🍭 Capítulo 24 🍭

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La joven pareja de omega y alfa dormían cómodamente en su cama matrimonial

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La joven pareja de omega y alfa dormían cómodamente en su cama matrimonial. Los nueve meses de embarazo para el Omega fueron lindos, llenos de mimos, caprichos, dulces, besitos y muchas gomitas.

Si hubo dolor, sin embargo, no le quitaba que YoonGi mimara con cada dolor a su bonito Omega. Los antojos se le hacían normales, YoonGi se iba y venía tranquilo.

El cabello de TaeHyung había crecido más, sus pechos crecieron, se veían bonitos al parecer de YoonGi. Y su actitud era más amable y simpático.

TaeHyung se movió incómodo, sintiendo mojadas las sábanas, se levantó para alzar la sábana.

— ¡YoonGi!— el alfa, se levantó aún con restos de saliva en su comisura de sus labios, el ambiente se puso incómodo YoonGi no entendía el grito de TaeHyung.

— ¡Alfa tonto, llévame al hospital tus hijos vienen en camino!— Dijo TaeHyung tratando de pararse y sintiendo golpes en su vientre, dolores de piernas y vientre.

El alfa cargo de manera nupcial a su Omega, con el maletín de Pocoyo con las cosas necesarias. El camino fue lleno de angustia y preocupación, TaeHyung gritaba del dolor, sus ojitos se llenaron de lágrimas.

Y YoonGi aceleraba todo lo que podía para que su Omega no sufriera más.

La llegada al hospital no fue menos caótica, las enfermeras casi lo tiran del establecimiento, por las fachas de vagabundo.

TaeHyung fue llevada a la sala de partos, mientras YoonGi se ponía la bata para poder ver a sus cachorritos nacer. El hospital olía a duraznos, eso quitaba los aromas de pastillas y angustia en el aire.

TaeHyung se mantenía en aquella camilla acolchonada con una fina capa de sudor sobre su rostro, sus mejillas sonrosadas por el esfuerzo y sus piernas abiertas. El cuerpo del Omega tenía espasmos, y dolores.

Los minutos pasaban, gritos, susurros, sudor y cansancio. De repente un graznido de bebé se escuchó en la sala, los médicos sacaron al bebé, antes de llevarle dónde su padre omega a darle un pequeño retoque, mientras las enfermeras sacaban al otro bebé.

— Felicidades señoras Kim, es una niña — Dijo el doctor Choi.

— Y un bello niño — Finalizo Somi. TaeHyung suspiro tranquilo, YoonGi sintió llorar al ver una bonita bebé niña, en los brazos de TaeHyung.

El Omega soltó feromonas maternales naturales, TaeHyung tomo a sus hijos en sus brazos, con una sonrisa beso sus cachetitos rellenitos.

— ¡Mira YoonGi no son tan feos mis cachorritos!— Grito feliz TaeHyung y YoonGi soltó a llorar, preocupando a su omega.

— Son hermosos, TaeHyung te amo — El alfa beso eufóricamente a su Omega, los cachorritos los miraban con una sonrisita sin dientecitos.

— ¿Cómo se llamarán, Yoon?— Pregunta TaeHyung, curioso. Él ya tenía el nombre para el bebé varoncito.

— La niña se llamará Sana.

— Y el pequeño SeongHwa — La pareja se sonrió, besando a sus bebés para que los estabilizarán y revisando si todo estaba en orden.

YoonGi quitaba el sudor de la cara de TaeHyung con una toallita húmeda con aroma dulce. Un golpeteo en la puerta los sacó de su burbuja de amor, abriendo la puerta de la habitación de hospital estaban sus amigos.

— ¡Hola padres!— Grito YeonJun abalanzándose a su hermano dándoles felicidades por ser ahora padre.

— Amor, no hagas ruido asustaras a TaeHyung — Reprocho su omega SooBin yendo dónde TaeHyung para dejarle una caja de chocolates y un abrazo por haber traído al mundo nuevas vidas.

— Me alegra que hayan salido sanos y salvos esos cachorritos, Min — Hablo Jin ayudando a TaeHyung a comer algo de lo que le dieron en el hospital y recuperar fuerzas antes de dar de lactar a los bebés.

— ¿Cómo se llaman los retoños, Yoon?— pregunto NamJoon con curiosidad, jugueteando con Yeonbin, mientras sus padres ayudaban a Jin.

— La mayor es Min Sana y el menor es Min SeongHwa.

TaeHyung asintió en espera de sus cachorritos.

La enfermera llegó con la niña envuelta en una cobijita rosa de gatitos y el niño en una cobijita salmón con ositos. La enfermera dejo a los bebés en el regazo de su madre quien con amor los recibió besando sus bonitos rostros pálidos.

TaeHyung saldría del hospital, en dos días, debía estabilizarse y amamantar a los cachorros antes de su partida a casa.

La felicidad inundó su corazón. Sus bebés tomaban de su seno con tranquilidad, no eran un estorbo como otros padres le habían dicho.

Sus ojitos eran muy bonitos, y sus facciones adorables. ¡Era como tener a dos ositos en su regazo, amamantando!

El ambiente olía a sandía y dulces, junto al aroma de YoonGi creando un pequeño nido en la cama del hospital, donde los demás pacientes sentían la felicidad abarcar aquel cuarto. Somi estaba feliz.

Una familia más satisfecha, amaba su trabajo sin duda. La cara de los padres era demasiado tierna cuando veían a sus retoños en brazos. Ese hospital trataba de poner mayor comodidad a las familias y sobre todo los omegas.

YoonGi dejo a los bebés en la cuna tomando a su Omega para que durmiera algo. Él cuidaría de los pequeños Kim mientras su papi TaeHyung descansaba.

Y basto dos minutos para escuchar los suspiros de TaeHyung .El alfa sonrió, la espera valió la pena, Sana dormía plácidamente y SeongHwa solo le sonreía, formando un piquito en sus labios, viéndose chiquito y adorable.

YoonGi sonrió enamorado de sus hijitos.

— Bienvenidos cachorritos, a la familia Min— Seguido beso con demasiado cariño y cuidado sus frentecitas desnudas.

— Bienvenidos cachorritos, a la familia Min— Seguido beso con demasiado cariño y cuidado sus frentecitas desnudas

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Autismo ✧ YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora