¿Me veré bien? ¿Escogí bien mi ropa? ¿Tengo algo en la cara? ¿Mi cabello está despeinado? ¿Huelo mal? ¿Este color de ropa me queda bien? ¿Debí usar otro color de camisa? ¿Tal vez mis piernas son muy feas? ¿Serán mis brazos? ¿El color de mi cabello es raro? ¿Mis ojos son feos? ¿Me habré equivocado en algo? ¿Porqué todos me miran? ¿PORQUÉ TODOS ME MIRAN?
"Atsushi deja de pensar tantas cosas y trata de respirar adecuadamente" se repetía a sí mismo.
Muchos veían a Atsushi como alguien muy amistoso y nadie creería que tenía tantas inseguridades y problemas para hacer amigos.
No paraba de sobrepensar las cosas y no se sentía digno de existir en el mundo, no sabía cuál era su propósito en el mundo.
Nuevamente no paraba de pensar.
Cierto día Atsushi vio a un chico, parecía de su edad y era pelinegro, también pudo mirar que las puntas de su cabello eran blancas, se veía muy pálido ¿Estará bien?
Por alguna razón empezó a hablar más de lo normal frente a aquel chico, igualmente se avergonzó al darse cuenta.
Akutagawa Ryunosuke, así se llamaba el misterio joven pelinegro.
Ugh, el chico fumaba, la mamá de Atsushi le había enseñado que eso era malo, Akutagawa se estaba haciendo daño, Atsushi quería ayudar.
El destino estaba del lado de Nakajima, vaya sorpresa se llevó al ver a Ryunosuke en frente de la dulcería una vez más.
Jajajaja, Akutagawa trabajaría todas las vacaciones de verano con él, le hacía gracia ver la cara de su compañero al tener que atender a los clientes, pero el sentimiento que más reinaba en Atsushi era la alegría, ahora tenía compañía y no se sentía tan nervioso cuando tenía que atender a los clientes.
No había pasado ni una semana y Akutagawa seguía siendo muy amargado, parecía que a las únicas personas que respetaba era a Dazai y a su hermana.
Aún así para Atsushi estaba siendo divertido conocer más a su compañero, Akutagawa está tan interesante que Atsushi estaba encantado de pasar tiempo con él.
- ¿Akutagawa sabías que el pan sabe a pan? -
- ... - Ryunosuke suspiro ante la pregunta de Atsushi, era la quinta pregunta se ese estilo en el día.
La dulcería era muy agradable, los colores cubrían las paredes pero sin la necesidad de ser toscos, había algunos jarrones con flores esparcidos por la tienda, había varias ventanas alrededor del lugar, contaban con mesas hermosas y simples.
Definitivamente era el lugar favorito de Atsushi, ahora que Akutagawa estaba ahí por alguna razón Atsushi se levantaba más alegre para ir a trabajar.
La sola idea de conseguir un amigo le alegraba, no era bueno haciendo amigos, está sería una oportunidad que no podía desperdiciar.
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Amor azucarado - ssk
RomansaSí, definitivamente un chico amante de los dulces y otro que los odia era una combinación extraña o tal vez no, muy cliché diría yo, tal vez Atsushi es el azúcar que le falta a Ryunosuke y Ryunosuke es lo salado que le falta a Atsushi. ♡︎ La pareja...