Presentaciones

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Hana sin saber qué hacer haría una sonrisa fingida. No sabía socializar. 

Nejiru empujaría un poco a su hija para que esta se acercara a Hana -Hana, ¿te parece llevar a Kata asta tu casa?-

Hana se estaba agobiando. Le costaba pronunciar palabras así que solo movió la cabeza de arriba a abajo. Kata se reiría un poco.

-Nosotros llegaremos muy tarde así que no nos esperen- Añade Natru.

Tras eso Kata y Hana se van para el ascensor y después salen del edificio. Hana intentaba mirar el móvil o hacer que estaba ocupada. No quería mantener una conversación con Kata. No porque le caiga mal si no porque, al ser la hija de Nejiru es indirectamente elección de su padre y Hana odia todo de él, todo lo que hace, elige o piense. 

-Oye, ¿me das tu numero?- La pregunta de Kata la saca de sus pensamientos.

Hana da un pequeño salto ya que se había asustado -Ahm...claro- le dictara su numero y Kata le daría el suyo.

-¿Te parece si nos ponemos "hermanitas" de nombre?- Dice Kata entusiasmada.

-Ahm...lo siento, pero preferiría tener una relación formal contigo- Le responde Hana sería. Ya se había acostumbrado a Kata y se podía expresarse libremente.

Tras esa respuesta hubo un largo silencio. Por fin, tras mucho tiempo Hana podía estar tranquila sin sentir la necesidad de hablar.

Kata

¿Qué le pasa a esa niña? Se hacía esa pregunta la rubia. Intentaba llevarse bien con ella ya que iban a vivir juntas y serán hermanastras. Lo bueno, es que ya llegaron a casa. Desde fuera ya parecía grande y al entrar aún más. Aún que por dentro, a la casa le faltaba decoración -¿No es todo muy gris?- pregunte a Hana para sacar tema de conversación. La are mantener una conversación aún que sea lo ultimo que haga.

-Para las veces que me fijo en la decoración esta bonito- Responde Hana yendo a su habitación.

-¡¿No me enseñaras la casa?!- grite sorprendida.

Hana da un suspiro y me coge de la mano -Mira, ahí tienes el baño, ahí la habitación del viejo, aquí esta mi habitación, ahí el salón y ahí la cocina- me señalo todo con su mano. Me fijé en que es muy delgada.

-¿Dónde voy a dormir?- En su casa no había habitación de invitados y me niego a dormir con mi madre y el señor Natru.

-Yo que se, no me preguntes cosas que no se- Responde Hana en un tono muy molesto y cierra la puerta de golpe.

Hana

Una vez en su habitación se tira en la cama. No aguantaba que le hagan preguntas y menos que no tenga respuesta para esas. Pero poco le duro esa felicidad de estar en calma ya que Kata entro a la habitación y se tumbo con ella en cama dandole un abrazo.

Hana sorprendida la intenta apartar -¿Qué hacer?- 

-Pasar tiempo con mi hermanastra- le responde Kata mientras la abraza más fuerte y observa la habitación. 

Esta tenia las paredes de un color pastel y lleno de postres y figuras de anime. El escritorio estaba ceca de la ventana y arriba de este, estaba un trozo de tela verde con un escudo y dos alas dentro. Las estanterías estaban llenas de manga.

-¿Eres friki?- Le pregunta Kata sorprendida.

-¿Algún problema?- Le respondí intentando apartarla de mi ya que ni respirar podía.


Corazon de azabacheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora