Y... Esto es lo que somos

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- Y recuerda que tienes que regresar temprano, hoy es la cena con la familia Choi- Dijo mi madre sin apartar la mirada de su teléfono ni un segundo

- Claro madre... Regresaré a tiempo... - Respondí con la mejor sonrisa que podía mostrar

- Si todo sale según lo planeado te comprometeras con el hijo de la familia Choi, es un gran partido para ti- Agregó mi padre leyendo las noticias en su laptop

- Si, haré lo mejor que pueda, padre- Dije

Despues de eso hice una reverencia a mis padres y salí de la casa. El camino a la escuela nunca había sido algo divertido, pero eran los quince minutos más tranquilos de mi día, no había reclamos, no había exigencias, simplemente me ponía mis audifonos y la música hacía mi cuerpo fluir, me hacía sentir libre, si, la música siempre fue mi escape interno a mis problemas y conflictos personales.

Al llegar a la escuela pasó lo mismo de cada día, como la chica popular, tenía que saludar a todo el mundo, sonreir y saludar, cual princesa, una estupida princesa de plástico que no puede desobedecer jamás a las ordenes que se le imparten... Vaya mierda

- Lea, ¿ya viste esto?- Dijo una de mis amigas mientras me mostraba su teléfono, había un articulo de  Ji-hu Choi, mi "futuro prometido"

El articulo hablaba de como el joven heredero de la familia Choi era uno de los solteros más codiciados del mundo hoy en día, sin embargo podría comprometerse muy ponto con la heredera de la gran y poderosa familia Edevane, Lea Edevane, yo.

- No puedo creer lo rápido que se esparcen este tipo de noticias- Dije mientras me sentaba en mi pupitre

- Bueno, eres afortunada, es un completo dios... Pero que podía esperar de nuestra diosa, eres perfecta Lea- Respondió ella con una mueca

Todo el mundo me consideraba una diosa, era buena en la escuela, primer lugar siempre en todas las clases, era buena en los deportes, y además, era hermosa, o eso decía todo el mundo, el tonto y vacío prototipo de chica perfecta. Lo odiaba internamente, pero al ser heredera de una de las familias más poderosas del mundo, no podía hacer lo que quería, arruinaría la reputación de mi familia, desonraría el apellido Edevane y haría molestar a mis padres, a los cuales solo les importa su estupido prestigio.

- Me sobreestimas Adi, no soy una diosa- Respondí con una sonrisa un poco demasiado forzada- Además, él no me gusta tanto, quiero que alguien me enamore de verdad, quiero sentir amor, no casarme por conveniencia

- Sea lo que sea Lea, eres perfecta, todo el mundo te admira- Contestó ella

Justo en ese momento entró la profesora de literatura, pero esta vez, diferente a los demás días, un chico la acompañaba, un chico moreno, alto y fornido, de cabello oscuro, y unos penetrantes ojos verdes, cual esmeralda

- Chicos, quiero que conozcan al nuevo estudiante, es de México, y consiguió una beca completa en nuestra prestigiosa escuela... Presentate por favor- Le dijo al chico

- Hola, me llamo Álvaro Cedeño, vengo de México, y espero poder ser su amigo...- Dijo el chico con un semblante que me pareció un poco triste, pese a eso, el chico resultó ser atractivo

Recien dijo eso, comencé a escuchar a mis compañeros murmrar, de manera despectiva, estaba claro que lo iban a marginar solo por no ser del mismo país que nosotros, como hacían con cada persona diferente que se cruzaban, eso me molestó siempre, así que me levanté de mi asiento y me dirigí al chico nuevo

- Hola Álvaro, mi nombre es Lea, Lea Edevane, dejame ser la primera en darte la bienvenida a nuestro colegio, espero que te sientas cómodo con nosotros- Le dije mientras le extendia la mano con una sonrisa

Él tomó mi mano, y no miento, cuando me devolvió la sonrisa pude sentir una corriente en mi cuerpo, cómo si me hubiese caido un rayo en ese preciso momento.

Las clases transcurrieron de manera normal, llegada la hora del almuerzo me senté rodeada de gente, eso también era normal, pero al ver que Álvaro se encontraba solo decidí acercarme a conversar con él

- ¿Está ocupado este sitio?- Pregunté

- N-no, sientate- Respondió él, estaba un poco sorprendido por mi repentina aparición, era evidente

- Veo que aún no haces muchos amigos- Dije para tratar de romper el hielo

- No, la verdad es que no soy muy sociable- Respondió

- Si gustas, puedes juntarte conmigo y mis amigos, así no estaras solo-

- Prefiero no hacerlo si no te molesta-

- No hay problema, entiendo- Dije un poco decepcionada

Noté que escuchaba música desde su teléfono, debía admitir que tenía un gusto musical excelente

- ¿Te gusta la música?- Le pregunté

- Si, es algo que me encanta desde que soy un niño- Respondió con una leve sonrisa, la primera sonrisa suya que veía, me pareció adorable

Estaba a punto de decirle algo más, pero Adiana apareció de pronto y me tomó el brazo, parece que había un problema

- ¿Pasa algo Adi?-

- Tu padre quiere que vuelvas ahora mismo a casa, parece que la cena con los Choi ya no es una cena, es un almuerzo- Respondió con una notable preocupación

- ¿¡Qué!?-

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Notita de la autora: ¡Hola!, soy Youngmi, la autora ^///^

Esta historia es mi bebé, decidí publicarla por qué quiero que la gente pueda disfrutar leerla tanto como yo disfruto escribirla

La verdad es que esta historia es 50% realidad 50% ficción, y si, la protagonista está basada en mi de alguna manera, así como los demás personajes estan basados en personas reales de mi vida jsjsjs

Espero disfruten mucho acompañar a Lea en su travesia de autodescubrimiento y libertad

¡Nos vemos en el próximo capítulo!