Hogwarts. Su padre pudo recomprar el favor y la credibilidad que Draco creía que merecía ser el Vástago de la familia Malfoy. Harry y los demás habían sido superados en la política del pozo de las serpientes. Era hora de que respondieran, sabiendo que Malfoy seguía siendo su principal objetivo y oponente.

Harry no era el único que había llegado a una conclusión similar.

"Creo que Malfoy necesita ser devuelto a la tierra", comentó Theodore.

"¿Oh?" Preguntó Daphne con un brillo travieso en sus ojos azules.

"Sí", respondió, volviendo su atención a terminar los huevos restantes en su plato.

Harry se volvió hacia sus compañeros de Slytherin, complacido de saber que parecían estar de acuerdo, al querer hacer que Draco volviera a bajar un par de veces. Entendieron que para construir sus cimientos, harían bien en fracturar el de Malfoy. La única pregunta que quedaba era cómo hacerlo.

"¿No serán lo suficientemente humillantes nuestros partidos de Quidditch?" Preguntó Tracey, malhumorada, levantando la cabeza con el brazo izquierdo, mientras usaba la mano derecha para jugar con los trozos restantes de gofres con el tenedor.

Un encuentro casualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora