-¡Jin!- No sé porque sigo haciendo esto. Solo debo de ser una buena amiga además no es como que tenga una oportunidad- Espera. Te dije que ella odia a las personas que son demasiado insistentes. Todo tiene que parecer casual- Lo estoy ayudando para que pueda impresionar a Solar, hemos sido amigas por más de siete años. La conozco muy bien. - Ahora solo ve y dile que no podre ir con ella a casa porque tengo que hacer algo del equipo.
Se que soy la única que tiene estos sentimientos. Ella nunca me va a ver de la manera en que yo la veo a ella. Soy yo la que tiene que entender eso. Jin es un buen tipo, estoy segura que será felíz con el.
Al inicio me sentía como una cobarde por dejar que esto pasará pero después entendí que no hay nada más que pueda hacer. Yongsun me ha dejado claro que no tiene ni tendrá algún otro tipo de interés en mi. Soy yo la que debe de dajar ir este sentimiento, que por más que duela, es lo correcto.
-Lo sé. Debo de sonar casual. Lo tengo - Jin. No puedo enojarme con él y menos con Yongsun. No puedes odiar a alguien sólo porque no te ame. -Gracias por ayudarme- El es mejor que mucho de los que han intentado algo con ella. Sólo espero que la trate como se merece, pero estamos hablando de Jin, sé que lo hara. No dejará que nada malo le pase, es por eso que lo estoy ayudando . -Espero que no me rechace- Odio esta parte. Lo peor que el ecibirá será un "no" y no pasará nada, solo un poco de daño en el ego de Jin pero eso sería todo. En mi lugar aparte de recibir un simple "no", también perderé su amistad y la idea de ser rechazada a otro nivel más personal. Ser rechazada por ser homosexual. Yongsun viene de una familia bastante religiosa.
-Todo va a estar bien, sólo se tú... Eres un buen partido- Me siento una basura pero es como debe ser. Debo dejar que estos sentimientos se vayan. Jin me dio un último "gracias" y se fue.
No me quede para presenciar otra cosas más. Salí tratando de contener mis lágrimas, aún hay muchos chicos en los pasillos.
Así fue como todo empezó. Ellos comenzaron a salir unas semanas después. Fue muy difícil al principio, los dos eran mis amigos, los veía juntos la mayoría del tiempo en la escuela y tenía que fingir que todo estaba bien.
Comencé a estar más tiempo en casa, no quería salir por miedo a verlos juntos, besándose y no saber que hacer o solo comenzar a llorar delante de ellos.Mi papá fue el primero en notarlo, su trabajo hacia que el pasará más tiempo en casa que mamá así que para él era claro que algo estaba mal conmigo y no tuvo que insistir mucho en saber que me pasaba, se lo conté todo.
El como odiaba ser como era, como me gustaba mi mejor amiga y como tenía que soportar mirarla ser felíz con alguien más y saber que nada de eso era su culpa. Había muchas cosas que él no comprendía sobre mi, la importancia de lo que le estaba contándole pero en ese momento sólo le interesaba que yo estuviera bien. Me hizo saber que nada cambiaría que todavía seguía siendo su hija.Después de llorar como cuando era una bebé en su brazos, pidió que lo acompañará a otra ciudad, un nuevo inicio. Tenía una oferta de trabajo importante que había estado ignorado porque pensaba que todos éramos felices y que estábamos bien. Al final se discutió eso y terminamos mudandonos el mes siguiente.
No se lo dije a nadie de la escuela, mucho menos a Jin y solar. Simplemente no podía. Comencé una nueva vida lejos de todos.
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No quiero hacerme esa pregunta de ¿qué hubiera pasado sí....? Solo es más dolor a la herida. Una herida que se supone debe de estar curada.
Tengo 35 años ahora, ya no soy esa misma persona que fui hace tiempo. Tengo una hija. Tengo una vida nueva, una vida que amo vivir que me llena cada dia de sorpresas y emociones. No tengo porque seguir aferrada al pasado.Deje ir esos pensamientos, tome las últimas cosas que estaban en mi lista de compras y salí del supermercado. Al salir me crucé con la misma pareja, parece que el universo quiere que ella siga estando en mi mente.
Llegue a casa y prepare la comida. Era miércoles mi dia libre. Tengo planeado ir por jisoo a su escuela, pasar al parque y regresar para la cena. No he podido pasar mucho tiempo con ella desde que adelantaron las fechas de entrega en mi trabajo. Este tiempo debo de aprovecharlo al máximo.
Termine esperando a mi hija antes de la hora de la salida. Realmente no esperé mucho por ella. La vi salir practicante corriendo, como siempre lo hacía, solo que esta vez no venía sola. Una niña que parecía más pequeña estaba a su lado. Salí antes de que estuvieran demasiado cerca de la calle, ya hable con Jisso de lo peligroso que es hacer algo aso pero parece que aún no lo entiende.
-¡Mami!- salí justo a tiempo para recibir a mi pequeña que sin consideración por su cansada madre saltó a mis brazos.
-Mi bebé.. ¿todo bien en la escuela?- Solo escuche un si y la aleje un poco para que pudiera ver su rostro -Ya te dije muchas veces que no debes de salir corriendo de esa forma... es peligroso y ahora estas enseñándole eso a tu amiga- Enfoque la mirada en la pequeña niña que parecía estar muy nerviosa por mi presencia. -¿No me vas a presentar a tu nueva amiga?- Bajé a Jisoo para que me explicará lo que estaba pasando. Puede que no pase mucho tiempo con ella como quisiera hacerlo pero si sé quienes son sus amigos y esta niña parece ser una nueva amiga.
-Lo lamento. Ya no lo volveré a hacer- Eso espero- Ella es sunnie... Es nueva, llegó aquí hace una semana. Su mamá no pudo venir por ella hoy. Sabía que tú vendrías por mi porque es miércoles y además dijiste... prometiste que lo harías asi que le dije a Miss Sandie que podías llevarla a su casa.- Como no recordar a su madre cuando comienza a hablar así, demasiado rápido. Es algo que ella siempre hacía cuando pensaba que habia hecho algo malo.
-Esta bien.. solo recuerda hacer tus pausas para respirar- No puede evitar reírme al verla soltar todo de golpe.- Muy bien señorita Sun... hoy la llevaré a su casa. Soy Moonbyul.- la pequeña me dio un nota donde estaba anotada su dirección. Era unos 20 minutos de la nuestra.
En el camino las niñas iban hablando. Más bien mi hija le contaba toda su corta vida a su nueva amiga. Solo escucharla me hace sonreír. Es tan perfecta.
Llegamos a su casa.
Bajamos y tome la mano de ambas para cruzar la calle y llegar a tocar el timbre.
De todas las cosas que podría esperar que pasarán justo hoy.
Nunca pensé en que la persona que abriera la puerta, la persona que sería la madre de la nueva amiga de mi hija fuera Yongusn; pero ahi estaba ella con su cabello cubriendo casi la mitad de su rostro, con un delantal sucio y con una apariencia descuidada pero aún con todo eso, mis ojos la seguían viendo como la mujer más hermosa del mundo.